El doctor Ramiro Morales, miembro de la dirigencia de la Federación Médica Venezolana, y actual presidente de Copei (ODCA) de Caracas, señala que el actual proceso, que se vive a nivel político, con miras a las elecciones del 21 de noviembre, le ha permitido a su partido llevar a cabo una reestructuración de la organización en las 22 parroquias caraqueñas.
¿Su precandidatura a la alcaldía del municipio Libertador ha permitido reestructurar el Copei (ODCA) y como dice Rafael Poleo, hoy en día crece como hongo en la montaña?
-El objetivo nuestro era el de aprovechar el proceso electoral, para reestructurar el partido. Después se planteó lo de mi precandidatura, entre otras alternativas que había; luego de un análisis que hicimos, dada la posibilidad de proponerle al pueblo esa opción. Pero Copei está creciendo, porque ya logramos reestructurar el partido en las 22 parroquias.
-Ya yo tengo la ruta política organizada en esas 22 parroquias, con su respectivo secretario de organización, su respectivo secretario de control electoral y ya nos estamos preparando, para organizar los centros electorales, y designar los funcionarios que los van a conformar. Si el Frente Amplio decide que vamos a participar; como parece que va a ser así, ya el partido está preparado; para enfrentar ese reto que son las elecciones de noviembre.
Se habla de 9 precandidatos, que se han lanzado para alcaldía del municipio Libertador por el Frente Amplio, ¿cuál cree usted que puede ser la vía, para escoger el candidato unitario: o por consenso o por elecciones primarias?
-Según tengo entendido, son más de 9, se habla de 14 o 15 candidatos, y hay algunos que están como gallos tapados; que van a salir a última hora. Pero nosotros hemos tenido reuniones a través del Frente Amplio de cada parroquia, para llegar a ver si se puede esta semana en un consenso, de cómo vamos a escoger la candidatura.
-Yo voy hasta el final; pero yo no voy a montar tienda aparte, si yo no salgo favorecido; porque tenemos que tomar en cuenta las lecturas de cada candidato, desde el punto de vista de sus potencialidades. Si la candidatura mía, en el momento en que tengamos que escoger los candidatos, no está bien planteada, yo declino a favor del que esté mejor.
¿Cómo está el ánimo de la gente, con respecto a la participación electoral?
-Cada día se nota más el entusiasmo que hay en la gente, para la participación electoral. En el último recorrido que hicimos por La Pastora, la gente nos manifestaba; primero, que nos mantengamos en la unidad y, segundo, que vayamos a las elecciones; independientemente de las condiciones, que se están pidiendo. Nosotros sabíamos que no nos iban a dar el 100% de las condiciones, que estamos reclamando.
-Pero tenemos que participar; porque con los espacios con los que contamos, y los que posiblemente podamos conquistar no los podemos dejar perder.
La otra gran preocupación, que hay, es con respecto a los testigos de mesa; para cuidar los votos, ¿el Frente Amplio ha comenzado a trabaja en eso?
-Sí, precisamente, en estos días hemos sostenidos reuniones, para planificar con el secretario de organización del partido, para estudiar el caso sólo de la escogencia de los funcionarios de control electoral. Verificar cuáles son los centros, que nos tocan a nosotros cuidar y organizar, para nombrar los funcionarios de las mesas, con los que vamos a trabajar; cuya mitad ya la tenemos conformada.
¿Qué propuesta tiene usted como burgomaestre capitalino, para resolver la crisis de la salud pública, que funciona en unas condiciones muy precarias?
-Nosotros nos vamos a encontrar con una situación devastadora. Recuerda que el gobierno central le limitó y le quitó, prácticamente, todas las competencias, que tenía la alcaldía Libertador en salud. Sin embargo, ya hemos planificado, a través del grupo de profesionales y técnicos de Copei una propuesta, dirigida a crear 150 centros asistenciales, para la medicina primaria.
-De ahí, de acuerdo a lo que encontremos, vamos a ir desarrollando dichos centros, para ofrecer consultas ambulatorias; no hospitalización; pero lo que es la consulta primaria tenemos que priorizarla en el municipio Libertador, que está completamente desaparecida.
El otro tema es el de la gravísima situación, que se ha visto en el caso de la inseguridad, que se vive en Caracas, con la aparición de una especie de cacique local, conocido con el nombre de pran. ¿Cómo piensa usted combatir este flagelo?
-Eso va a ser una tarea muy difícil; pero junto con la sociedad civil organizada y la empresa privada, vamos a crear un sistema de seguridad social preventiva, de modo que también habilitemos a la población para controlar esta situación. Porque, por ejemplo, la antigua Policía Metropolitana ya no existe. De modo que tenemos que crear unos cuerpos nuevos, para la seguridad de Caracas.
En cuanto a educación, que también es un tema que pertenece al gobierno central; sin embargo, las alcaldías contemplan algunas iniciativas en ese sentido; pero, ¿tiene algún plan al respecto?
-Precisamente, tenemos una reunión con la Federación Venezolana de Maestros la semana que tiene; para hacerle un planteamiento, relativo a la propuesta, que vamos a presentar en nuestro programa de gobierno para el municipio Libertador. Porque, fíjate tú, lo siguiente: empezando por la infraestructura física. Eso está de capa caída.
-Segundo, los salarios: no es posible que un maestro, sólo gane cuatro dólares al mes. Por ahí vamos a comenzar. Estamos haciendo la propuesta a través de la Federación Venezolana de Maestros; a través del grupo de profesionales y técnicos, para planteárselas al electorado.
En sus recorridos por los barrios populares, ¿qué oye como principal queja de la gente?
-La principal queja, que se oye, es el problema del agua. Hay parroquias donde la prestación de este servicio es caótica. La Pastora, por ejemplo, dura un mes, sin que les llegue el agua. Ese problema hay que resolverlo a través de consultas de Hidrocapital. Esa es una competencia del gobierno central; pero, si no nos hacen caso, tenemos que movilizar a la ciudadanía, para que el gobierno tenga en cuenta que nos tiene que ayudar a resolver ese problema.
-Solo no vamos a poder. El otro problema, que nos plantean, no es la inseguridad, sino el transporte. La falta de transporte; tanto de unidades físicas, sobre todo, a nivel de flotas de autobuses o busetas, presentan un deterioro muy grande; como de combustible. Entonces, ahí habrá que trabajar con la empresa privada; para ver como hacemos a través de las federaciones del transporte, para la obtención de créditos; para lograr mejorar el transporte, que existe, de modo que la población cuente con un buen sistema de transporte.
Los efectos del Covid-19
Como médico, ¿qué información tiene usted sobre los efectos del Covid-19 en el país?
-Como en todo el mundo: está repuntando. La variante Delta ya llegó. Es más no solamente lo digo yo, sino a nivel mundial: el Covid-19 llegó para quedarse algún tiempo con nosotros. Tenemos que convivir con el Covid-19 durante bastante tiempo. Por eso no podemos bajar la guardia. Los hospitales están abarrotados; pues la gente que no tiene recursos, no puede internarse en una clínica, porque es muy costoso.
-De modo que tenemos que potencializar las medidas preventivas primarias; sin bajar la guardia, porque la contaminación va a ser muy grande.
Una persona con las dos dosis de la vacuna, ¿se puede considerar que ya está inmune?
-No, eso no lo exime, de que le pueda dar el Covid-19. Sino que le va a dar más suave. No lo va a agravar tanto, como si ya estuviese inmunizado. Inclusive, ya en las grandes capitales de Europa, Norteamérica, Centroamérica, África ya se está estudiando la posibilidad de aplicar una tercera dosis; de cualquiera de las que te hayas puesto.
Enrique Meléndez