Estados Unidos anunció este jueves que suspendió los vuelos chárter privados a todos los aeropuertos de Cuba, incluido el de La Habana, después de que a principios de este año adoptara una medida similar con los públicos.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, informó en un comunicado que había solicitado hoy al Departamento de Transporte de EEUU la paralización de los vuelos chárter privados.
«Esta acción suspenderá todos los vuelos chárter entre Estados Unidos y Cuba sobre los que el Departamento de Transporte ejerce jurisdicción, excepto los vuelos chárter públicos autorizados hacia y desde La Habana, y otros vuelos chárter privados autorizados por motivos médicos de emergencia, búsqueda y rescate, y otros viajes considerados de interés para EEUU», explicó Pompeo.
El jefe de la diplomacia estadounidense aseguró que su Gobierno continuará teniendo como blanco y cortando los ingresos del Ejecutivo cubano provenientes de tasas de aterrizaje, estancias en hoteles propiedades de las autoridades de Cuba y otras ganancias generadas por los viajes.
«Los servicios de Inteligencia y del Ejército cubano poseen y operan la gran mayoría de hoteles y la infraestructura de turismo en Cuba -subrayó Pompeo-. Instamos a los viajeros de todas las nacionalidades a que evalúen esto y tomen decisiones responsables respecto a viajar a Cuba».
«La suspensión de los vuelos privados chárter denegará recursos económicos al régimen de Castro e inhibe su capacidad de llevar a cabo abusos», subrayó el titular de Exteriores.
El pasado 10 de enero, Pompeo anunció la suspensión de todos los vuelos chárter públicos a Cuba, excepto a La Habana, lo que afectó a nueve aeropuertos de la isla, menos el José Martí de la capital cubana, que aun así vio limitado este tipo de vuelos.
A finales de octubre de 2019, Washington prohibió los vuelos comerciales desde su territorio a todas las ciudades de Cuba con la excepción de La Habana.
Los vuelos chárter son empleados por muchos cubano-estadounidenses para viajar desde Miami (Florida, EEUU) a Cuba.
Esa clase de vuelos solo permiten viajar a un número limitado de personas y dependen en su mayoría de empresas localizadas en el estado de Florida, donde viven muchos cubano-estadounidenses.
Pompeo señaló que el mensaje de su país a Cuba es claro: «Estados Unidos seguirá defendiendo al pueblo cubano y contra los abusos del régimen y su interferencia en Venezuela para fomentar el mantenimiento ilegítimo del poder por parte de (el presidente, Nicolás) Maduro».
Fruto del deshielo iniciado en 2014, los Gobiernos del entonces presidente estadounidense, Barack Obama, y de su homólogo cubano, Raúl Castro, anunciaron en diciembre de 2015 un acuerdo para restablecer los vuelos regulares directos, lo que sirvió para fomentar los viajes de ciudadanos estadounidenses a la isla.
Sin embargo, desde que llegó a la Casa Blanca en enero de 2017, el presidente Donald Trump ha endurecido la política hacia la isla con reducciones del personal diplomático, el aumento del embargo comercial, restricciones a los cruceros y límites a los viajes de estadounidenses a la isla.
En octubre pasado también entró en vigor una nueva tanda de medidas que, entre otras cosas, revocaban las autorizaciones que permitían a empresas estadounidenses alquilar aviones a aerolíneas del Gobierno cubano, como la estatal Cubana de Aviación.
EFE