Hay buenas vibras en las gestiones recién asumidas en el Zulia. Contra todos los pronósticos, y dentro de la tormenta, se quiere construir por encima de todo. Y así evitar el desgaste de caer en la trampa de la confrontación y saboteo como política de estado desde Caracas. Que se esté pensando reabrir una Biblioteca como un Ateneo, una forma de refugio espiritual, luego de su espantoso cierre por parte de la nefasta anterior administración es un acto de justicia poética.
Una ciudad se reconoce por sus ofrendas culturales. Y una biblioteca es una pequeña gran universidad. Y ya sabemos que las universidades públicas forman parte del aniquilamiento civilizatorio en curso. Así que bajo la iniciativa del actual Gobernador Manuel Rosales junto a la Dirección de Cultura con Viviana Márquez y la Presidente de la Fundación Red de Bibliotecas del Zulia: Ixora Gómez; muy pronto volverá a existir algún tipo de luz dónde hoy hay sombras.
Sus espacios en la Avenida El Milagro y cerca del muy emblemático sector de Santa Lucía fueron abiertos por el mismo gobernador Manuel Rosales en el año 2007. Hoy se quiere su reapertura para servir de apoyo a la lectura; la educación; arte y cultura en sus más diversas manifestaciones. Con muy buen criterio su Directora: Ixora Gómez, reunió a un grupo de amigos para compartir ideas en torno a éste maravilloso proyecto. Nos acompañaron: Gabriel Ferrer Cubillán; José Romero; Moraima Gutiérrez; Mary Franco; Lúcidio Quintero; Carlos Ildemar Pérez; Xiomara Jiménez y Marlene Nava. Y la idea es ampliar éste primer encuentro tomando en cuenta a los equipos del Acervo Histórico del Zulia y Academia de Historia del Zulia entre otros. Mientras más aliados sumemos con consideración, respeto y buena voluntad para ayudarnos ésta iniciativa podrá ser exitosa y mantenerse vigente y útil a lo largo del tiempo.
Las propuestas fueron muchas: llevar a las escuelas hasta sus espacios; encuentro de escritores y poetas; club de ajedrez; talleres de pintura; seminarios; charlas; cine-foros; conciertos; conversatorios y cursos permanentes; ofrecer wifi abierto y servicios culturales diversos. Hasta una futurista Sala de Robótica se consideró. La digitalización de toda la producción bibliográfica es todo un reto.
Hay una filosofía de fondo que es la de resaltar aspectos propios de la zulianidad alrededor de la música; la pintura; el teatro, el cine, la literatura e historia con el propósito no solo de conocer lo nuestro sino para identificar nuestra identidad y su arquitectura tallada laboriosamente a lo largo del tiempo. También hay un nuevo objetivo nada desdeñable que se comentó: hacer del arte y cultura una medicina para sanar los espíritus.
Les comentamos en ese encuentro que ya el sólo hecho de producir la reapertura sería un triunfo histórico y que lo poco o mucho que se vaya hacer se haga bien. Que hay que buscar alianzas institucionales tanto en el sector público como en el privado. Que hay que conectarse con el buen hacer del Teatro Baralt y Teatro Bellas Artes y construir una agenda cultural compartida para ofrecer a los zulianos.
La parte gerencial será todo un reto porqué los recursos ya no son abundantes como en el pasado y el Estado Zulia, al igual que el resto en el país, sigue padeciendo del colapso de los servicios públicos y de una dinámica centralista como puño de hierro que cuestiona y niega el pacto federal vigente en la Constitución.
La Biblioteca Pública del Zulia María Calcaño, su reapertura, es toda una fe de vida bajo la convicción de que la cultura, junto al amor, salva a los ciudadanos y generan confianza en un mejor futuro. Algo que todos los venezolanos queremos para volver a tener paz y prosperidad en nuestro muy querido y hoy maltratado país.
Historiador, Profesor de la Universidad del Zulia. Director del Centro de Estudios Históricos de LUZ. Premio Nacional de Historia – lombardiboscan