La ambición suele llevar a las personas a ejecutar los menesteres más viles. Por eso, para trepar, se adopta la misma postura que para arrastrarse. Jonathan Swift.
Saludos compañeros de mentira – es que al igual que mi jefe del mal, trafico con la hipocresía-, les escribo porque así me lo ordenó el Coronel psicópata, ya saben nada es espontáneo, todo es planificado, todo tiene su trasfondo y su metalenguaje, nosotros somos títeres del desamado, él nos usa, nos manipula, nos maneja y nos controla hecho el gil o el gilipollas y como buenos monos voladores nos debemos arrastrar, reptar como áspides sodomizadas. Soy la obrera del mal, de la legión del mal, una de las que se roban los productos de limpieza, la comida, las tecnologías y nos llenamos los bolsillos a diario producto de las coimas.
Como estamos seguros que la lectura más fuerte que leen estos operadores del mal es el Condorito, les brindamos el significado de coimas: «La noción de coima, en los países latinoamericanos, se emplea como sinónimo de soborno: Beneficio o ventaja de cualquier clase, dineraria o patrimonial, que obtiene la autoridad o funcionario público en el delito de cohecho, en provecho propio o de un tercero. Puede ser un beneficio directo o indirecto, pero de entidad suficiente para mermar su imparcialidad en el ejercicio de su función. La dádiva que se otorga con el objetivo de obtener un favor de un funcionario o de una autoridad. … La coima constituye un delito conocido como cohecho».
El Coronel psicópata ordena y yo me arrastro. No les escribo porque quiero sino porque necesito urgida hacerlo, estoy asustada llena de pánico y me recorre el frío por el cuerpo pensando que también me van a poner los ganchos, que voy a ser hecha presa y encarcelada como la Borracha y como la Sussana, que a lo que pase esta embriaguez de corrupción e impunidad y cuando ya no esté el Coronel estaremos a la intemperie legal y judicial. Pero también el narcisista de mi jefe, el voyerista me ha ordenado escribirles, lo ha planificado así, para marear, para engañar, para amedrentar, les envía a través de mí este mensaje para que cierren la boca. ¿Cómo va a ser posible que aquí no quieran al Coronel? Si él es una rata ladrona, corrupta, bisexual, violador, traficante; lo sabemos, pero es quien me mantiene chupando de la corrupción, mejor dicho mantiene un grupo de cómplices, de coautores y encubridores, que es la red de corrupción.
Hay una noticia por los medios de comunicación que al Coronel lo tiene preocupado y con diarrea, después del escándalo por sus cómplices vendedores de documentos ilícitamente. Ustedes deben hacer como todo el anillo de corrupción del Coronel, que saben y sabemos, además que participamos de la corrupción que ocurre y nos quedamos callados y somos los encubridores del Coronel, y también somos coautores de sus delitos. Seamos como los supervisores jefes que lo mantienen protegido porque se meten muchísimos dólares a los bolsillos y con una cara de seriedad que a cualquiera engañan. No pierdan de vista al Coronel, que se disfraza de cordero, debemos consentir el engaño como rebaño.
Esta comunicación tiene por objeto amedrentarlos, quitarles su libertad de pensamiento y su libertad de expresión, además ustedes deben permanecer callados y ser cómplices de todos los delitos que aquí en la empresa se cometen; deben estar genuflexos al Coronel psicópata, narcisista, voyerista y licántropo. No llamen a los medios de comunicación denunciando que aquí en la institución un grupúsculo de corruptos privilegiados tenemos un negocio montado cobrando en dólares por y para todo. La noticia que se difundió esta mañana por un medio de comunicación le causó diarrea a nuestro proxeneta, perdón a nuestro felón el Coronel. Les prohíbo estar suministrando información a los medios de comunicación. Eso que le pedimos como una colaboración en realidad es una obligación de ustedes si quieren seguir trabajando aquí, así ustedes se priven de comprar algún alimento, que eso es intrascendente, lo importante es que le rindamos pleitesía y seamos genuflexos con el Coronel, que él es un Dios. Recuerden que los narcisistas sufren de grandiosidad y debemos mantenerlo atornillado en su burbuja narcisista, para seguir con la corrupción. Solo paguen el peaje y no nos denuncien, se los prohíbo.
Es nuestro deber, mejor dicho, el deber de ustedes dejarnos hacer todas las marañas – que son muchísimo más que marañas – que queramos y toda la corrupción que nos de la gana y deben quedarse con un cierre en la boca. Les va a salir caro, si descubrimos quién o quienes llamaron a los medios de comunicación. No importa si los asaltamos en sus menguados salarios, aunque ustedes lo sientan, lo vean o lo oigan grotesco, nosotros tenemos la patente de corso para exigírselo a ustedes, sino Sussana con su brillo foveal por orden del Coronel les aperturará un expediente ficticio y los botaremos injustamente así haya pandemia, no nos importará si son de la tercera edad, o que tengan hijos especiales jajajajaj.
Llénense de miedo pues aquí los que mandamos somos los corruptos, bajo las órdenes de la sífilis social que es el Coronel, este depredador social que como maldición se ha posesionado maléficamente como la máxima autoridad canallesca de la institución. Y no me disculpen nada , tenemos interés malsano de seguir robando en nombre de la institución, aunque ustedes no vean las marañas ni los altos y planificados delitos, mientras al psicópata lo tenga el compadre atornillado en el cargo , mantendremos el juego sucio de malandrajes y corrupciones.
Este mensaje no es por ustedes, sino por todos nosotros los que le limpiamos el culo al Coronel y le lamemos las suelas porque él es la personificación de la corrupción y de la peor plaga que le ha caído a la institución y ustedes deben quedarse quietos, silenciosos y sin divulgar ninguna información que pueda causar daño al frustrado militar que nunca será General y a su grupúsculo de malvivientes.
No nos interesa; a este grupúsculo corrompido y corrupto, que represento, para nada que el Coronel sea un psicópata, narcisista, licántropo y voyerista, mientras nos mantiene en la salsa de la corrupción. Fíjense que yo he renunciado a Dios, y no me preocupo por la zarza ardiente del infierno mientras mi Coronel , el jefe del mal , se mantenga caminando liguerito con prurito rectal , como de costumbre hace . Yo me confieso sufrir al igual que Sussana de hibristofilia, y las rosas que me adornan son de carroña.
Sigamos haciéndole burla a la sociedad y dañando con nuestros actos y nuestros ejemplos a nuestras almas y a nuestros descendientes que nos observan y nos copian. Sigamos burlándonos de las leyes y de la moral.
Entonces ¿qué será lo que quiere el negro? Quiere seguir antigerenciando empresas donde pueda mantenerse robando impunemente y que su vida parasitaria propia del narcisista no se vea afectada.
¿Cuándo vas a encontrar un trabajo que no consista en robarle a otra gente? Linda RightClay
Profesor Universitario/Abogado/Periodista/Psicólogo/Escritor – crisantogleon@gmail.com