Partiendo de la intención que tengamos de ver culminadas nuestras tareas y asignaciones, es realmente necesario que adoptemos medidas para no permitir que las interrupciones en la rutina diaria o a lo largo de nuestros procesos para cumplirlas, nos afecten. Muchas veces, en especial cuando tenemos demasiados compromisos o asuntos pendientes, entonces, esto puede convertirse en un elemento que nos genera estrés, incomodidad, contrariedad e impedimento para avanzar.
Una excelente estrategia es, tomar notas para recordar esos asuntos o detalles que no queremos que se nos olviden. De esta forma, podremos mirar las anotaciones que hemos realizado posteriormente, para tenerlas en cuenta y cumplir con nuestras tareas según lo hemos planeado, evitando que se nos pase algún aspecto importante. Del mismo modo, ayuda mucho cuando dividimos el trabajo en labores más pequeñas, y así, serán menos exigentes y nos permitirá administrar nuestro esfuerzo en plazos, facilitando además que podamos desarrollarlas.
Es importante también, tratar de volver lo más pronto posible a lo que estamos trabajando, lo cual, depende del esfuerzo que realicemos en este sentido, pues, si no lo hacemos, luego se nos puede dispersar una idea si nos encontramos desarrollando algo creativo, perder la continuidad que nos lleve a cometer algún error, nos podemos desanimar, y por supuesto, tardaremos más tiempo, alejando la posibilidad de realizar otras responsabilidades.
Igualmente, se hace oportuno evitar ser multitareas, ya que, eso dificulta tener mayor facilidad, cuando requerimos retomar varios proyectos o asuntos de forma simultánea. Recordemos que, seremos más resolutivos y eficientes, si podemos enfocarnos en solo un asunto a la vez, lo cual, resulta más fácil y rápido para cualquiera. En definitiva, hay personas que les funciona y qué tal vez tienen la habilidad, pero en realidad no es la regla general.
Saber manejar las interrupciones, puede hacer una gran diferencia en nuestra productividad, pues, debemos tomar en cuenta que, no podemos eliminarlas, son inevitables e inesperadas, por lo que, es oportuno fortalecer esta capacidad para no dejar que nos perjudiquen.