En Mérida los transportistas de cosechas deben esperar hasta 8 días por un salvoconducto que les permita poner gasolina. En ese tiempo, hortalizas y frutas se pudren.
Desde que comenzó la venta de gasolina con nuevos precios y medidas el pasado 1° de junio, en Mérida, Táchira y Trujillo el combustible no alcanza ni para los sectores priorizados por la pandemia del COVID-19, que prestan servicios indispensables.
La región andina del país no tienen gasolina suficiente ni para abastecer vehículos de sectores indispensables como salud, transporte de alimentos y transporte público, entre otros considerados prioritarios desde que comenzó la cuarentena nacional por la pandemia del COVID-19.
La venta de gasolina para particulares, que se reanudó en todo el país el pasado 1 de junio tras estar suspendida por la cuarentena, duró de forma ininterrumpida en Mérida y Trujillo apenas 3 semanas. Desde el pasado 22 de junio solo venden gasolina a particulares durante las semanas de flexibilización, es decir, cada 15 días.
En Táchira no hay venta de gasolina para particulares desde el pasado 12 de julio. Solo pueden surtir algunos vehículos de sectores priorizados.
En Táchira, por su parte, no hay venta de gasolina para particulares desde el pasado 12 de julio. Solo los sectores priorizados pueden surtir, pero al igual que en Mérida y Trujillo, no todos los vehículos pertenecientes a los mismos logran hacerlo. Autoridades se encargan de elaborar listas cuyos cupos y cantidad de litros por vehículo se han ido reduciendo conforme avanza la escasez del combustible.
La particularidad del estado fronterizo ha incidido en el incremento del precio de la gasolina en el mercado negro. Una pimpina, que contiene aproximadamente 20 litros, se cotiza en 100.000 pesos colombianos, unos 30 dólares. En Mérida y Trujillo, por su parte, el litro de gasolina revendida está entre 2 y 4 dólares.
Médicos y transportistas de cosechas se quedan sin gasolina en Mérida
Recién comenzó la venta de gasolina el pasado 1 de junio, conductores de Mérida podían surtirse de gasolina a precio subsidiado por terminal de placa en pocas horas. La gasolina al precio internacional de 0,5 dólares por litro era un lujo que pocos se daban, sin hacer cola, sin cronograma por terminales de placa ni límites en cantidad de litros a poner.
En esta entidad desde finales de junio las colas y la desesperación de la gente por poder echar gasolina han ido aumentado. Aunque están prohibidas las colas nocturnas para las estaciones de servicio subsidiadas, conductores pernoctan en calles de urbanismos adyacentes para salir corriendo a formarse en filas a las 5:00 am., horario a partir del cual está permitido hacer cola. Las gasolineras actualmente cierran a las 2:00 pm.
En las estaciones de servicio internacionales, usuarios hacen colas por hasta tres días para poder surtirse de combustible. El pasado martes 25 de agosto se registró una trifulca donde conductores se dieron golpes en disputa por la ubicación de sus puestos en una cola de gasolina de la ciudad de Mérida. Personas reportan a El Pitazo que los puestos en estas filas los venden hasta en 30 dólares.
En el caso de los sectores priorizados, personal sanitario y transportistas tienen cada vez menos cupos y menor cantidad de litros para surtirse. Médicos del principal hospital centinela del estado denunciaron el pasado 20 de agosto que les redujeron los cupos de 140 a apenas 40, y solo pueden poner un máximo de 30 litros de gasolina por vehículo.
Los transportistas de hortalizas y frutas, por su parte, pasan hasta 8 días a la espera de un salvoconducto que les permita comprar gasolina, tiempo durante el cual algunas cosechas se pudren. Cuando les otorgan el permiso, apenas pueden poner entre 20 y 30 litros de combustible.
En junio los usuarios esperaban con un día de antelación y actualmente pueden pasar hasta una semana en colas para abastecerse de gasolina en Trujillo
A Trujillo llega menos del 30 % de la gasolina necesaria
En Trujillo, por su parte, desde mediados de julio hasta la actualidad conductores de los municipios priorizados por la Zona Operativa de Defensa Integral (Zodi) como Valera, Trujillo y Boconó, donde existe mayor concentración poblacional, pasan entre 3 y 7 días en cola para poder poner gasolina a precio subsidiado. En otros municipios retirados de estas ciudades, el despacho se retrasa hasta por 20 días.
En las gasolineras con precio internacional ocurre algo similar. Al principio los usuarios accedían al combustible en pocos minutos. Sin embargo, desde mediados de julio hasta la fecha tienen que hacer largas filas y someterse a racionamientos de litros y cupos diarios limitados de vehículos.
El gobernador de Trujillo, Henry Rangel Silva, adjudicó estos problemas a la disminución del volumen de combustible traído a la región. Aseguró que Pdvsa distribuye 190.000 litros y se necesitan en promedio 700.000 litros diarios para satisfacer la demanda.
Por otra parte, usuarios denuncian que funcionarios de la Guardia Nacional (GN) solo permiten surtirse de gasolina a entre 50 y 70 vehículos por cola, pero mantienen otra lista paralela de usuarios VIP, generalmente enviados con el aval de la Zodi o, de acuerdo a las denuncias de los afectados, porque pagan en dólares a los uniformados o dueños de los establecimientos.
Esta situación ha causado el descontento de los conductores, quienes desde el 24 al 28 de agosto ha protestado en cinco ocasiones en los municipios Valera, Boconó, Trujillo y Carvajal. Los manifestaciones han cerrado el paso en varias vías para exigir la venta de la gasolina de manera justa y oportuna.
Con información de María Fernanda Rodríguez, María Gabriela Danieri y Lorena Bornacelly – El Pitazo