El ciudadano se aleja de las posiciones partidistas creyendo alejarse de la política, con frecuencia escuchamos decir “no metamos la política en esto”, lo cierto es que la implantación del socialismo comunitario en Venezuela es un hecho de carácter político que nos está cambiando la manera y forma de vivir, pasamos de ser una sociedad con plenos derechos a una sin derechos, de la abundancia a la pobreza.
El índice 2022 de derechos de propiedad en el mundo evaluado en 129 países, determina que Venezuela está en el último lugar, el año pasado el país que ocupaba tan lamentable posición era Haití, ahora nos supera pasando nuestro país a tan triste posición.
El primer país que encabeza este índice es Finlandia, de Latinoamérica Chile en el puesto 33, la pregunta ¿por cuál razón Venezuela está en esta posición? Por la política, el proyecto socialista que adelanta el PSUV y la revolución es un plan político caracterizado por dos elementos: No existe independencia del poder judicial, esto es está partidizado, y un claro marco regulatorio que atenta con el derecho de propiedad privada y la libertad económica.
La pérdida de los derechos de propiedad y de libertad económica, es proporcional al menoscabo de la democracia y el surgimiento de gobiernos cuyo fundamento no sea el derecho, la libertad y la propiedad, de ahí que es en estos regímenes donde se aprecia esta disminución, de donde Venezuela no es la excepción.
Aquí en consecuencia la causa de la disminución del ejercicio del Derecho y de la profesión del abogado, una causa de carácter político, que viene a sustituir una política de carácter democrático liberal. En los modelos comunistas no existe ejercicio del derecho, y no existe en razón de que no existe propiedad privada ni libertad económica, ¿sabe usted de casos judiciales en Cuba para restituir un derecho de propiedad? No existen derechos ciudadanos, no hay registros ni notarias, no existen derechos disponibles en disputa.
¿Por cuál razón no hay inversión? No hay seguridad jurídica, nadie invertirá si sus derechos no están a salvo. Vivimos un cambio político al socialismo.
Es aquí donde la política debe retomar su función pedagógica y formativa, para explicarle al ciudadano cuales derechos perdió, explicarle al abogado que precisamente no tiene trabajo por lo que no hay derechos que reclamar en favor del cliente que es un ciudadano que se va quedando sin derechos, y los gremios son la voz para reclamar ese incumplimiento constitucional, pasar callados mientras la política nos lleva al socialismo comunitario es una forma cómoda de cerrar los ojos, otros se van alineando en una colaboración o cohabitación, al final si se impone el modelo también se los llevará por delante.
La lucha política de oposición debe contar con un sólido reclamo de proteger el derecho de propiedad y libertad económica que están como letra muerta en la constitución, el reclamo de un sistema de justicia independiente y autónomo, no es lo mismo pedirlo, exigirlo y denunciarlo a simplemente estar callados.
Si el reclamo surge de todos lados y desde todos los sectores las actuales cosas cambiarán y mejorarán, pero no podemos seguir creyendo que Venezuela cambiará al modelo capitalista solo, ya que en piloto automático va rumbo al socialismo ortodoxo.