Gandolas esparando en Puerto Cabello, estado Carabobo.
Los conductores de trasporte de carga pesada que surten gasoil en Puerto Cabello han evidenciado que la mala calidad del combustible genera daños mecánicos en sus motores.
Representantes del transporte de carga pesada en el estado Carabobo aseguran que las gandolas están saliendo de las estaciones de servicio con fallas mecánicas, la más común es la contra explosión debido a la mala calidad del combustible que les surten. Transportistas temen que la mercancía que trasladan, en su mayoría alimentos, no llegue a destino porque pueden accidentarse en la carretera.
Raquel Da Silva, miembro de la Asociación de pequeños propietarios y conductores de carga de contenedores y similares de Puerto Cabello (Asotracontainer), sostuvo que la calidad del gasoil ha bajado, razón a la que atribuyó que las unidades de transporte de carga pesada presenten fallas como las contra explosiones y emisión de humo blanco, indicador de cómo la deficiencia del combustible afecta el sistema de válvulas e inyectores del motor.
″Estamos seguros que es el combustible, hay unidades que salen accidentadas desde las estaciones de servicio. En Puerto Cabello hay tres bombas que nos surten gasoil y en las tres se está presentando este problema, el combustible no está apto para nuestros vehículos″, señaló Da Silva.
Da Silva indicó que el temor se ha apoderado de los transportistas de carga pesada, quienes han optado por no cargar combustible. Citó como ejemplo que para este martes 5 de septiembre habían unos 500 tractocamiones en fila esperando surtir; sin embargo la cola bajó considerablemente ante esta situación.
″En las bombas reparten entre 70 y 80 cupos diarios para abastecernos de gasoil. Hoy cuando pasaron la lista se habían ido 150 gandolas″, refirió.
La representante del gremio de transporte de carga pesada en Carabobo subrayó que la reparación de una cámara de combustión cuesta 300 dólares (las gandolas tienen dos), además deben comprar los repuestos y la mano de obra del mecánico se cotiza en 150 dólares. Por ello insistió en la necesidad de que el Estado informe sobre la mala calidad del combustible.
″Ahora nadie quiere que se le dañe una gandola. Tenemos problemas porque hay unidades paralizadas, y las que funcionan están amenazadas con dañarse por la mala calidad del combustible. Queremos que nos digan qué está pasando para poder tomar nuestras previsiones″, recalcó Da Silva.
Da Silva también manifestó su preocupación por que la mercancía que transportan, alimentos en su mayoría, no llegue a sus destinos si persiste el problema. Explicó que una gandola puede transitar un trayecto largo, pero puede presentar la falla de contra explosión y se queda accidentada en la carretera.
Poca carga
Según la gremialista, en el puerto de Puerto Cabello no hay mucho movimiento de carga actualmente, lo cual afecta su volumen de trabajo y, por tanto, sus ingresos. Sostuvo que la mayoría de la carga que están distribuyendo es de granos, mientras que la carga contenerizada ha mermado.
″Esperamos que con el periodo de fin de año la carga contenerizada aumente. En octubre, noviembre y diciembre hay un poquito más de movimiento en este sentido″, apuntó.
La representante del transporte de carga pesada teme que durante la temporada alta de movilización de carga las gandolas estén paralizadas por daños asociados a la mala calidad del gasoil.
Leomara Cárdenas – Crónica Uno