Su Despacho.
En mi nombre y con la seguridad de contar con la aprobación, de más del 95% de los Jubilados de nuestro Instituto, le dirijo esta comunicación, para recordarle, (pues ello es de su exacto conocimiento), la difícil y caótica situación, que estamos viviendo, los Jubilados de la Institución, específicamente, en cuanto al delicado aspecto de la salud por haber sido, casi, en su totalidad, suspendidos, desde el me de Febrero, del presente año, los servicios del Seguro Colectivo, situación ésta, la cual, a inicios del mes de Agosto del año en curso, Tres (3) distinguidas damas jubiladas, a quienes usted atendió en su Despacho, le plantearon y entregaron, en nuestro nombre, (con más de 200 firmas en depósito) una comunicación, donde se describían en forma explícita, parte de la problemática más aguda, que tenemos los jubilados a nivel nacional, específicamente, el relacionado con la no cobertura del seguro, (a excepción de los medicamentos y una que otra Emergencia comprobada, tomadas a pinzas, lo cual está afectando y pone en ,alto riesgo, a nuestra salud, por padecer, la mayoría de nosotros, enfermedades con patologías crónicas y hasta la presente fecha, no ha habido, ni de parte de Usted, ni de la administración y niveles subalternos que dirige, respuesta alguna al respecto, demostrando con ello, la indolencia y la apatía hacia dicha problemática y, en consecuencia de ello, la marcada desconsideración, hacia quienes le dedicamos nuestra vida, a tan noble Institución. ¡Es injusto!
Debe saber y entender usted, que es nuestro legítimo derecho, solicitarle, como máxima autoridad de la Institución, que cumpla con un beneficio que nos pertenece por Ley y estipulado en nuestra Convención Colectiva, indistintamente de la situación país, que usted pudiera esgrimir como excusa, pues sabido es, que es usted, como Administrador de la Institución, el responsable de establecer, diligenciar y practicar las estrategias administrativas necesarias, para la solución de tan delicada situación.
Ante tal situación y como afectado, le solicito respetuosamente, pero muy firme y sin ruegos adulantes, dé solución a dicha situación.