Una grave lesión al derecho humano a la Educación es la forma y fondo de la manera como se ha intentado la apertura del año escolar 2020-2021.
Muy comprometido el acceso a la Educación de calidad de las mayorías, ese que imponen la Constitución y las leyes para los dos subsistemas, el Básico y el Universitario.
Vamos de peor a híper-mal. Se bajó la Santamaria del Sistema Educativo Escolar para las mayorías. Quedó apenas una ventana abierta para el circuito de escolaridad que se acerca más a la excelencia. Las mayorías escolarizadas hundidas en la precariedad, poco importante desde la iniciativa estatal, puro globo de ensayo mediático. Muchas selfies caritativas de la alta burocracia y abandono real de las instituciones y el trabajo en Educación. Se sigue ampliando la brecha cultural-pedagógica entre quienes no saben o pueden nadar y los que se mueven como peces en el agua en este mar de sálvese quien pueda que tenemos desde 1999. Se disuelve el compromiso del Estado con la Educación de todos al son que toca la arrogancia sectaria y la incapacidad técnica para administrar la mejor opción que tienen los venezolanos para progresar social y culturalmente.
813 Memoria Educativa Venezolana, paso a paso