Otrora la gallina de los huevos de oro, caja chica del Psuv y extramuros del chavismo, nuestra estatal petrolera se halla harta, hoy por hoy, de pasivos producto de actitudes sandias (furor nacionalista) y, en claro, desatinadas, durante el primer decenio del socialismo venezolano del siglo XXI: casi todas las rimbombancias locales y foráneas del presidente finado se sujetaron al petróleo venezolano. Países y líderes que a un Chávez común y silvestre nisiquiera le pedían la hora, se le hincaban, y repartió dinero por el mundo a cambio de enflautos a su régimen, mediante entrega de barriles de petróleo (apropiación indebida de parte suya). Durante 2007, cuando la producción era de unos 2,4 millones bpd y con precio internacional del crudo sobre unos 90 USD/barril, y aunque no debió irle tan mal, en los últimos doce meses el saldo de su deuda, según IEA y FMI aumentó en un 449 por ciento. No obstante, desde 2006, ya ofrecía un saldo deudor, equivalente a unos 16 billones de USD; unas cinco veces y media superior a la de 2,9 billones de USD que ostentaba durante aquel año, salto que Rafael Ramírez justificó por el aumento de las reservas en los yacimientos de la FPO durante el ejercicio 2007, que se traduciría en un eufemismo, para luego referirse al retiro forzoso que el régimen de Chávez impuso a las petroleras transnacionales que operaban en la Faja, como socias de Pdvsa (empresas mixtas): la británica BP, las estadounidenses ConocoPhillips, ExxonMobil, Chevron, así como la noruega Statoil y la francesa Total. El argumento de Ramírez resultó anodino entre las cifras del incremento patrimonial y el aumento de la deuda: apenas un dos por ciento al pasar de unos 53,1 billones de USD a unos 53,9 billones entre un año y el siguiente.
|En virtud de que para 2010 el erario bullía de deudas, al bajar la capacidad de endeudamiento, Chávez opta por el comodín de Pdvsa, pues las tasas a pagar eran muy elevadas, va contra esta, que hasta 2006 estuvo solvente. Pero, a causa de sus pasivos, se emite el bono Pdvsa2017, que difícil de pagar durante 2016, se plantea una renegociación denominada Pdvsa 2020, fecha a cumplirse con el pago de dicha deuda; bono impagado por unos tres billones de USD, de los cuales cerca de un billón y medio se asignaron a Rosneft (petrolera rusa), a la tasa de un ocho y medio por ciento; el resto, se dio en garantía de un 50,1 por ciento de las acciones Citgo.Es el origen puro y simple de la deuda. Asimismo, agotó toda fuente de financiación porque expropió al colmo de que Pdvsa y el gobierno acabaran sobre endeudados y sin poder honrarla (default). Se trata de un pasivo que sextuplica al monto del presupuesto nacional 2023, equivalente a la friolera de unos 10,5 billones de USD.