9 noviembre de 1938 una noche de terror y de muerte.
EL 9 de noviembre de 1938, fue la terrible noche, de los Cristales Rotos, Kristallnacht, día y noche que la humanidad por sus consecuencias y características no se debe, ni se tiene que olvidar y recordarla siempre como una extraordinaria reflexión, de una acción criminal, que generó en la comunidad judía de Alemania, pánico, susto, pavor, miedo, horror, terror, muerte, percusión y destrucción bienes fiscos. La noche de Los Cristales Rotos, se cometieron, humillaciones, abusos, ofensa, viemiolaciones, maltratos, delitos, muerte entre otras tantas barbaridades, y que por la falta de información, por un lado, y por el otro por razones e intereses fundamentalistas religiosos y políticos, la humanidad no le dio, ni le ha dado, ni le da la importancia y trascendencia a ese hecho humano, histórico, político, religioso, social, cultural y económico, que tuvo y tiene, aquella noche y las muchas otras noches después, donde miles de miles de familias judías sufrieron persecución, cárceles, y muertes, por el solo hecho de defender y practicar su proceder religioso y su conducta de ser buenos ciudadanos productivos, como forma y manera de vida de ser el pueblo escogido por Dios.
La noche de La Kristallnacht los nazis con su acto criminal, rompieron no solo cristales físicos de la comunidad judía, sino que esa acción siniestra, destrozaron los cristales del corazón del pueblo judío, por eso hoy cuando recordamos aquella noche de rencores, intimidación, persecución, violencia y muerte, de la noche de Los Cristales Rotos, la debemos conmemorar recogiendo esos cristales rotos por el odio, la violencia, la muerte y convertirlos en permanentes recuerdos cristales de luz de amor y paz para bien de nuestro corazón de judío, y para el bien del corazón de la humanidad, y para que nunca jamás, vuela a ocurrir en nuestro mundo otra noche como aquella del 9 de noviembre de 1938 de los cristales Rotos, que genero la muerte de seis millones de judíos, en los campos de exterminio.
La noche del 9 de noviembre de 1938, la Kristallnacht, fue la noche de odios, de represalia, de terrorismo, de brutalidad, de dolor y de muerte, donde los nazis con su acto criminal, rompieron no solo cristales físicos de la comunidad judía, sino que esa acción siniestra, funesta rompieron los cristales del corazón del pueblo judío, por eso hoy cuando recordamos la noche de rencores, intimidación, importunación, terror y muerte, de la noche de Los Cristales Rotos, solo nos queda hoy al conmemorar los 84 años recoger y construir esos cristales rotos por la animadversión, la tirria, la aversión, y convertirlos en permanentes recuerdos cristales luminarios de amor y de paz, para el bien de nuestro corazón de judío y para el bien del corazón de la humanidad, y para que sea espejo permanente de visión de un nunca jamás, vuela a ocurrir en nuestro mundo otra noche como la noche del 9 de noviembre de 1938 de los Cristales Rotos