Araya es la capital del municipio peninsular Cruz Salmerón Acosta en el estado Sucre, y es una localidad bastante golpeada por la debacle chavista en los últimos años, a pesar de sus potencialidades turísticas y productivas que actualmente no son aprovechadas para brindar calidad de vida a sus residentes.
De acuerdo con los testimonios recabados, existen comunidades que registran hasta más de seis meses sin recibir este recurso por tuberías y dependen de tomas de agua de algunas plazas del pueblo, que visitan con botellas y envases. Existen casos más dramáticos que tienen hasta años sin ver ni una gota de agua en sus hogares.
Un hombre denunciante, que pidió se omitiera su nombre por temor a represalias, cuestionó que en las distintas gestiones chavistas que han pasado por la Alcaldía de Araya, no se implementen políticas públicas que solucionen esta problemática de una vez por todas.
Por su parte, Rosbell Millán, habitante de Araya, explicó que en algunas comunidades arayeras el agua llega por pocas horas y se desaparece por meses, mientras que en otras se recibe permanentemente, pero con baja presión.
“Es una verdadera calamidad vivir en estas condiciones, y aunque protestamos, nos quejamos y hacemos lo que está a nuestro alcance para pedir soluciones y sobrellevar esto, no somos atendidos”, añadió.
Millán detalló que los planteles educativos y demás instituciones también se ven perjudicadas por esta caótica realidad. “Aquí pusieron a funcionar una planta desalinizadora. Eso fue un show porque eso funcionó solo unos días y no solventó nada. ¿Qué hacen con el dinero de esas inversiones?”, se quejó otro afectado que se negó a dar su nombre también por temor a ser perseguido en la jurisdicción.
Así como se ve disminuida la calidad de vida de quienes habitan este municipio del oriente venezolano, también se ve afectado significativamente el desarrollo del turismo por la falta de óptimos servicios públicos.
Víctor Federico González – Lapatilla.com