Einstein Millán Arcia: Pdvsa; el condensado iraní y la narco gasolina

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Revuelo y alegría causó en Venezuela la llegada de un “carguero” procedente de Irán con unos 2 millones de barriles de condensado. Lejos de haber causado alegra más bien fue un hecho que debió haber causado indignación, ya que refleja el estado de profunda descomposición de PDVSA. Refleja el estado de deterioro y pésimo manejo de una empresa que pasó de ser autosuficiente a dependiente, desde mucho antes de las sanciones.

Por supuesto; las sanciones son un acto criminal que ha terminado por enterrar Venezuela, con la anuencia de parte de una sociedad incapaz de ponerse de acuerdo, pero dispuesta a traicionar su patria. Sanciones criminales apoyadas por políticos señalados como corruptos, estafadores y traidores [https://noticiasaldiayalahora.co/nacionales/patricia-poleo-revelara-crimenes-federales-ligados-al-gobierno-de-guaido/], cuyo principal objetivo es causar el mayo daño posible al pueblo más necesitado ante su expresa incapacidad de aglutinar votos.

Las reservas:

Muchos en nuestro cada vez más desinformado país piensan que Venezuela solo posee reservas probadas de crudos pesados y extrapesados (X/Xp). Hasta el cierre de 2017 aparte de los 261.3 millones de barriles (MMBbls) de reservas de crudos X/Xp, Venezuela contaba con 22.780 MMBls de reservas probadas de condensados, livianos y medianos (C/L/M); de los cuales 2.500 millones correspondían a hidrocarburos condensados (retrogrados). Substrayendo el volumen producido desde 2017 y suponiendo que no hayan sido abonadas nuevas reservas, el volumen remanente de hidrocarburos C/L/M, aun permanece alrededor de 21.700 MMBbls, de los cuales cerca del 45% de ellos aun permanecen sin desarrollar.

Para tener idea de la magnitud relativa de esos 21.700 MMBbls de reservas probadas de C/L/M con que aun cuenta Venezuela, toda la base de recursos que apuntala el plan de negocios de ExxonMobil en Guyana y que los ha llevado a exponer un capital de unos $35.000 millones en los próximos cinco (5) años, reposa y se sostiene sobre un volumen de “recursos” y no reservas, de tan solo 8.000 @ 9.500 millones de barriles [https://corporate.exxonmobil.com/News/Newsroom/News-releases/2020/0127_ExxonMobil-ups-Guyana-recoverable-resources-to-more-than-8-billion-oil-equivalent-barrels].

A diferencia de PDVSA que reporta reservas probadas; las cuales y aunque muchos difieran, hasta que se demuestre lo contrario son reservas técnica y económicamente viables y además probadas en campo por pozos que han sido extensamente explotados, ExxonMobil reporta recursos, lo que significa que no garantizan que ese volumen entrampado en sitio sea económicamente viable.

Ciertamente existen variables que moldean las ganancias. Variables externas como los mercados, el precio del barril y la complejidad geopolítica; también internas como la eficiencia, costos de producción, productividad, insumo tecnológico y visión de conjunto de la empresa operadora encargada de producir dichas reservas. Estas ultimas son a la postre los intangibles que marcan la diferencia y es allí donde PDVSA y los distintos gobiernos Venezolanos precisamente han fallado.

No se culpe a las reservas del fracaso de PDVSA en producirlas y/o hacerlas producir, cúlpese a la miopía e ineptitud de las distintas directivas, incluida la directiva actual. Cúlpese a la inmensa corrupción y complacencia del estado y sus instituciones. Cúlpese a la indolencia, la ineptitud y la corrupción.

Narco-Gasolina; Los eslabones perdidos:

Entendiendo que el 2003 estuvo afectado por las consecuencias del nefasto sabotaje petrolero, nuestras refinerías comienzan a evidenciar una disminución en el rendimiento de producción de gasolinas a partir de 2006. Cambios en el rendimiento que se corresponden con un aumento de alrededor del 100% desde 14.000 BPD en 2003 a 27.000 BPD en 2006, en el nivel de importación de crudos y productos refinados. Que se corresponden con una caída sensible en la producción de segregaciones livianas y medianas, que alteraron el patrón de composición de los insumos (feedstock) a nuestras refinerías y que terminaron por afectar el rendimiento en la producción de gasolinas, mientras “extrañamente” se desataba el consumo interno desde 72% de la gasolina producida en 2004 @ 92% durante 2007.

Entre 2006 y 2012 la necesidad de importación de crudos y refinados se expandió hasta 81.000 BPD, mientras que Venezuela cambió de ser exportador a importador de gasolinas hasta llegar a 27.000 BPD en promedio; es decir, de cada 3 barriles importados, 1 era de gasolinas.

Entre 2005 y 2008 incrementa en casi 90.000 BPD el consumo interno de gasolinas, mientras la producción interna se mantenía alrededor de 310.000 BPD, a un nivel similar al del periodo 1996-2005. Algunos aducen como posible razón de dicho incremento en el consumo interno, a una supuesta expansión de la masa vehicular que en realidad no fue tal.

Otros sostienen que se debió a un abrupto incremento del contrabando de extracción, ya que esos 90.000 BPD coinciden de forma precisa, con el volumen de contrabando tradicional desde Venezuela. Solo hacia colombia la extracción ilegal de gasolina Venezolana sufrió un notorio incremento entre 2005 y 2015 cercano al 40% al pasar de unos 50 MBD @ 70.000 BPD. Si a ello le añadimos el desangre hacia el Caribe, Guyana y Brasil la cifra se aproxima a 100.000 BPD de gasolinas que se fugaban diariamente por nuestras fronteras.

Según articulo publicado [https://www.ecopoliticavenezuela.org/2018/10/24/la-verdad-contrabando-gasolina-drogas-la-degradacion-etno-ecologica-las-fronteras-venezuela-colombia/] por el observatorio de Ecología Política Venezolana, 80% de la gasolina de contrabando hacia Colombia, era distribuida “sorpresivamente” por tres empresas: Vetra, Petromagdalena y Pacific Rubiales.

Entre 2009 y 2014 cuando el contrabando hacia colombia tuvo su mayor efervescencia, las directivas de estas empresas estaban o estuvieron ligadas a H. Calderón Berti, R. Pantin, L. Giusti y varios otros “mitocratas” ex PDVSA, hoy representantes [https://www.aporrea.org/energia/a292324.html] de la putrefacta PDVSA Ad hoc.

No por nada PetroMagdalena es el nombre con el que era conocida Alange Energy [https://settysoutham.wordpress.com/2012/04/17/alange-petromagdalena-pmd-2011-results-analysi/], la misma empresa de la presunta estafa donde aparece involucrado L. Giusti [https://www.aporrea.org/energia/a292324.html].

Más adelante, un grupo liderado por L. Alejandro Betancourt asociado a la empresa Derwick y PDVSA durante tiempos de Ramírez, se convertiría también en el mayor grupo de accionistas de la empresa Pacific Rubiales, con 19,5 % de sus acciones. En 2015 Gladys N. Parada, ex directora de Mercado Interno de Petróleos de Venezuela y prima de José L. Parada, muy cercano a Ramírez, apareció señalada de “distracción de combustible” hacia colombia.

Puertas adentro:

Mientras por un lado se fugaban por las fronteras de Venezuela cerca de UN TERCIO (1/3) de las gasolinas producidas, por el otro lado disminuía la producción de nuestras refinerías y se catapultaban las importaciones para satisfacer “la extraña demanda inorgánica”. Mientras entraba dinero producto de la renta petrolera, esa criminal hemorragia diaria e imparable hacia ese nefasto vecino, pasaba prácticamente desapercibida.

Junto al anterior desangre, la descapitalización progresiva de PDVSA originada por los desaciertos de Ramírez y Del Pino llegada la caída del barril, abrieron finalmente la tronera maloliente que se reflejaría con fuerza llegado 2015-2016.

Futuros desaciertos e incompetencia durante las gestiones sucesivas de Quevedo y ahora A Chávez quien lleva más de 20 años en la directiva, terminaron por complicar el panorama de Venezuela en torno a la gasolina, ya que nada hicieron por procurar cambios mientras pudieron haberlo hecho antes de arreciadas las sanciones, particularmente las impuestas a partir de 2019. A partir de entonces se acelera la debacle.

Opuesto a lo que se debió haber hecho, optaron por aumentar la dependencia de las importaciones. Optaron por expandir el gasto en un país que venia sufriendo de un estrangulamiento gradual desde 2011-2012 y no de tomar acciones correctivas y sostenibles;

*No procuraron estabilizar nuestras refinerías y producción

*No disminuyeron la dependencia de las importaciones, ni el consumo interno de un producto que progresivamente escaseaba como la gasolina

*Crearon mayor dependencia de exportaciones improductivas que no abonaban flujo de caja

Es así como para 2019 el nivel de importación de crudo y refinados superaba los 180.000 BPD a la par que el nivel de utilización de nuestras refinerías se desplomaba hacia menos del 10%.

Hoy con el mismo incompetente que por sobre 5 lustros ha calentado las sillas de pent house de la campiña, optan por remendar refinerías en un ambiente financiera y operacionalmente ya colapsado, que hoy depende de las dadivas y favores de un país; por ahora aliado ubicado del otro lado del mundo, que apenas satisface su propia demanda interna para poder medio sobrevivir.

Se alegran los venezolanos mientras más los estrangulan desde adentro y desde afuera. Van como Delgado Chalboud directo hacia la estaca, pero van felices.

Asesor Petróleo y Gas “Upstream” & RE SME/Estudios de Especialización a nivel de doctorado en flujo de fluido en medios porosos – The University of Oklahoma, 1991 / Master of Science Petroleum Engineering – The University of Oklahoma, 1990 / Ingeniero de Petróleo Universidad de Oriente, 1979. Ha publicado y presentado en diversas revistas y conferencias internacionales más de 12 trabajos especializados en materia de Petróleo y Gas. Ha escrito más de 300 artículos de opinión y sido citado en materia de petróleo y gas en: spglobal.com, aporrea.org, NoticiasVenezuela.org, Plattsblog, Oilpro.com, las armas de coronel, Vanguardia de España, segurosybanca.com, The Slush Pit (Oklahoma Oil & Gas News), Energy Economist, Kaieteur-news & Stabroeknews Guyana, Sputnik-news y Los Ángeles Times.

@EinsteinMillan

 

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