Ufólogos han afirmado que seres extraterrestres nos visitan desde hace mucho tiempo y que se han adaptado perfectamente no solo a la atmósfera de la Tierra, sino también a las mañas de los gobiernos terrícolas que siempre tratan de estafar a los trabajadores. Aseguran, que se han infiltrado en todas las esferas de la vida económica, política y social del planeta. Que están por todas partes y, que hasta en el Vaticano tenemos a seres alienígenas quien sabe con qué aviesas intenciones. No se sabe a ciencia cierta si el propio Papa es uno de ellos debido a su singular comportamiento.
Algunos de tales ufólogos, que viven en mi parroquia, me aseguran que en estos días de crisis, desde que se aprobó la Ley Orgánica de Zonas Económicas Especiales en la AN, , estamos siendo visitados con mayor frecuencia no solo por los marcianos que habían llegado ya bailando ricachá, sino también por seres de otras galaxias atraídos por las jugosas ofertas de garaje estampadas en la mencionada Ley: todo a precio de gallina flaca y en secreto; grandes extensiones de tierra fértil privatizadas durante mas de 20 años, mano de obra muy barata, todo desregulado y regido por las leyes de los planetas de ellos. Cero soberanía y pingües negocios redondos para quienes sepan aprovechar la oportunidad, sean o no del planeta.
Según ellos, como los alienígenas ya están tan avanzados en mañas como los chavistas, fueron ellos quienes le metieron en la cabeza al Gobierno lo que a nadie en su sano juicio se le podría ocurrir: el instructivo Onapre y el fraccionamiento del bono vacacional. Con el primero se lograría una escala estable de salarios de hambre para garantizar a los empresarios aborígenes de la Tierra, como Bertucci, y a los de toda la galaxia mano de obra barata y, con el segundo, experimentar con la humanidad de educadores y trabajadores de la salud a ver si hacían algo contra semejante sadismo masivo Si no se alzaban les eliminarían el bono por medio del fraccionamiento y, mientras, lo que dejaban de pagar lo podían usar en cualquier procedimiento, como algún tipo de especulación cambiaria. Considerando esto, el palazo que los trabajadores le propinaron en la cabeza al Gobierno al obligarlo a pagar el bono no fraccionado y con el salario integral, tiene profundas dimensiones políticas y extra galácticas al derrotar, no solo a los vivitos de aquí de la tierra, sino también a los visitantes de otros mundos quienes monitorean con maliciosa codicia nuestros recursos naturales como el agua, minerales y tierras cultivables. No son de fiar, después de convertir el país en inhabitable peladero podrían intentar comernos a nosotros mismos.
¡Mucho cuidado con los alienígenas!