Debido a la falta de combustible, el patrullaje en las comunidades por parte de funcionarios policiales, en el estado Apure, están prácticamente desaparecidos, situación que aprovechan los antisociales, quienes no pierden tiempo para entrar a las viviendas en horas de la madrugada, y asaltar en vías públicas cuando los habitantes se desplazan a realizar sus labores diarias.
Son contadas las unidades motorizadas que se observan en las calles y de manera poco regular, producto de la ausencia del combustible, lo lamentable del caso es que aquellas tradicionales y emblemáticas patrullas que encendían sus cocteleras ante cualquier operativo y eran muy llamativas hoy desaparecieron, están fuera de funcionamiento, unas por fallas mecánicas y otras por escasez de gasolina, la inversión para su mantenimiento es altamente costosa y el gobierno simplemente se hace de la vista gorda.
Un oficial de la policía del estado, quien por razones de seguridad pidió mantenerse en anónimo, declaró para Punto de Corte Apure, la situación que atraviesa esta fuerza policial.
“Es muy difícil la situación de la policía en el estado, somos los peores pagados, con sueldos que dan lástima, sin dotaciones, con uniformes desgastados que si los detallan bien se dan cuenta que tienen parches por todas partes, ¿Cómo podemos hacer patrullajes en las noches por las comunidades si no tenemos combustible?”, precisó el funcionario.
Además, comentó “las tazas de criminalidad están aumentando y es producto de la ausencia de nuestra presencia, pero eso escapa de nuestras manos, solo somos subordinados de quien se apoderó del control total del combustible que entra al estado”.
“Ante la sociedad somos los peores, no quiero justificar ninguna acción pero nos ha tocado reinventarnos para sobrevivir, con nuestros sueldos y sin seguros, seguimos en la calle resteados con el compromiso de servir, nuestras familias también viven y sufren día a día la calamidad de los apureños y no dudo que de todo el país”, manifestó.
Semanas atrás, se lograba apreciar los patrullajes que realizaban estos funcionarios en las barriadas y urbanizaciones, contaban con un bus y varias motos, todo con el fin de supervisar el cumplimiento de la cuarentena en estos sectores, ya hoy la ausencia es bastante notoria, y en aumento los robos de viviendas.
Llegamos a conocer de antemano la existencia de grupos de vecinos que decidieron organizar círculos o redes sociales de seguridad para turnarse y vigilar sus sectores. Según manifestaron ellos mismos, no les temblará el pulso para defender lo que con mucho sacrificio les ha costado adquirir, se hacen llamar “Los Exterminadores”.
Punto de Corte