El beneficio neto de Gazprom cayó 41,4% en 2022, un año marcado por la fuerte bajada de las exportaciones rusas de gas a causa de las sanciones vinculadas al conflicto en Ucrania.
Las ganancias netas pasaron de 2,09 billones de rublos (26.000 millones de dólares) en 2021 a 1,23 billones (15.000 millones de dólares) el año pasado, según el informe anual del gigante del gas ruso, publicado este martes y citado por las agencias de noticias rusas.
El grupo, un pilar de la economía rusa dirigido por allegados del presidente Vladimir Putin, fue uno de los principales blancos de las sanciones occidentales.
En un comunicado publicado separadamente, el grupo explica que el «aumento de los pagos de impuestos del segundo semestre tuvo un impacto en el monto de los beneficios».
Para hacer frente a esa situación, Gazprom, una empresa que cotiza en la Bolsa de Moscú pero que está controlada en un 50,2% de su capital por el Estado, propone no pagar dividendos a sus accionistas por los resultados de 2022.
Gazprom perdió el año pasado la práctica totalidad del mercado europeo, exceptuado el del Gas Natural Licuado (GNL) que los países de la Unión Europea (UE) le siguen comprando por falta de alternativa.
Las sanciones se proponen limitar los ingresos relacionados con las exportaciones de gas, a fin de privar al Kremlin de importantes recursos para financiar la ofensiva militar en Ucrania.
Según datos del Foro de Países Exportadores de Gas (GECF), las ventas del hidrocarburo ruso por gasoducto cayó de 140.000 millones de m3 a 63.000 millones de m3 (-55%).
Para compensar esa pérdida, Gazprom, que tiene el monopolio de las exportaciones de gas ruso a través de gasoductos, procedió en los últimos meses a una reorientación estratégica, dirigiendo una parte mayor de sus exportaciones hacia Asia, con una fuerte demanda energética.
Las entregas a la región del Extremo Oriente ruso y a China, a través del gasoducto «Fuerza de Siberia», llegaron a un máximo histórico, de 15.500 millones de metros cúbicos.
Moscú aumentó en paralelo sus ventas de GNL. Los analistas estiman que reorientar las exportaciones de gas será más difícil que reorientar las ventas de petróleo (que también son blanco de sanciones), dado el coste mayor de las infraestructuras de transporte del fluido y del tiempo requerido para construirlas.
Gazprom prevé construir en 2024 un nuevo gasoducto, «Fuerza de Siberia 2», para enviar gas al noroeste de China.
La empresa, con una plantilla de cerca de medio millón de empleados, posee una de las mayores reservas mundiales de gas y es uno de los motores de la economía rusa.
