Ciudadanos:
Dr. Mario Villaroel. Presidente de la Cruz Roja Venezolana
Dr. Peter Grohmann. Coordinador del Sistema ONU en Venezuela
Dr. Carlos Alvarado. Ministro de Salud de Venezuela
Dr. Julio Castro. Asesor de Salud del diputado Juan Guaidò
Dr. Gerardo de Costo. Jefe de la Oficina de la OPS en Venezuela
Reciban nuestros respetuosos saludos y más altas consideraciones en esta oportunidad de plantearles lo siguiente:
Es conocido por múltiples declaraciones públicas en el ámbito internacional que las vacunas contra la enfermedad COVID-19 están en un acelerado proceso de aprobación, entre ellas destacan tres cuyas pruebas están en sus últimas fases antes de iniciar el ciclo de fabricación, distribución y venta.
AstraZeneca
Pfizer Corporation Moderna Inc.
Llama poderosamente la atención que los grandes ejecutivos de esas empresas y los jefes de gobierno y estado de los países más ricos y desarrollados han ido estableciendo acuerdos según los cuales serán las poblaciones de esos países las primeras en recibir los productos finales contra el virus. Ello significa una abismal injusticia y una discriminación casi genocida contra los miles de millones de habitantes del planeta que no recibirán la vacuna en los tiempos más oportunos mediante un sistema de distribución que debería ser equilibrado, igualitario y racional.
Los medios financieros estiman, por otro lado, que el precio de venta de cada inyección podría oscilar entre 20 y 25 dólares americanos lo que hace para algunos países casi imposible inocular a sus grandes poblaciones por falta de recursos. El costo para Venezuela sería de aproximadamente 500 millones de dólares.
Nuestra petición a ustedes se contrae al hecho de solicitarles muy responsablemente que en forma conjunta y en nombre de los organismos y organizaciones que ustedes representan hagan llegar al Secretario General de las Naciones Unidas Dr. Antonio Guterres, así como a la junta directiva de esas tres empresas que desarrollan el antídoto contra el COVID 19 y en nombre de la humanidad entera, nuestra preocupación ante el posible hecho de una discriminación planetaria contra las poblaciones más pobres que son precisamente las más débiles, las más afectadas, las de mayor riesgo.
La creación de un Fondo de Ayuda Global donde tanto el Banco Mundial como otras instituciones financieras gubernamentales o multilaterales contribuyan para la adquisición y distribución gratuita entre los países más pobres de la tan ansiada vacuna es una iniciativa histórica y de salvación de millones de vidas.
Gracias de antemano por todas las iniciativas y diligencias que pudieran hacer para evitar los males derivados de una injusticia de tamañas dimensiones.
Por Avanzada Progresista
Presidente: Henri Falcón / Secretario General: Luis Romero
Caracas 24 de julio 2020