José Gerardo Mendoza: Pagando penas y culpas ajenas

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Pretender seguir obteniendo huevos de oro hay que cuidar la gallinita que los pone, eso va con todos los venezolanos sin excepción que estamos obligados únicamente a ponerle atención y amor a nuestra nación hoy convertida según las estadísticas en el segundo país del planeta con más pobreza y deficiencias en todo que puede animar, sobre todo aquellos coterráneos que le dedicaron su vida a trabajar, portándose pulcramente y hoy careciendo de todo por falta de humanidad y desaciertos, pagando penas y culpas ajenas en su vida sana y honesta no paso por su mente que serían castigados y burlado con una triste pensión de Siete dólares ($:7.00) mensuales, en qué cabeza cabe esta barbaridad y a donde se fueron las promesas ofrecidas o fue que asumieron la  idea  del degenerado Taro Aso Ministro de Japón y los demás que piden a clamor la desaparición o muerte de los de tercera edad con el propósito de aumentar la economía mundial; ¡A guaros bien malucos! ¿Verdad?

 Unidos sin excepción en una batalla campal que sea primero que todo el bienestar del país con un borrón y cuenta nueva a convencernos que nuestra rica patria no hay ninguna razón para vivir permanentemente en estrechas dificultades y mal vivir. No es posible que se haya perdido en su totalidad los valores de antes, pensando que fueron valor agregado en su fundación.

Aspiramos que este próximo año sea de éxitos para todos y haya un cambio total para bien y sea de forma positiva y sirva para borrar todos los errores cometidos y no seguir en la picota del mundo viéndonos como si fuésemos que a todos nos sobrara la mala intención, no por favor eso no es así porque aquí queda aún mucha gente pensante que solo piensan en trabajar, produciendo con todo su talento porque esa es la verdadera idiosincrasia del buen venezolano.

Entonces la tarea es si queremos una nación de primera línea, una educación buena, universidades de primera y sus educadores bien tratados y remunerados, copiarse de los japoneses que están muy claro y dicen que si no hay profesor no hay emperador, también los votos en unión para abrir las puertas a la inversión nacional y extranjera, dándole la garantía y seguridad para que regresen con confianza y se sientan cómodos, para que sea parte de la refundación a la nueva y poderosa Venezuela que es lo que todos de corazón aspiramos, pongámosle nuestra mente en positivo y en nombre del Espíritu Santo que nuestro amado país vuelva a ser la patria envidiada, apetecible donde todo el mundo deseaba vivir en ella; se dice que por duro que sea la verdad es mejor que la ilusión o la mentira.

Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.

volcancito2@gmail.com6

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