Los analistas Maryhen Jiménez, Ricardo Sucre Heredia y Santiago Arconada ofrecen su visión sobre la importancia del nombramiento de Jorge Rodríguez como presidente de la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro. Destacan la importancia del dirigente y su cercanía al gobernante, pero creen que el primer vicepresidente del PSUV mantiene una ascendencia muy importante en el oficialismo.
Jorge Rodríguez llega a su momento más prominente pero aún no desplaza a Diosdado Cabello
Al asumir como presidente de la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez llega al cargo de mayor prominencia desde que se unió al proceso político impulsado por Hugo Chávez. Aunque fue vicepresidente de aquél en 2007 y presidió el Consejo Nacional Electoral (CNE), el Parlamento jugará en lo sucesivo un rol fundamental en el devenir político del país, tomando en consideración que se ha anunciado que se legislará para castigar las acciones impulsadas por la oposición en el período 2016-2021, y porque acometerá el desarrollo de la llamada ley antibloqueo, que permitirá al Ejecutivo disponer de activos de la nación sin dar detalles de las respectivas transacciones.
Evidentemente, la llegada de Jorge Rodríguez a la cabeza del Parlamento consolida la influencia de los hermanos Rodríguez (Delcy es la actual vicepresidenta de Nicolás Maduro) en la actual administración y a la vez genera preguntas sobre el movimiento de las piezas en el tablero del ajedrez oficialista: ¿Habrá desplazado el sector cercano al gobernante al otro pilar del llamado “proceso”, el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello? ¿Estará pensando el mandatario en un sucesor de confianza para una futura elección presidencial? ¿Se trata solo de un cambio de imagen en el Parlamento para hacer creer que se puede propiciar un diálogo nacional y al mismo tiempo ablandar posiciones en la comunidad internacional?
Lo cierto es que el rol de Cabello, aunque no sea la figura institucional del Parlamento, no ha decrecido. Quedó como jefe de fracción del PSUV, lo que quiere decir que es el articulador de las piezas del partido en la AN de Maduro y, como tal, tendrá ascendencia sobre las decisiones que tome la bancada, que cuenta con la casi totalidad de las curules.
Para dilucidar las interrogantes, TalCual conversó con los analistas Maryhen Jiménez, Ricardo Sucre Heredia y Santiago Arconada, quienes ofrecieron su visión sobre la trascendencia del nombramiento de Jorge Rodríguez como mandamás del Poder Legislativo.
¿Quién es Jorge Rodríguez?
Jorge Rodríguez nació en Caracas en 1965. Es hijo del dirigente político homónimo que fue figura clave en la lucha contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez y que, habiendo enfrentado también a los gobiernos de la llamada IV República, murió en la cárcel en 1976. Es médico psiquiatra egresado de la UCV, casa de estudios donde dio sus primeros pasos políticos como parte del llamado Movimiento 80, donde coincidió con otras figuras del chavismo, como Ricardo Menéndez, Elías Jaua y Juan Barreto. Luego de graduarse se dedicó a su profesión, manteniendo un perfil bajo en lo político.
Sin embargo, regresó a la arena política cuando figuró en la lista del comité de postulaciones para el cargo de rector del Consejo Nacional Electoral (CNE). Escogido como rector y presidente de la Junta Nacional Electoral, Rodríguez fue clave en la organización del referendo revocatorio contra Hugo Chávez, en la que éste fue ratificado en el cargo.
Pasó luego a presidir el CNE y, en 2007, fue nombrado vicepresidente, sucediendo entonces a José Vicente Rangel. Duró en el cargo un año, pero Chávez le comisionó para organizar la creación del PSUV, que sucedería al anterior Movimiento Quinta República (MVR). También fue jefe del comando de campaña en 2012, donde el mandatario fue reelegido.
Con Nicolás Maduro ha gozado de igual nivel de confianza; ha sido jefe del comando de campaña en las elecciones, fue su ministro de Comunicación e Información y jefe de la delegación de sus representantes en las diferentes instancias de diálogo que se han organizado con la oposición.
Rodríguez en la presidencia de la AN demuestra poder de Nicolás Maduro
En opinión de Maryhen Jiménez, doctora en Ciencias Políticas, la persona clave en todos estos movimientos verificados con la designación de la nueva directiva de la AN es Nicolás Maduro. Estima que al gobernante se le subestimó en un primer momento tras su llegada al poder, pero demostró que pudo mantener unido al chavismo y hacer una transformación del proceso político iniciado por su antecesor.
“Lo que vemos ahorita es una demostración de la magnitud del poder que tiene Nicolás Maduro y su capacidad de mantener cohesionado al chavismo y desplazar a figuras claves del movimiento original, que ocuparon cargos claves en la primera etapa del proceso con el propio Hugo Chávez, y ha logrado fortalecer a su élite, que responde directamente a él, donde figuran los hermanos Rodríguez, Iris Varela (primera vicepresidenta de la AN), y Didalco Bolívar (segundo vicepresidente). Vemos esa demostración de quién controla el partido”, asegura Maryhen Jiménez.
Advierte que, desde su perspectiva, esto no necesariamente implica que Diosdado Cabello no tiene poder, sino que es menor al que tuvo o al que aspiraba. “Sigue siendo jefe de fracción, vicepresidente del PSUV; maneja el Sebin, el Seniat lo maneja su hermano, y tiene su programa Con el Mazo Dando; así que tiene una incidencia, pero es menor a lo que hubiera esperado y eso es una demostración de que Nicolás Maduro ha logrado posicionar a su círculo más cercano, los pone en la directiva para demostrar ese poder”, detalló.
Rodríguez demuestra primacía de grandes familias en el oficialismo
El politólogo y psicólogo social Ricardo Sucre Heredia difiere de la visión de Maryhen Jiménez. Para él, realmente no hay un desplazamiento de la figura de Diosdado Cabello en el chavismo. Considera que se trata de una jugada política y que el oficialismo mantiene su cohesión, en la que cada pieza desempeña un papel determinado en cada momento.
“No veo de entrada esas disputas, esas cosas que si Maduro versus Cabello, éste versus Rodríguez. Veo una cúpula cohesionada. No quiere decir que no existan diferencias, cálculos o estrategias, pero en general es una cúpula aconsejada. No veo algo como peleas allí. En todo caso puede ser que surjan más adelante”, dice Sucre Heredia.
Al querer dar una imagen de una AN renovada, que inicia un nuevo ciclo, evidentemente no puede ser Diosdado Cabello el presidente, explica Sucre Heredia. “Es una figura polarizante, de armas tomar, de cortar cabezas, que tiene fama de duro; es obvio no podía ser la escogencia, no sería un buen arranque, no quiere decir que más adelante no lo pueda ser. Yo no esperaba que fuera Diosdado, pensaba en Jorge o Tania Díaz, ese tipo de figuras”, indica.
Ricardo Sucre Heredia
Considera que Jorge Rodríguez comunica lo que es la cúpula del PSUV: las grandes familias, los Maduro-Flores, los Rodríguez-Gómez, los Cabello-Contreras, “comunica que las grandes familias se afianzan”, sostuvo.
Añade que Rodríguez es un operador político, aunque tiene peso político propio. “Es una persona muy cercana a Maduro, cerró su discurso dedicándole un poema de Pablo Neruda. Hay una relación muy cercana entre ellos dos”, comenta, al tiempo de resaltar que no solo el exministro ha estado en los diálogos con la oposición, sino que también se reunió con la representación de Donald Trump, así que su imagen está a medio camino entre la amplitud y la lealtad al proceso.
No tiene poder real
Una postura similar tiene el investigador, activista social y político Santiago Arconada, quien asegura no tener la sensación de que las nominaciones al interior de la AN puedan reflejar claramente los niveles de poder en el oficialismo.
“No me parece que carezca de significación, que deje de tener sentido, pero no lo veo tan relevante. Si me dicen que a Diosdado Cabello le quitan Con el Mazo Dando, puedo creerlo. Probablemente esa designación pudiera darle facilidad de movimientos a nivel de relaciones internas del PSUV”, argumenta el analista.
Tampoco está de acuerdo Arconada con que se hable de la familia Rodríguez-Gómez, englobando a los hermanos. “Tienen afinidad de familia, pero no me parece una manera respetuosa de tratar al adversario. Cuando vea que los militares que van al programa de Diosdado a decir presente lo hagan ante Jorge y Delcy Rodríguez, que van a cuadrarse ante ellos, eso sí será una manifestación de poder. Los militares tienen poder de fuego; lo otro no me parece que tenga elementos de ascenso en lo que le queda al oficialismo en la base popular”, apunta.
Santiago Arconada
Afirma que, en cambio, lo que manifiesta Diosdado es el poder real: “El económico, y todo lo que representa su programa, que se hace con mucho dinero, y porque sigue con un control de mandos militares que lo quisieran tener otros”.
Rodríguez y la dudosa apertura hacia el diálogo
En cuanto a la posibilidad de una apertura al diálogo, Maryhen Jiménez señala que, si bien Jorge Rodríguez ha sido el representante de Nicolás Maduro en estas instancias, en la nueva directiva la primera vicepresidenta es Iris Varela, de quien dijo es parte de los sectores más radicales del oficialismo.
“Básicamente tenemos ese contraste. No vemos a un chavismo dispuesto a democratizarse, por lo menos en este momento. Esa posibilidad de crear algún tipo de espacio de diálogo, no quiero decir que vaya a ser honesto, estamos juzgando por lo que hemos visto mencionado en el discurso”, destaca Jiménez.
Señala que Iris Varela, exministra de Asuntos Penitenciarios, siempre ha sido una voz bastante radical y fuerte ante los sectores opositores. “Se mantiene la línea dura junto a una aparente pro diálogo y reconciliación”.
Acota además que el discurso de Jorge Rodríguez no es consistente con su llamado al diálogo. El presidente de la AN de Maduro expresó que no puede haber perdón con amnesia, y a juicio de la analista, puede venir una persecución a elementos de la oposición que no quieran asistir a esos llamados al diálogo.
Apertura, pero no hacia el G4
Ricardo Sucre Heredia no piensa que la designación de Jorge Rodríguez como presidente de la AN sea un mensaje para la oposición en general. “El problema del gobierno de Nicolás Maduro no es la oposición ahorita, es cómo ponen a funcionar la AN”.
Cita el docente de la UCV que Cabello dijo que va a costar mucho darle vida a esta AN, y que Rodríguez afirmó que hay que reconstruir y que destruir es más fácil, por lo que el problema del oficialismo es cómo se reconstruye eso.
“Por lo que entiendo de lo que dijo Rodríguez, eso pasa por dos cosas que parecen contradictorias, castigo, que llaman justicia, algo a lo que le dedicó bastante tiempo en el mensaje y que hace evidente que se actuará contra (el presidente de la AN que declaró su continuidad) Juan Guaidó y su gente, y lo segundo por abrirse al país, no al G4, sino a otros sectores”, precisa.
Observa Sucre Heredia que el problema para el gobierno va más allá del G4, al que ya no la ven como una amenaza, por lo que la tarea de hacer funcionar la AN tendrá como objetivo tratar de poner coto a los excesos del gobierno, que el autoritarismo tenga un contrapeso.
Añade que la designación de Iris Varela es un mensaje a las bases chavistas: “Vamos a ser leales al proceso, a lo que somos, ella es la mejor, guerrera, una que no se rinde, la que hizo propuestas de cortar cabezas en la campaña”, sería ese mensaje.
No hay actitud de tolerancia
A su vez, Santiago Arconada, expresa que la imposición de la directiva no es una manifestación de actitud. “Creer que a Diosdado Cabello se le impuso a pulso la presidencia de Jorge Rodríguez es algo que no creo. Habrá que ver quiénes están metidos en la entrega de Pdvsa, de los campos de producción, negociaciones que se están abriendo con la ley antibloqueo”.
En cuanto a que Jorge Rodríguez sea una figura con la que se busque “ablandar” las posiciones de otros países, sobre todo de la Unión Europea (UE), que no reconocen las elecciones parlamentarias, Arconada piensa que tal vez en un principio pueda ser considerado así, pero que realmente ese aspecto tiene un carácter más cosmético que una expresión real.
Tampoco cree que la figura de Rodríguez represente una posición de apertura. “Me parece que hay manifestaciones que, a pesar de que parezcan menores, son significativas. La provocación de la que fue objeto el diputado Óscar Figueras (secretario general del Partido Comunista de Venezuela), al quitársele la curul de esa manera (se apartó del lado donde estaba ubicado) no es el verdadero talante de unas personas que dirigen la AN. Lamento que Figuera no aprovechase esa oportunidad y dijera ‘me quedaré de pie pero no me van a callar’”, dijo en ese sentido.
Arconada resalta que la mejor imagen del país que tenemos a partir de 2021 la dan dos hechos ocurridos a comienzos de año, como fueron el desplome de la pasarela que comunica San Agustín del Sur con Parque Central, hecho en el que murió una persona y tres resultaron heridas, y la muerte en prisión del indígena pemón Salvador Franco.
¿Rodríguez presidenciable?
Sobre el último aspecto a evaluar, la posibilidad de que se esté preparando a Jorge Rodríguez para una eventual sucesión a Nicolás Maduro, Maryhen Jiménez expresa que, aunque alguna personas piensen que el chavismo no tiene relevo, se trata de una equivocación importante. “Tiene figuras importantes que ha venido preparando y que tienen esas intenciones, pero es prematuro pensar en un relevo”.
Agrega que es posible que Nicolás Maduro quiera seguir siendo candidato, al ver en la práctica que ha podido controlar a los sectores del chavismo y resistir las presiones internacionales sin precedentes que se han hecho al país en los últimos tiempos. “Habrá que ver si Jorge Rodríguez, mientras esté al frente de la AN primero tenga ese espaldarazo del gobernante, pero también si puede desarrollar la capacidad de controlar al partido”, advierte.
En tal sentido, refiere que Cabello tiene un trecho avanzado en esa materia y sigue siendo vicepresidente del PSUV. “Creo que estamos en una nueva fase en la cual Maduro ha aumentado su control; quizás es prematuro fichar a potenciales candidatos presidenciales. Pudiera figurar en un eventual proceso de negociación, que son las que posicionan a las élites de cara al futuro, pero no diría que es la premisa clave, hay mucha tela por cortar”, considera, al tiempo que llama a tener en cuenta a otros dirigentes más jóvenes, entre los que comienza a figurar el propio hijo del gobernante.
“Lo están preparando”
Sucre Heredia sostiene que da la impresión de que a Jorge Rodríguez lo están preparando para una eventual candidatura presidencial, y asegura que es un error considerar que su designación como presidente de la AN no es importante.
Sin embargo, insiste en que en el oficialismo no es acertado hablar de un número uno y un número dos, ya que, a su juicio, los cuadros se van moviendo de acuerdo al momento determinado. “Ellos saben jugar sus posiciones; si ahora le tocó a Diosdado Cabello esa posición la juega. Es un error de análisis por parte de la oposición decir que quedó como la guayabera. A lo mejor mañana le toca presidir la AN otra vez. Articular 250 diputados, junto a gobernadores y alcaldes es tener poder”, apunta.
Apariencias
Santiago Arconada afirma que no descartaría que eso (una eventual candidatura de Jorge Rodríguez) se esté manejando. “No descarto la lógica que ese pensamiento tiene. Todavía no creo que Diosdado se la ‘cale’. Esa disputa de poder no tiene mayores niveles éticos, no es ‘pasa tú primero y yo después’. Pienso que, un espacio donde se retrata personas del Alto Mando Militar, como el programa de televisión de Cabello, es un poder neto. Lo otro es imagen. Ni siquiera creo que esa designación fue una manifestación de fractura de los acuerdos que hay a lo interno del oficialismo. Me parece que es posible caer demasiado fácil en apariencias”, evalúa.
TalCual