El día 6 de enero se rememora en algunos países el Día de Reyes para celebrar la adoración del Niño Jesús por medio de los tres Reyes Magos, provenientes del Oriente, cuyo propósito era rendir honores y llevar presentes al recién nacido. Este reconocimiento del mundo pagano es un hecho trascendental al reconocer a Jesucristo como Rey único salvador de la humanidad. Según la religión católica, esta fecha coincide con el día de la Epifanía. Dicha celebración litúrgica antigua significa la revelación o aparición del niño Jesús en el mundo no monoteísta.
Los Magos eran sacerdotes persas o babilonios dedicados a estudiar con el fin de hallar a Dios. Los nombres de ellos fueron Melchor, Gaspar y Baltasar, provenientes de tierras lejanas para entregar ricos presentes como oro, incienso y mirra, para homenajear al rey de Reyes Jesús de Nazaret. De acuerdo a las escrituras de la Biblia, relata que ellos pasaron por Jerusalén para hablar con Herodes, monarca de Judea y averiguar por el “Rey de los Judíos”, acabado de nacer y guiados por una estrella en el cielo. Manifestaron que venían a adorarle. Ante tal manifestación Herodes consultó a sus sacerdotes para confirmar tal hecho y corroborar según la profecía, el Mesías nacería en Belén. El Rey solicitó a los visitantes que al encontrarlo, él acudiría a venerar.
Ante una revelación en sueños en cuanto a las verdaderas intenciones de Herodes, los Magos decidieron emprender una vía diversa después de ver al recién nacido y honrarle, evitando de nuevo pasar por Jerusalén. Al advertir Herodes que los Magos motivaron que Jesús no estuviera más en Jerusalén, ordenó dar muerte a todos los niños menores de dos años residentes en Belén. Semejante barbaridad infantil ha sido calificada como la matanza de los inocentes. Con anticipación habían entrado a la casa donde habitaba el pequeño con su madre María y su padre San José, al postrarse ante él, lo adoraron, le ofrecieron sus respectivos regalos y se los dejaron.
Veamos determinadas curiosidades sobre ésta efémeride religiosa: por el número de regalos entregados al niño se consideraron que eran tres Reyes Magos, mientras ciertas Iglesias de Oriente sostienen que fueron doce; la adoración del Niño Jesús se estima la epifanía de Cristo a los no Judíos; en varios países los Reyes Magos son venerados como Santos; en Puerto Rico hay estatuas en su honor; los mismos simbolizan las religiones paganas de Europa, Asia y África; por iniciativa de San Francisco de Asís se incluyeron sus figuras en los nacimientos…
Aunado a ese Día de los Reyes Magos como una tradición, en la cual los niños se acostumbran a recibir regalos en el cierre del período de navidad en muchos países, los reciben con alegría.
En la Iglesia de San Apolinar Nuovo, en Rávena, Italia se conoció por primera vez el nombre de los Reyes Magos a mediados del siglo VI. AL transcurrir los años, se le ha hecho representar de las tres razas conocidas de la antigüedad, simbolizando tres edades del hombre e indicando a la terna de los continentes antes nombrados. Finalmente otra narración describe que después de la resurrección de Jesús, el apóstol Tomás los ubicó en el reino de Saba, donde los bautizó y los consagró como obispos. Son martirizados en el año 70 d.c. y depositados sus restos en un sarcógrafo. Al sitio fue Santa Elena, considerada la patrona de los arqueólogos, halló tres cuerpos coronados y demostró que eran los tres Reyes Magos. Enseguida los trasladó a Constantinopla.
En el reinado de Federico I, Barbarroja en el siglo XXX d.c, los trasladó a Colonia, Alemania, donde reposan.
Rememoremos el día de los Reyes Magos como testimonio al rol emprendido y ejecutado para salvar al Mesías, de la intención malévola de Herodes para eliminarlo ante la presunción que podía destronarlo.
