Sobre la agenda de las próximas conversaciones, Juan Guaidó dijo que buscarán justicia y reparación para las víctimas, al igual que garantías para lograr un cronograma de elecciones, garantías políticas e independencia de poderes.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN) electa en 2015, reconocido como parte de la comunidad internacional como mandatario interino, informó que la mesa nacional de atención social, creada en uno de los acuerdos de la negociación en México, todavía no está instalada y tampoco se ha decidido desde la oposición quiénes la integrarán.
La mesa nacional de atención social debe estar compuesta por seis integrantes (tres de oficialismo y tres de oposición) para abordar el tema de salud y alimentación. En el acuerdo se pide que las deliberaciones y medidas de implementación se hagan “en tiempos muy breves”, y pueden contar con la ayuda de equipos técnicos y especialistas nacionales e internacionales.
Guaidó explicó, en una rueda de prensa al este de Caracas, que esta mesa será un espacio para facilitar la dimensión en la escala necesaria de la ayuda humanitaria a través de actores internacionales. “Esperamos que se instale lo más pronto posible, que se tome en cuenta la experiencia de la mesa nacional de vacunación. Para nosotros no será hablar, sino la ejecución”.
Con respecto al acuerdo firmado sobre el Esequibo, dijo que era un punto que había sido discutido e impulsado desde la Asamblea Nacional electa en 2015 a través de distintas comisiones. “Este tema pareciera marginal respecto a otros, pero es importante por la defensa de la integridad territorial (…) Todo lo que se está discutiendo tiene un propósito para atender a los venezolanos”.
Reiteró que la administración de Nicolás Maduro “está desesperada” por obtener reconocimiento de la comunidad internacional, por lo que tienen “una cauta esperanza” de lograr objetivos claros y un acuerdo final con el proceso de negociación de México, cuya segunda ronda de conversaciones se hará entre el 24 y 27 de septiembre.
“Nuestra expectativa es avanzar, sabemos que debemos atravesar muchos obstáculos. Fortalecer la plataforma unitaria, el gobierno encargado, la protección de activos, movilizarnos en la calle, y hacer lo que depende de nosotros, que es mucho”, explicó Guaidó.
Insistió en que tienen “total disposición y acción” de avanzar en la negociación, siempre y cuando se cumpla el memorando de entendimiento.
Otra de las cuestiones que abordó son los derechos especiales de giro que le corresponde a Venezuela por el Fondo Monetario Internacional, y que ya el Banco Central de Venezuela (BCV) ha reflejado en sus reservas pese a que no se han ejecutado. “Se va a discutir de cara a los intereses de la nación en la próxima ronda en México”.
Sobre la agenda de las próximas conversaciones, el mandatario interino dijo que buscarán justicia y reparación para las víctimas, al igual que garantías para lograr un cronograma de elecciones, garantías políticas e independencia de poderes.
De este último punto, dijo que “el régimen reconoció la falta de independencia de poderes, que está secuestrado el poder Judicial, que no hay justicia para las víctimas. Para nosotros es fundamental no solo para las víctimas, sino también de cara al objetivo final”.
Por ello destacó que conversar sobre este punto no significa comprometer el proceso de la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI), respecto a un examen preliminar sobre crímenes de lesa humanidad en territorio venezolano.
Desde el gobierno interino también se buscan formas de participación en la próxima Asamblea General de Naciones Unidas, aunque el reconocimiento formal en la ONU lo posee Nicolás Maduro.
Caso Monómeros
El mandatario interino, Juan Guaidó, se refirió a la situación de la empresa Monómeros Colombo – Venezolana, tras la renuncia de Carmen Elisa Hernández, una de sus directivos. “Es una empresa de capital y titularidad venezolana y debe ser administrada como tal. Monómeros continúa protegida y vamos a hacer lo posible, a pesar de las deficiencias debido a la situación económica de la empresa”.
Reconoció que van a tener articulación con Colombia y debe ser reestructurada la junta directiva para avanzar con ese país sobre las licencias y condiciones para continuar operaciones. Indicó que han solicitado una auditoría externa de Pequiven -a la que pertenece Monómeros- y sus activos para garantizar transparencia.
Una cosa es control parlamentario de cara a los activos, y muy distinto el tema de partidos, señaló Guaidó. “Para nosotros es prioritario rendir cuentas, por eso mencionaba la auditoría, el control de activos, avanzar con nuestros aliados”.
Respecto a la propuesta hecha por el canciller interino, Julio Borges, sobre el establecimiento de un fideicomiso para proteger activos venezolanos en el exterior, manifestó que esto se está consultando dentro de las instancias correspondientes, tomando en cuenta que dependen de licencias de la OFAC. “Dentro de la alternativa democrática hay preocupaciones y se están buscando las maneras de proteger estos activos como el oro depositado en Inglaterra”.
Elecciones regionales
La estrategia de la alternativa democrática ha avanzado, dijo Juan Guaidó en la rueda de prensa, al tiempo que reconoció que ha sido pese a los altibajos y “con excusas de una dictadura. Con el reto de convertir el 21 de noviembre en fuerza, en lucha, entendiendo que no hay condiciones, para que no pase lo que pasó con la elección de la Asamblea Nacional en 2015”.
“Es liderazgo lo que exige hoy cada entidad regional, es fuerza”, aseguró Guaidó sobre las elecciones regionales. Repitió además una frase que ha dicho desde 2019: “Aquí nadie se acostumbre”, para exigir a los venezolanos que apoyen la solución negociada en México, y que responda al acuerdo de salvación nacional, además de una movilización interna a través de los comicios de noviembre.
Al igual que otros dirigentes políticos, dijo que la administración Maduro no gana reconocimiento con ese proceso electoral, pues no se trata de las elecciones presidenciales que ha repudiado gran parte de la comunidad internacional.
TalCual