En la ciudad de Cumaná, los trabajadores de la construcción se concentraron en horas de la mañana de este jueves, a pocos metros de un acto que sería encabezado por el gobernador del estado Sucre, Gilberto Pinto, para exigir que se atienda la necesidad de los 3.000 obreros que se encuentran reclamando la reactivación de unas obras paralizadas desde el año 2015.
En el lugar hicieron presencia obreros, cabilleros, albañiles, ayudantes y maestros de obra quienes enfatizaron la necesidad de ser considerados en los proyectos que desde el Ejecutivo Regional se establecen, asegurando que desde hace siete años se encuentran esperando la culminación de más de 10 obras que se estimaban entregar para los 500 años de la ciudad de Cumaná (año 2015) y que hoy en día son infraestructuras en abandono.
El secretario general de la construcción, José Villamizar, denunció que desde entonces la situación se agudizó ante la falta de adjudicación de proyectos que generen fuentes de trabajo para estos padres y madres de familia, resaltando a su vez, la disminución de las obras particulares, ya que según su denuncia, la inflación del país no permite la construcción ni remodelación de viviendas por parte de los ciudadanos.
“Hoy le solicitamos al Gobierno Nacional, le solicitamos al Gobierno Regional, que nos tome en consideración y que nos den la oportunidad de construir el desarrollo de este Estado porque aquí estamos los Sucrenses para decirles que somos constructores y queremos trabajar” expresó Villamizar.
Por último, indicaron que las afectaciones a los trabajadores de la construcción se extiende por los 15 municipios del estado Sucre que contabiliza al menos 7.000 empleados de esta rama, y que exigen la reactivación de las obras que puedan generar sustentos en las familias de esta región del oriente de Venezuela.
Termómetro Nacional
