La ONU alerta por la contaminación invisible de aguas subterráneas
El Día Mundial del Retrete (Poceta), que la ONU lleva adelante anualmente desde 2013 cada 19 de noviembre, celebra la importancia de los inodoros y crea conciencia sobre los 3600 millones de personas que viven sin acceso a un saneamiento gestionado de forma segura. En Venezuela, ante las fallas del servicio de agua potable, la explotación de las aguas subterráneas se ha extendido con la autorización oficial
El Día Mundial del Retrete pretende concienciar en la toma de medidas para hacer frente a la crisis mundial de saneamiento y alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6: saneamiento y agua para todos de aquí a 2030.
La temática de este año, titulada «Hacer visible el recurso invisible», se centra en los efectos de la crisis del saneamiento en las aguas subterráneas, ya que un sistema de saneamiento inadecuado puede correr el riesgo de esparcir los excrementos humanos en ríos, lagos y suelos, contaminando así los recursos hídricos subterráneos.
Sin embargo, parece que este problema es invisible. Invisible porque sucede bajo tierra. Invisible porque ocurre en las comunidades más pobres y marginadas.
Poner en riesgo el agua subterránea es poner en riesgo la fuente de agua dulce más abundante del mundo que apoya el suministro de agua potable, los sistemas de saneamiento, la agricultura, la industria y los ecosistemas.
A medida que el cambio climático empeora y las poblaciones crecen, el agua subterránea es vital para la supervivencia humana.
En Venezuela, el número de perforaciones de pozos para extraer agua subtearránea para llevar el líquido a las comunidades sedientas se incrementó significativamente desde 2020. Este proceso que ha sido un alivio para los habitantes de varios municipios en el país tras la autorización de los entes gubernamentales, ha sido utilizada hasta por el propio gobierno en lo alto del terreno en el que se ubica el emblemático Hotel Humboldt en Caracas.
Al aumento en el uso de esta técnica para proveer de agua a la población, han surgido empresas privadas que ofrecen el servicio de perforación de pozos nuevos, así como de recuperación y mantenimiento de los ya existentes, las cuales junto a las compañías de vieja data decidieron formar un gremio. La actividad es tan intensa que las autoridades prevén normar y regular el negocio, el cual se fortaleció debido a la necesidad de la gente de resolver los problemas de los servicios públicos que el gobierno no ha podido mejorar.
En mayo de 2022, Transparencia Venezuela publicó un informe titulado Aguas residuales: otra deuda ambiental en Venezuela en el que denuncia que «la falta de políticas públicas e información sobre el manejo de estas aguas en todo el país, oculta un daño ambiental severo que puede explotar en cualquier momento y del cual pocos se preocupan. Transparencia Venezuela alerta sobre este grave problema y une su voz a la de expertos académicos y representantes de organizaciones de la sociedad civil, para exigir acceso a la información pública y atención profesional urgente».
«A pesar de que en 2018 el gobierno de Nicolás Maduro creó el primer ministerio en la historia del país dedicado exclusivamente a la gestión de las aguas, el Estado no ha publicado datos sobre depuración de aguas servidas en territorio venezolano. La cifra más reciente sobre el tratamiento de las aguas está registrada por la Cámara Venezolana de la Construcción, en su Plan Nacional de Infraestructura 2021-2033, el cual indica que solo 28% de las aguas residuales, urbanas e industriales, son depuradas en el país», se lee en el informe.
El mensaje central de la ONU en el Día Mundial del Retrete 2022 es que el saneamiento gestionado de manera segura protege las aguas subterráneas de la contaminación por excrementos humanos.
Se trata de un mensaje en apariencia lógico pero, actualmente, el mundo está muy lejos de cumplir la promesa del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6.2: garantizar retretes seguros para todos de aquí a 2030.
Datos del Banco Interamericano de Desarrollo para 2020
La campaña insta a los gobiernos a trabajar una media de cuatro veces más rápido para garantizar que se alcance a tiempo el ODS 6.2, a la vez que realiza un llamamiento a los políticos para que reconozcan plenamente la conexión entre el saneamiento y las aguas subterráneas en sus planes para salvaguardar este recurso hídrico vital.
Los mensajes clave que debemos conocer para este Día Mundial del Retrete
1-. Un saneamiento seguro protege las aguas subterráneas: los retretes que están correctamente ubicados y conectados a sistemas de saneamiento gestionados de forma segura, recogen, tratan y eliminan los excrementos humanos y ayudan a evitar que estos se propaguen por las aguas subterráneas.
2-El saneamiento debe resistir el cambio climático: los retretes y los sistemas de saneamiento deben construirse o adaptarse para hacer frente a fenómenos meteorológicos extremos, de modo que siempre presten servicio y las aguas subterráneas queden protegidas
3- Urge adoptar medidas en materia de saneamiento: estamos muy lejos de garantizar retretes seguros para todos en 2030. Ahora que solo faltan ocho años hasta esa fecha, el mundo necesita trabajar cuatro veces más rápido para cumplir nuestra promesa.
Con información de la ONU y el BID – TalCual