Pablo Aure: Bragas naranjas y espíritu chavista

Compartir

 

Solo hablan, señalan y acusan los jefes, el resto calladito.

Si no se tratara de un libreto preelectoral, el común de la gente se sorprendería, no solo por lo “incautado” a los imputados sino también por el respeto a la justicia.

Pero no. Esto no es producto de un día, ni son todos los que están ni mucho menos todos los que son. Tampoco el monto del desfalco a la nación es ese que “escandalosamente” se muestra en maletas llena de lingotes de oro, en los emporios industriales, automotrices y flotas aéreas y navales. Haber acumulado esa fortuna, no fue de un día para otro, ese inmenso derroche es producto de años de revolución, eso estaba a la vista de todos, lo exhibían como trofeo revolucionario. Todos los capturados hasta hace algunos años eran pobres de solemnidad. No sé le conoce trabajo ni tampoco haber recibido herencia alguna. Toda esa acumulacion de riqueza era conocida por los organismos de “seguridad” que desde luego, también deben tener acumulada (y guardada) su tajada. Nada de lo que estas últimas semanas ocurrió, era desconocido por los que hoy señalan a los corruptos. Es más, si los señalados tienen esos cuantiosos bienes (producto de sus males) imagínense cuánto no será el torrente de dólares mal habidos que poseen los verdaderos jefes.

Siendo esto así, entonces ¿a qué se debe esta dramática exhibición de malandros “revolucionarios”? Pues a nada. Todo es una farsa. Para el chavismo “no hay crimen ni castigo” solo hay técnicas para permanecer en el poder y esta es una. En esta, como en otras tantas, apelan a la lucha simbólica contra la corrupción. Sus presos permanecerán en el país, porque en otros no hay seguridad de que la garanticen la misma comodidad que tendrán aquí, mientras dure la reclusión. Noten que ninguno se ha ido, nadie ha pedido asilo por persecución. Todos calladitos y sin señalar a nadie. No hay delacion, no tienen cómplices. ¡Fueron ellos y nadie más!
Conclusión de la trama policiaca anticorrupción

Dos mensajes: una advertencia y otro político. La advertencia es para los que se identifican con la oposición que sepan lo que les espera y muy pronto. Con o sin razón, serán capturados; les colocarán las mismas bragas naranjas y hasta quizá, los sienten en las mismas sillas con los lazos “cuchis”. Así que, los que han manejado fondos en la Asamblea Nacional electa en el 2015 a prepararse. Los que hayan cobrado sueldo y otros emolumentos como diputados, tengan la seguridad que los buscarán (con o sin razón) el mensaje es claro: “en Venezuela no hay intocables” ¡Por Dios!

Por otra parte, en lo político está comedia judicial, le dará argumentos al madurismo para la campaña electoral:  perseguirán a los corruptos: estén del bando que estén. _“Hay pobreza, los hospitales no funcionan, los maestros no cobran bien porque hay sanciones porque los bandidos exrevolucionarios y la oposición apatrida, se han robado lo que le pertenece al pueblo”_ Este será el libreto, lo pueden escribir. Eso será así mientras tanto, continuaremos en presencia del teatro revolucionario.

Queridos lectores, aunque eso sea así, les digo a los que todavía estamos aquí, que no tenemos una vía distinta a seguir buscando la manera de organizarnos, apartando el egoísmo y las mezquindades, remar todos hacia el mismo lado, porque ya hay suficientes demostraciones que si no nos ponemos de acuerdo en lo más elemental, que es luchar juntos por un mismo propósito, estos demonios acabarán con todos. Ellos, permanecerán. No se cuánto tiempo más, pero seguirán allí, porque hay demasiada complicidad e intereses para mantener la corrupción: dentro y fuera  de Venezuela.

@pabloaure

 

Traducción »