El camino de las primarias, además de largo, se ve culebrero; por un lado Diosdado Cabello poniendo condiciones, para la realización de las mismas; como si se tratara de un actor más de la oposición, a objeto de presentarse como el mejor saboteador de la partida; aun cuando la última vez dijo que miraba con buenos ojos que dicho proceso se realizara; por otra parte todo el ordenamiento jurídico, que se ha venido tejiendo para todo tipo de proceso electoral, y por aquí podría estar una trampa, a partir de la disposición que hay en la ley de que cualquier proceso de esta naturaleza, tiene que estar supervisado por el CNE; digo trampa, porque al parecer fue esto lo que llevó a la Comisión Nacional de Primarias a reunirse con el Departamento Técnico del CNE en privado, tal como lo denuncia el comando de campaña de María Corina Machado.
No hay que pasar por alto que también Andrés Caleca, ex presidente del CNE, viene llevando a cabo una cruzada por todo el país, a los fines de alertar sobre la especie de huelga de brazos caídos, que signa la marcha del organismo electoral. En estados como Aragua, según su denuncia, hay una sola oficina abierta, que opera en Maracay, y cuando va el elector nuevo a registrase le dicen que no hay línea en los equipos; una especie de huelga propiciada, precisamente, por el gobierno, que no quiere sobre todo que esa juventud, que se levanta hoy en día acuda a las urnas de votación; porque sabe que no lo quieren. A Nicolás Maduro más de una vez lo han sacado de algunos lugares a piedras; todo le han lanzado. Es por eso que se asoma la idea, de que el chavismo va a necesitar un suplente suyo.
Porque, además, ya la Corte Internacional de Justicia está por decidir sobre su caso y, si le fue difícil ahora en Brasil, cuando se presentó por allá como perro por su casa; lo que se tomó como una imprudencia diplomática de parte del presidente Lula, es decir, el hecho de haberlo invitado; toda vez que iba a participar de una cumbre de presidentes latinoamericanos, quienes no gustarían estar codo a codo con este sujeto, que no tiene la mejor credencial como demócrata; como se lo hizo ver el propio presidente de Chile Gabriel Boric, con el perdón de la digresión; condenado ahora por la CPI, que lo más seguro es que lo declare un dictador genocida, como lo solicitan las víctimas o los familiares de las víctimas, que han caído en manos de sus cuerpos represivos, su presencia en la presidencia se vuelve más problemática. Por segunda vez el fiscal de la CPI Karim Khan visita el país, o sea, la cosa va en serio. De modo que al partido oficialista no le queda sino apelar a una figura emergente; que pudiera ser el propio Cabello o uno de los hermanos Rodríguez, mientras Maduro se mete por un largo tiempo en el congelador.
Es por esto que el gobierno lo que quiere es arrinconar el proceso de las primarias con decretos de decretos; pues, por lo demás, la Comisión de Primarias tampoco cuenta con el material electoral, en especial, el Registro Electoral, y, en ese sentido, se ve muy complicado la sistematización del voto exterior; que el gobierno estuvo chalequeando, y donde existirían unos cuatro millones de electores, según se ha venido sacando la cuenta, y que lo más probable es que queden como votos amarrados para las elecciones de 2024, a favor del candidato de la oposición. Es aquí donde está el nudo del problema, como se pregunta el equipo de la señora Machado: ¿hasta dónde va a llegar el apoyo técnico que va a prestar el CNE? Por supuesto, yo pienso que si se hace sin dicho apoyo, el candidato que resulte de allí, el gobierno lo va a impugnar, en virtud de que su proceso de elección estuvo al margen de la ley, a ese respecto. Eso es lo que uno supone; pues, como decía, el gobierno quiere entubar ese proceso de primarias con la intención de filtrarse con su militancia a través de un candidato, que sería de su mejor conveniencia. Obsérvese que Cabello ha dicho que él apostaría por un Manuel Rosales o un Henrique Capriles: ¿se dedica a sembrar dudas este señor?; mientras que a la señora Machado le teme esta gente, a propósito del arrastre que ha venido a abrigar su liderazgo, de acuerdo a las fotos y videos, que van llegando por las redes sociales, relativas a su recorrido por todo el país.
Aquí en el fondo lo que está planteado es la unidad; pues todos estamos de acuerdo en la circunstancia, de que el gobierno ha venido utilizando al CNE a lo largo de este proceso de las primarias como un aparato de terror y, en ese sentido, atiza la división en las fuerzas opositoras. Porque, por lo demás, se trata de un CNE que va a arbitrar la elección presidencial de 2024. Lo otro que también pudiera presentarse es el descontento que, de pronto, pueda manifestar uno de los precandidatos; que lo llevaría a lanzarse por su cuenta, habiendo perdido las perspectivas de la realidad, y así se quiebra la organicidad de las fuerzas opositoras; que no lo creo por el momento; dado que hay algo muy importante, y es que estamos en un momento en que se ha recobrado la confianza en el voto, y ya hasta el chavismo más recalcitrante reconoce que no hay otra alternativa; pues ya admite que hasta el propio Hugo Chávez es culpable de la situación de ruina total en la que se encuentra el país; de modo que ve en las elecciones de 2024 la posibilidad de sacudirse a un Maduro; cuya mención en el pueblo ya se hace por ironía; símbolo de la destrucción de Venezuela. Por supuesto, habrá de sobra candidatos presidenciales por parte de las fuerzas opositoras, como ya se ha visto; gente a la que le gusta figurar; porque nada tienen que buscar en las presentes circunstancias; pues esto lo decide gente que figura en las encuestas con liderazgo y maquinaria partidista; jugando, por lo demás, el gobierno a la división de las fuerzas opositoras, no hay que pasar por alto que el diputado psuvista Jesús Farías confesó, públicamente, que él financiaba a varios dirigentes de la oposición en las pasadas elecciones legislativas: ¿qué no hará ahora el gobierno?
