¿Quién quiere ser candidato de la oposición? Primarias lo definirán
Primer capítulo de las Presidenciales: Primarias opositoras
Sin haber concretado un conjunto de condiciones que faciliten un evento electoral, la Plataforma Unitaria venezolana, anuncia para el 22 de octubre la realización de las elecciones primarias, con miras a las elecciones presidenciales pautadas para el 2024.
El anuncio estaba previsto. No hay sorpresas.
Lo que sí causa extrañeza, es que se haya procedido a un cronograma desconociendo lo elemental en todo proceso de elecciones internas.
¿Cuál es el objetivo?
Suponemos que elegiremos un candidato presidencial, para unas elecciones presidenciales nacionales sobre las cuales hay muchas dudas, como la fecha, la forma, el objeto.
Algunos voceros calificados del chavismo-madurismo han señalado que se realizarán este año 2023.
Si esa fuera la situación, ¿qué haría la oposición? ¿Hay un plan B?
Preámbulo: Es de suponer que, tras bastidores, un acuerdo de palabra precede entre el gobierno y la Plataforma Unitaria, con puntos mínimos de entendimiento y el compromiso de negarlo de no concretarse como todo indica, el diálogo en México.
Es el lado oscuro de la fuerza, que casi siempre ocurre en este tipo de coyunturas.
Hasta el presente el madurismo, ayer el chavismo, han llevado la mejor parte de ese acuerdo no escrito en estos 23 años.
Mutatis mutandi, lo mismo que ocurrió con el fin del gobierno interino y los Estados Unidos. Estos morirán negado el conocimiento, no obstante, nadie en su sano juicio, puede creer que los líderes políticos de AD, UNT y PJ, se iban a lanzar en esa jugada sin la autorización del gobierno de Estados Unidos. Es estúpido pensar lo contrario.
En el oficialismo
Esos mismos voceros, incluido el presidente Maduro, han mencionado la posibilidad de que sean elecciones generales o una mega-elección. Jugada prevista por parte de un presidente cuestionado, en una organización como el PSUV, donde a pesar de lo que se diga, no reina la unidad.
De hecho, siguen sonando a muy baja voz, los nombres de Rafael Lacava, el propio Diosdado y de una exmilitante silenciada y expulsada del Psuv, sencillamente por cuestionar la conducción del país y la reciente legislación producida en la asamblea nacional 2020, como María Alejandra Díaz.
Además, la militancia del PSUV recibe mensajes críticos e invitaciones de Rafael Ramírez, quien intenta a través de la manipulación de la imagen del charlatán del siglo, ganarse el amor del militante y hacerse candidato sentimental.
Hasta el nombre de uno de los pocos 4F vigentes como Francisco Arias Cárdenas, retumba en la cabeza de muchos y el propio Ministro de la Defensa, ha dejado correr su nombre en determinados sectores de poder.
No dudo en que será Nicolás el elegido. Imposible que pase lo contrario en una organización, donde sí hay discusión interna, aunque no prevalecen los principios democráticos.
Maduro necesita «amarrar» todos sus cuadros, por ello un evento donde el «pellejo» de todos esté en juego y no exclusivamente el suyo, sella cualquier posibilidad de arreglos a nivel local y regional.
Impide los juegos individuales o parcelarios de figuras de relieve en sus regiones. Obliga la disciplina por supervivencia.
No habría posibilidad de titubeo. Es ahora o nunca. Todos jugando hacía adelante.
Si en el 2024 gana la oposición, como un castillo de naipes, todo el poder chavista en gobernaciones, asamblea, consejos legislativos, alcaldías y concejos municipales se derrumbaría.
Los jefes militares están en conocimiento de esto y por ello prevén, un posible escenario de «facto» de ser preciso, mostrando el madurismo su verdadero rostro.
Oposición versión Plataforma Unitaria
Hablamos de versiones, porque existe otra autodenominada oposición que opera como satélite del chavismo y no exclusivamente bajo arreglos, como sucede en la antes conocida como G4.
Es clarísimo nuestro análisis de esa oposición, conocida vulgarmente como «alacranes», pues sus figuras responden a otros intereses como AD-Bernabé, Cambiemos de Timoteo Zambrano, Voluntad Popular no López, la gente del Lápiz, Copei versión TSJ, Primero Venezuela con José Brito y Luis Parra, y demás partidos judicializados, entre otros.
Figuras como Claudio Fermín, Luis Eduardo Martínez, envían un borrador y luego de revisado desde Miraflores son autorizados a ponerlo de manifiesto.
Otra parte de la oposición tiene fisonomía propia como el MAS, PCV, quienes luchan por no ser también «judicializados», Leocenis García, Eduardo Fernández con su partido Unión y Progreso, Henri Falcón y su, sin Futuro, etc. Ellos se manejan en el debate de intereses nacionales, no necesariamente siempre en contra y sin excluir entendimientos con figuras del gobierno nacional y del exterior como Zapatero. Leocenis García, por ejemplo, cada cierto tiempo visita el departamento de Estado de los Estados Unidos.
La oposición tradicional
Aunque no siempre actúa bajo estos principios, allí podemos incluir a Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, Fuerza Vecinal, AD-versión Ramos Allup, Vente, Causa R, Voluntad Popular-López, por mencionar una parte de ellos. Existen otros representados por Delsa Solorzano, Cesar Pérez Vivas y varios de militancia anterior en otras organizaciones políticas.
Antonio Ledezma muy ido a tierra con su partido ABP, quienes han manifestado no participar en primarias, además de que carece de cuadros en más del 90% del país.
Posibles candidatos hasta el momento:
Carlos Ocariz, Juan Pablo Guanipa, Gustavo Duque, Elías Sayegh, Cesar Pérez Vivas, María Corina Machado, Juan Guaidó, Andrés Velásquez y Delsa Solorzano.
Se mencionan extraoficialmente los nombres de Henrique Capriles y Manuel Rosales.
¿Que esconde ErConde o Benjamin Rausseo?
Sobre la autoexclusión de ErConde o Benjamin Rausseo, quién hasta el presente no ha manifestado su disposición a participar en las primarias de la oposición ni si estos, lo reconocen como tal, carecemos de elementos para afirmarlo o negarlo.
De la noche a la mañana quiere ser presidente y, en consecuencia, candidato. Quizá su deseo anterior (pasado proceso presidencial) ha sido prolongado, es decir, siempre ha estado allí el «gusanito» de acariciar el poder político, el manejo del Estado.
Todo hace presumir que Benjamin Rausseo (hasta ahora vendido como ErConde) viene a cumplir un propósito dentro de una estrategia.
Detener o afectar el avance de la hasta el presente candidata Anti-Establishment María Corina. El electorado cuenta con dos opciones, la mencionada y “ErConde”.
Qué tanto puede avanzar o detenerse ese fenómeno que se nutrirá de lo que es obvio: El 80% de los electores cuestiona el liderazgo político en ejercicio, lo analizaremos en otra columna.
Ni los partidos políticos tradicionales ni el madurismo están preocupados por esta figura. Ellos saben de su crisis y que el crecimiento del ErConde es producto de esa carencia, de ese vacío, que ellos no pueden ocupar.
La alegría para ellos es que por primera vez María Corina debe defenderse contra un enemigo mortal, que se alimenta del mismo sitio que ella.
Pudieran en duelo morir ambos, o pudiera suceder lo contrario, fortalecerse uno de ellos. No me quiero imaginar el llanto de muchos, si por obra y gracia del espíritu santo, ambos se unen. Es muy improbable ese escenario. No imposible. Por ello los «Corinistas» deben pensar muy bien los golpes que le dan.
Hay virus creados para matar otros y el peligro es que se generalicen por todo el cuerpo de Venezuela.
Los creadores de «made in Conde» saben que no hay nada mejor para luchar contra una marea que crear otra. El peligro es que ambas se unan hacía un mismo destino.
Los demócratas en Estados Unidos lucharon contra la «marea roja», levantando muros, que no la detuvieron, la minimizaron.
Las encuestas y estudios de opinión
Atacar a los creadores y promotores de ellas, es una necedad. Ninguna dice toda la verdad y no todas dicen mentiras. De una u otra manera expresan argumentos válidos hijos de la consulta, de los focus group.
Sus voceros pudieran tener misiones predeterminadas. Ante ello, lo válido, lo lógico, lo racional es saber leerlas. Revisar lo que «entre líneas» enseñan.
Lamentablemente la culpa es también de un pueblo que responde más a lo emocional, que a la lógica.
¿Qué hará Rosales?
El hombre del “Diente Roto”, como alguna vez lo bautizó Arias Cárdenas, no dará un paso en falso. Es famoso por su calculismo, por su ajedrez político tipo AlphaZero. En los primeros días de marzo decidirá. Quién asegure su acción, no lo conoce. Ni siquiera la almohada sabe lo que piensa.
Rosales tiene pocos «cartuchos» en la recamara de su arma. Arriesga el fácil control de la gobernación y de las alcaldías. Tiene un heredero: Uno de sus hijos. Ya lo ha lanzado. Desea que se haga con luz propia. Equivocarse es arriesgar el legado que deja.
Si María Corina llegase a presidente, Rosales tendría la «muerte súbita» asegurada. Si gana Benjamin Rausseo, teóricamente podría «renegociar», al igual que lo haría como hasta el presente con Maduro.
Se hace impretermitible pactar. Capriles es el primer escogido. «El flaco» de la «arrechera», sabe que Borges y Guanipa, han construido un PJ a su imagen y semejanza. Pelear internamente es ir contra la corriente.
¿Caerá Capriles en esa trampa «caza bobos»?
Y si Capriles renuncia a Primero Justicia y compite como independiente, ¿pudiera Manuel Rosales librarse del compromiso que tiene de ser candidato y apoyarlo?
No es descartable ese escenario.
Evidentemente que esta jugada requiere de Nicolás para librarse de la inhabilitación.
Fuerza Vecinal, superado el capítulo interno entre Duque y Sayegh, podría sumarse en ese acuerdo por el otro líder de Primero Justicia.
La última palabra
La tiene María Corina y el propio ErConde.
María Corina sabe que en unas primarias es cuesta arriba ganar los cinco estados más importantes: Zulia, Miranda, Carabobo, Aragua y Caracas. En este último sector, pudiera sorprender, más no así en los tres primeros.
María Corina debe dilucidar con tiempo si participará o no. Igual ErConde.
Muerto el diálogo es inevitable la interferencia del CNE.
Se quedaron la mayoría sin poder estudiar. Para ellos serán sus últimas primarias.
Abogado y comunicador – @AngelMonagas