Román Ibarra: JJOO Tokio 2020

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El origen de los Juegos Olímpicos se remonta a la Grecia antigua, disputados por representantes de las ciudades-estado a partir del año 776 a.C.

Se disputaban normalmente cada cuatro años o una Olimpiada. Durante la celebración de la competición se promulgaba la  tregua olímpica, para permitir a los atletas viajar en condiciones de seguridad desde sus polis hasta Olimpia. En los antiguos Juegos solo los hombres libres que hablaban griego podían competir, además de que se celebraban siempre en el mismo lugar.

Fuentes antiguas advierten, que entre los participantes más célebres estuvo Alejandro Magno, siendo adolescente, siglo IV a. C.

Los últimos Juegos Olímpicos de la Antigüedad se celebraron en el 393 d. C., casi doce siglos después de sus comienzos. ​ Tras la adopción del cristianismo como religión oficial del Imperio romano con el Edicto de Tesalónica (28 de febrero de 380), el emperador Teodosio prohibió toda celebración pagana, incluidos los Juegos Olímpicos. (Wikimedia Commons-Juegos Olímpicos Antíguos).

Los Juegos Olímpicos,​ ​ son el mayor evento deportivo internacional multidisciplinario en el que participan atletas de diversas partes del mundo. Los Juegos Olímpicos son considerados la principal competición del mundo deportivo, con más de doscientas naciones participantes. ​Existen dos tipos: los Juegos Olímpicos de Verano (los actuales) y los Juegos Olímpicos de Invierno, que se realizan con un intervalo de dos años, según la Carta Olímpica: «Los Juegos de la Olimpiada se celebran durante el primer año de una Olimpiada (cada cuatro años), y los Juegos Olímpicos de Invierno durante su tercer año».​

Los Juegos Olímpicos modernos se inspiraron en los Juegos Olímpicos de la antigüedad del siglo VIII a. C. organizados en la antigua Grecia con sede en la ciudad de Olimpia, realizados entre los años 776 a. C. y el 393 de nuestra era. En el siglo XIX, surgió la idea de realizar unos eventos similares a los organizados en la antigüedad, los que se concretarían principalmente gracias a las gestiones del noble francés Pierre Frèdy, barón de Coubertin.

El barón de Coubertin fundó el Comité Olímpico Internacional (COI) en 1894. Desde entonces, el COI se ha convertido en el órgano coordinador del Movimiento Olímpico, con la Carta Olímpica que define su estructura y autoridad.

La primera edición de los llamados Juegos Olímpicos de la era moderna se llevó a cabo en Atenas, capital de Grecia, a partir del 6 de abril de 1896. Desde aquella oportunidad, han sido realizados cada cuatro años en diversas ciudades del mundo, siendo las únicas excepciones las ediciones de 1916, 1940 y 1944, debido al estallido de la Primera y Segunda Guerra Mundial; así como la postergación de la de 2020 para 2021, debido a la pandemia de COVID-19.

Como se ve, es la cita deportiva que concita la atención, y la emoción del mundo entero. Evento que debería servir para sensibilizar a los pueblos del mundo, y luchar todos –más allá de los intereses políticos y económicos- en la búsqueda del bien común, la paz, y la prosperidad.

En el caso venezolano, esta ha sido la delegación más pequeña, y paradójicamente más elocuente en cuanto a triunfos y satisfacciones se refiere.

La actuación de cada uno de nuestros atletas nos ha puesto en vilo, ligando todos  sus triunfos y conquista de medallas, que bastante falta hacen en este contexto de deterioro, para darnos un poco de alegría. 43 muchachos que nos llenaron de orgullo, y satisfacción, a pesar de haber luchado en condiciones adversas.

Salvo la opinión polarizada de unos cuantos iracundos, e irracionales de bando y bando, los venezolanos de bien no hacemos otra cosa que celebrar la participación de nuestros muchachos. Que vivan nuestros atletas. Dios los bendiga a todos, aunque hoy por razones de espacio solo podamos mencionar a Yulimar Rojas; Daniel Dhers; Julio Mayora; Keydomar Vallenilla; Robeilys Peinado, Claudimar Garcés y Antonio Díaz. ¡Viva Venezuela!

@romanibarra

 

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