Reciclador de basura: El alcatraz del norte (Morus bassanus)
Los alcatraces se acercan a los dos millones, y utilizan el plástico como material de abrigo. Crecen hasta unos 90 centímetros y con sus alas de 2 metros vuelan a velocidades de 96 km. por hora. Pero son las especies que se matan con mayor frecuencia de forma incidental en la pesquería.
Alérgicos al plomo: águila marina de Steller (Haliaeetus pelagicus)
Descrito como “enorme e inconfundible”, el águila marina de Steller mide unos 90 centímetros de alto y con sus alas alcanza 2,4 metros de ancho. Originaria de Rusia, también se encuentra en Japón y las Coreas. Su población mundial está disminuyendo, ya que el ser humano se está acercando a sus zonas de cría. Algunas han sufrido intoxicación por plomo en Japón. A ellas les encanta el salmón.
¿Lindo? El frailecillo común (Fratercula arctica)
Los frailecillos pueden ser coloridos y lindos con solo 25 cm, pero son grandes comilones. Conocidos como buzos de persecución, capturan su alimento a 30 metros de la superficie del agua, pero pueden bucear al doble de profundidad. Se prevé que su población disminuirá en al menos un 50 por ciento (de más de 11 millones) para 2065.
Volar en el agua: pingüinos Adelia (Pygoscelis adeliae)
Los pingüinos Adelia fueron descubiertos por científicos en una expedición antártica francesa en 1870. Viven exclusivamente allí, al igual que el pingüino emperador. Como buzos de persecución, persiguen a sus presas -desde el krill hasta medusas- a profundidades de hasta 180 metros. Los pingüinos migran como otras aves, pero a pie. No vuelan, excepto en el agua.
Del viejo y el nuevo mundo: el buitre leonado (Gyps fulvus)
El leonado es una de las 23 especies de buitres, y más de la mitad de las otras especies están desapareciendo. Hay dos tipos: los buitres del viejo mundo, como el leonado, y buitres del nuevo mundo, que son calvos y silban o gruñen. Los “viejos” tienen pelo en la cabeza y pies fuertes.
DW