El papa Francisco pidió este domingo el cese de la «terrible e inaceptable» violencia que sacude desde hace días la franja de Gaza y varias ciudades de Israel, y que ha causado cientos de muertos y heridos «inocentes, entre ellos niños».
El pontífice envió este mensaje tras el rezo del Ángelus y pidió que palestinos e israelíes retomen la senda del diálogo, también con la ayuda de la comunidad internacional, para que construyan «paz, justicia», y puedan convivir como hermanos.
«Sigo con gran preocupación lo que está ocurriendo en Tierra Santa. Los violentos conflictos armados en la franja de Gaza e Israel de estos días corren el riesgo de degenerar en una espiral de muerte y destrucción», advirtió.
«Numerosas personas han sido heridas y muchos inocentes han muerto, entre ellos también hay niños. Esto es terrible e inaceptable, su muerte es demostración de que no se quiere construir un futuro, sino que se quiere destruir», condenó.
Jorge Beroglio dijo que «el odio y la violencia creciente que está afectando varias ciudades en Israel es una herida grave a la fraternidad y a la convivencia pacífica entre los ciudadanos que será difícil de curar si no se abre el diálogo de inmediato» y se preguntó: «¿El odio y la venganza, a dónde llevarán?, ¿de verdad, pensamos crear paz destruyendo al otro?».
EFE