Hoy se cumple el 112° aniversario del nacimiento de Manuel García Pelayo. Me he tomado el atrevimiento, en nombre de su viuda Chelita Soriano de Garcia Pelayo, creadora de la Fundación que lleva el nombre de su marido, así como en el nombre de quienes tuvimos el privilegio de haber sido sus alumnos y colaboradores, de escribir esta nota onomástica, destinada fundamentalmente a las nuevas generaciones que no disfrutaron, ni podrán tener el privilegio que tuvimos unas decenas de alumnos, colaboradores, asistentes y/o simples lectores y seguidores de esa prolífica, sabia y enciclopédica mente que la Facultad de Derecho de la UCV, tuvo el honor y la distinción de albergar durante más de 40 años.
Desde su llegada a Venezuela en 1958 Manuel García Pelayo, fue invitado a crear y dirigir el Instituto de Estudios Políticos, cosa que hizo a plenitud hasta que se separó de su cargo en 1980 para dirigir los destinos del Tercer Poder del Estado Español: el Tribunal Constitucional de España en la recién reestablecida democracia de ese país, del cual fué su primer Presidente, hasta su jubilación.
Antes de venir a Venezuela, en 1958 , había permanecido un periodo en Argentina y otro en Puerto Rico; antes de ello había sido asistente de Ortega en Viena, y en su tierra había colaborado en la Guerra de España con la causa republicana habiendo llegado a desempeñar el cargo de Capitán de Estado Mayor de Ejercito y obtiene la medalla al Valor y posteriormente es recluido en un campo de concentración.
Manuel García Pelayo
Don Manuel éra fundamentalmente un intelectual dotado de una enorme fortaleza de carácter, una inteligencia excepcional, una capacidad de trabajo y de reflexión infinita y además uno de los investigadores y maestros más amantes formadores de alumnos y colaboradores que hayan pasado por nuestras universidades en cualquier área y en cualquier periodo de su historia. Poliglota dotado de un cultura global y universal dominaba el Inglés, el alemán, el latín, el francés y creo que un poco de griego. .
Se casó con la historiadora Graciela Soriano, a la cual estuvo unido hasta su muerte que ocurrió el año de 1991.
Don Manuel dictó centenares de horas de cursos, seminarios, conferencias, charlas, formó en influyó notablemente en el pensamiento de importantes políticos activos, expresidentes, constitucionalistas, politólogos, internacionalistas, pensadores e investigadores entre los cuales solo ad-memoriam cito algunos nombres que me vienen a la mente: L Gustavo Planchart Manrique, José Guillermo Andueza, Allan Brewer Carias, Luis Castro Leiva, y formó decenas de colaboradores entre los que recuerdo entre otros a Juan Carlos Rey, Humberto Njaim, Diego Bautista Urbaneja, Maruja Delfino, Jose Brito, Pedro Martínez, Andrés Stambouly, Jeanette Abouhamad, Carlos Leañez, Eva Josko de Guerón, Ricardo Combellas, Alfonso Dietmann, Hans-Joachim Leu , Juan Garrido y quien suscribe estas líneas.
Tuve el inmenso honor de haber sido miembro del Consejo Técnico del Instituto bajo su mandato y el primer Director de la Escuela de Ciencias Políticas cuando esta se creó el año de y bajo su estrecha orientación, se dieron los primeros pasos para inducir a centenares de jóvenes en esta disciplina.
Para tener una idea parcial de su obra, ya que existen decenas y quizás centenares de trabajos inéditos de su autoría, y sólo a titulo informativo la sola mención de sus libros, artículos y recensiones de obras o artículos de otros autores ocupa en la edición de sus Obras Completas unas 10 páginas de denso material y 2 la lista de sus entrevistas, teniendo ésta magna obra una extensión de 3379 páginas.
De la inmensa e importantísima obra de García Pelayo, llámo la atención a los lectores de esta pequeña recensión, sobre dos obras que considero cimeras en estos momentos de cambios y artículos relacionados con la política y la constitución. Una de ellas se denomina Derecho Constitucional Comparado, publicada por la Revista de Occidente en 1950 y reeditada docenas de veces, la cual es la primera obra magna en la cual se comparan los sistemas constitucionales de los EEUU, la Unión Soviética, Francia, Suiza y el Reino Unido y se hacen aporte esenciales a la Teoría del Derecho Constitucional de todos los tiempos, la segunda es un trabajo sobre Mitos y Símbolos Políticos, cuya lectura considero importantísima para entender el fenómeno del populismo y concretamente del acceso de Chavez al poder, y la tercera no es una obra sino la mejor definición de lo que les falta a nuestros mal llamados políticos y les sugiero que piensen en el fondo del mensaje de Don Manuel, si es que deciden después de leer esa nota si cumplen con los paradigmas que ella contiene.
Don Manuel interrogado por uno de los periodistas de una publicación denominada Boletin Informativo de la UCV, sobre el tema “Cualidades de los Políticos y necesidad de los Teóricos”, respondiendo a la pregunta del entrevistador “cuales son en su opinión las condiciones fundamentales de los políticos? responde, cito “ Yo creo que el saber político practico podría esquematizarce en estas cinco cualidades:
1) Saber que se quiere o conciencia de la finalidad;
2) saber que se puede o conciencia de la posibilidad;
3) saber que hay que hacer o conciencia de la instrumentalidad;
4) saber cuando hay que hacerlos o sentido de la responsabilidad o sentido de la oportunidad, y,
5) saber como hay que hacerlo o sentido de la razonabilidad.
Repito que ninguna de estas caulidades es producida por la formación teórica, ya que son originalmente innatas, pero no es menos cierto que dicha formación puede hacerlas fértiles.
Ojala que este aniversario del nacimiento de ese gran amigo de Venezuela, sea ocasión para quu estos consejos sean leídos, digeridos e implementados por nuestros políticos, quizás así llegaremos al principio del fin.
