A veces vemos declaraciones en los medios de comunicación y por las redes sociales con expresiones de sorpresas por algunos directivos de partidos políticos que se autocalifican como opositores, como si fuese la primera y única vez que ocurre. A partir del 22 de Noviembre 2021 después de las fraudulentas elecciones regionales y municipales, cuando por alguna razón de cálculos o quizás producto de una mano pelúa que se introdujo en las elecciones de Barinas, las cosas le salieron mal a los que montaron todo el fraude electoral. El presidente del CNE Pedro Calzadilla, anunció finalizando la noche del 21 las proyecciones que se suponían eran irreversibles y en ellas aparecía Argenis Chávez ganando Barinas.
Algunos llegaron a decir que era el colmo que le arrebatan el triunfo a Freddy Superlano candidato de la MUD ( no es santo de mi devoción por la historia escrita en el llamado cucutazo en febrero 2019) Sin embargo, los “sorprendidos” hoy, son los mismos que en Octubre y Noviembre 2017 dejaron solo al indio Andrés Velásquez quien con actas en manos demostró haber ganado la gobernación de Bolívar, pero Tibisay Lucena por órdenes de Maduro no quiso ni siquiera aceptar el reclamo que por ley está previsto, y tampoco quiso ver las actas, sino que con un manotazo cerró la rueda, proclamando y juramentando al candidato de Maduro.
Después que el TSJ de Maduro inhabilitó a Freddy Superlano por haber ganado en Barinas con mínima diferencia, inmediatamente el CNE de Maduro convocó elecciones para el 9 de enero 2022; y más rápido que volverlo a decir, y sin dar la pelea a fondo sino por encimita, los “opositores” de la MUD decidieron que la sustituta de Freddy Superlano sería su esposa, como si la candidatura fuese una propiedad del hogar y no del colectivo. Y en menos que canta un gallo, y sin que esta señora hubiese sido funcionaria pública ni tener expediente abierto, también fue inhabilitada pero esta vez por el CNE de Maduro.
Igualmente, después que el PSUV “renunció” a Argenis Chávez como gobernador y como candidato para el 9 de enero, por órdenes de Maduro designaron a Jorge Arreaza, quien es ministro de profesión, y esposo de una de las infantas de Barinas, como candidato a competir por la gobernación en Barinas. Después de este anuncio madurista, surgieron otras expresiones de sorpresas de “como era posible que Arreaza después de haber votado el 21N en Caracas, ahora aparece registrado en Barinas para competir. Pero como el colaboracionismo no se queda atrás, también lanzaron a Claudio Fermín como candidato en Barinas, quien también por arte de magia, después de votar en Caracas, aparece inscrito en Barinas.
Quienes hoy muestran sorpresas porque Jorge Arreaza y Claudio Fermín aparecen registrado en Barinas, olvidan que cuando el resentido social nacido en Sabaneta de Barinas, decidió que Tareck El Aissami fuese gobernador de Aragua estaba inscrito en Mérida, o cuando el mismo resentido social decidió que Aristóbulo Isturiz fuese gobernador de Anzoátegui estando inscrito en Caracas, donde como candidato a la alcaldía metropolita recibió aplastante derrota por parte de Antonio Ledezma y las fuerzas democráticas, o como cuando a Yelitza Santaella se le acabó el tiempo de dos periodos en Delta Amacuro, pero el resentido social quería que siguiera siendo gobernadora y entonces la envió para Monagas sin estar inscrita en ese estado. Olvidan que el CNE de ahora no es el mismo que reconoció el triunfo de Chávez en 1998, sino el de Pedro Calzadilla, un comunista de vieja data disfrazado de demócrata. Ese registro electoral está tan contaminado, que migran a quienes quieran y cuando quieren para cambiar cualquier tendencia estadal o municipal. Igualmente aparecen inscritos narcos de las FARC y el ELN, así como de los grupos terroristas del medio Oriente y otras partes del mundo.
Donde no veo por ninguna parte expresiones y mucho menos protestas por parte de los “opositores” de la MUD ni de los colaboracionistas de la mesita, es con relación al secuestro de varias actas que paralizaron el conteo en las elecciones de Barinas, por parte de un general de cuatro soles, comandante de una REDI. Es un delito de acuerdo a la ley de procesos electorales, y ese general debe pagar. Si la ley y los funcionarios actúan con energía para meter preso y abrir expediente a un ciudadano cuando protesta por las trampas de la maquinita cuando le anula el voto, esa energía debe ser también aplicada a este general que cometió delito electoral y que recibe órdenes directas de Padrino López y Nicolás Maduro.
Pero no, lo que estamos viendo por los medios de comunicación y las redes sociales por parte de la MUD, es que se debe salir a votar masivamente en Barinas para comenzar desde ese estado la liberación de Venezuela. Diría mi santa madre, ¡han visto vainas!. Algunos asesores de la MUD, si es que los tiene, creen que los venezolanos somos pendejos para creer otro cuento como aquel del 23 de enero de 2019, cuando abusando de nuestras emociones nos dijeron: Cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres. Es necesario otros liderazgos que aglutinen el descontento y conduzcan el cese de la usurpación.
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