La Academia de la Historia del Estado Nueva Esparta, en uso de las atribuciones que le concede el artículo 4º de sus Estatutos, letra e, el cual reza: “Contribuir a la correcta interpretación de los sucesos y hechos históricos del Estado” y tomando en consideración las frases pronunciadas el pasado 12 de Octubre del presente año, por el Presidente de la República, una de las cuales afirma que “Francisco Fajardo fue un Genocida”, quiere hacer público el siguiente pronunciamiento sobre el tema:
Definición de genocidio
De acuerdo con lo definido en un Documento de 19 artículos, titulado Convención para la prevención y castigo del crimen del año 1948, la cual fue creada por la resolución 260 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, del 9 de diciembre de 1948 y que entró en vigor el 12 de enero de 1951, un genocidio es cualquiera de los actos perpetrados con la intención de destruir total o parcialmente un grupo nacional, étnico, racial o religioso
Origen de Francisco Fajardo, hijo
Francisco Fajardo, hijo, fue un margariteño, nacido en Palguarime, presumiblemente hijo de Francisco Fajardo, un Gobernador de la Isla de Margarita, de origen español nombrado por Aldonza Villalobos Manrique y su madre, la Cacica Isabel, india Guaiquerí de la Comunidad Indígena de nuestra Isla, situada en las inmediaciones de Porlamar. Francisco fue un Mestizo margariteño. Su abuelo fue el indígena, Charamaya y su bisabuelo de nombre Charaima, los cuales moraban en la costa central de nuestro litoral, entre Borburata y la costa Maya
Incursiones en tierra firme
Desde temprana edad aprendió a hablar español y el Chotomaimur, idioma de nuestros indios Guaiquerí y tuvo participación, desde muy joven en empresas allende la Isla de Margarita, tales como el poblamiento de la ciudad de Cumaná y posteriormente, la visita a sus parientes, comenzando por Píritu, Chuspa, Caruao y Naiguatá, entre otros. En esta primera incursión, Francisco Fajardo, hijo, quien hablaba la misma lengua de los caciques de la zona, trataba de convencerlos de adoptar una actitud pacífica, de convivencia, de colaboración y hermandad
En sus siguientes incursiones, acompañado de indios Guaiquerí y Cumanagoto, cumplió con los protocolos de solicitar permisos para colonizar espacios geográficos y no para conquistarlos; esos espacios que colonizó, fueron atacados por nuestros indígenas, manteniendo Fajardo su posición de desplazarse a otros sitios para no caer en controversias con sus hermanos indígenas. Siempre buscando la paz para construir y nunca la guerra para destruir.
Uno de los caciques indígenas que atacó más la presencia de Fajardo, en aquellos sitios en los cuales comenzó su período de colonización, a través de la fundación de pueblos, fue Paisana, sembrando el terror en los habitantes desplazados al envenenar las aguas del rio que surtía al Valle del Pan, causando la muerte de la madre de Fajardo, Doña Isabel, lo cual ocasionó la ira el Margariteño quien capturó a Paisana y lo ajustició. A Francisco Fajardo se le debe el haber sentado las bases para la fundación de Caraballeda y Caracas, la capital actual
Muerte de Fajardo
En su tercera incursión hacia el valle y litoral del centro el país, en 1564, Fajardo reunió tropa y dinero, lo cual no gustó al Justicia Mayor de Cumaná, Alonso Cobos, quien tenía el propósito de adueñarse de ciertas minas de esa región; este invitó a cenar a Fajardo quien, inocentemente aceptó, siendo traicionado por este, detenido, juzgado en forma brevísima y condenado a la horca y su cuerpo exhibido públicamente. Los indios Guaiquerí, al conocer este desenlace, comandados por el Justicia Mayor de la Isla de Margarita, se trasladaron a Cumaná, apresaron a Cobos, lo llevaron a la Isla de Margarita, condenado a muerte por la Real Audiencia de Santo Domingo, ahocado y descuartizado. Esta solidaridad indígena, es una muestra de su prestigio y el liderazo entre sus paisanos
Conclusiones
Vistas estas consideraciones, la Academia de la Historia del Estado Nueva Esparta concluye que Francisco Fajardo no fue un Conquistador sino un Colonizador; que sus acciones siempre estuvieron enmarcadas dentro el concepto de la paz y cumpliendo con las instrucciones de sus superiores, para la fundación de pueblos, que no existe ninguna evidencia documental histórica que avale o narre sus actuaciones y en las cuales se demuestren muertes de los indígenas litoralenses por parte del Margariteño, bajo el criterio de Genocidio; en este sentido, esta Institución, en nombre de la verdad histórica de nuestra identidad neoespartana, repudia la expresión de GENOCIDA dada a Francisco Fajardo, hijo, por parte del Presidente de la República en virtud de no haber sido demostrado ningún acto de exterminio ni contra sus hermanos indígenas ni contra los españoles residentes en los sitios visitados, por ningún motivo étnico, racial ni religioso
En La Asunción, a los quince días del mes de octubre del dos mil veinte.
Academia de la Historia del Estado Nueva Esparta.