Confrontaciones entre grupos de poder. Mucha debilidad y escasa credibilidad de cara a las elecciones presidenciales de 2024. Una figura oficialista regional que es bien vista hasta por parte de la oposición y un canal de diálogo directo con el gobierno de Estados Unidos son algunas de las respuestas que ofreció el politólogo Ricardo Ríos cuando se le preguntó “¿Qué está pasando dentro del chavismo?.
La interrogante fue un ápice que realizó Medianálisis para que Ríos ahondara en un tema político que genera muchas preguntas, que tiene pocas respuestas y produce desinformación. Las respuestas y análisis del especialista ocurrieron este jueves 22 de junio, durante una nueva edición del ciclo de foros “Perspectiva País, un espacio moderado por el periodista Andrés Cañizález y que es transmitido por los canales de YouTube y Facebook de esta organización.
Ríos puntualmente dijo que el oficialismo no está unido y que en la actualidad vive la crisis más profunda desde que llegaron al poder. Explicó que los grupos dentro del gobierno se dividen por los que se formaron y se alinearon con el fallecido presidente Hugo Chávez y las corrientes que se crearon y tomaron fuerza con Nicolás Maduro.
“La forma de gobernar de Chávez y la de Maduro marcaron diferencias; eso los fragmentó y ya son 10 años en esa situación, lo que a su vez los ha debilitado. Además de eso, hay muchos elementos que indican que no están unidos, normalmente en cualquier movimiento hay corrientes, matices, pero particularmente el oficialismo creo que está enfrentando la crisis más severa a lo interno” explicó Ríos cuando argumentaba la situación actual de este gobierno.
Agrega que otra de las causas más importantes que influye en los trances internos gubernamentales es el predominio de los grupos de poder que lideran Diosdado Cabello, los hermanos Jorge y Delcy Rodríguez y los vestigios de Tareck El Aissami. Señala que cada tropa le ha cambiado la perspectiva de mando a Maduro.
“Dentro del oficialismo hay una federación de grupos, es decir, Maduro se ha encargado de gobernar los grupos y es su prioridad porque sabe que ahí hay poderes. Y el lugar común de estos grupos, es que quien lidera un grupo ha sido vicepresidente de la república, lo que representa constitución de poder y por ende, construcción de redes. El caso de El Aissami que era otro líder de grupo (y la red de corrupción en criptomonedas y Pdvsa) debilita a Maduro y evidencia las fracturas que tiene el oficialismo dentro de esos grupos de poder que existen. Los referentes que tiene el gobierno son: Diosdado Cabello, que maneja el PSUV y que venía perdiendo terreno ante El Aissami, y los hermanos Rodríguez contra quienes ha tenido confrontaciones políticas que al final debilitan al gobierno y a Maduro” analizó.
Cuando Ríos revela que estos grupos influyen en la gestión de Maduro lo hizo en referencia a las elecciones presidenciales que deberían efectuarse en 2024.
Señala que el presidente actual, según sondeos recientes, tiene una tendencia de voto muy baja que no llega ni a dos dígitos y eso ha obligado al presidente a recurrir a apoyo internacional como su reciente viaje a Brasil y a Medio Oriente. “La lectura que tengo sobre esos viajes para verse con Lula entre otros mandatarios es que está anclando su candidatura al apoyo internacional porque sabe que el nacional (por los grupos que tiene) es muy flojo” acotó.
La figura electoral alternativa: Lacava
El politólogo, además de ofrecer su perspectiva sobre la interna oficialista, hizo análisis sobre las elecciones presidenciales y directamente expresó que la tolda roja la tiene cuesta arriba porque su principal candidato no tiene un respaldo que impacte o tenga arrastre a nivel nacional. De hecho, dijo que existe una figura alternativa que está mejor posicionada que Maduro, pero que no es bien visto por uno de los líderes de grupo de poder.
“Maduro tiene una dificultad muy grande para ser un candidato presidencial y es que dentro de los que tienen intención de voto, no tiene preferencia y su porcentaje no alcanza los dos dígitos y eso hace creer que la mejor figura para el oficialismo de cara a las elecciones, tiene que ser otra. El mejor posicionado en cuanto a aceptación es el gobernador Rafael Lacava; según las encuestas tiene doble dígito de preferencia, lo sigue Maduro, los hermanos Rodríguez y el último es Diosdado Cabello. Lacava puede ser la figura que genere arrastre dentro del mismo chavismo, pero también puede atraer opositores, pero Diosdado Cabello tiene confrontaciones con Lacava y no permite la candidatura” profundizó.
En el tema electoral también examinó a la oposición y apuntó que las primarias es un recurso que puede usarse como portaviones para hacerle competencia a toda la maquinaria del gobierno y para despertar a un electorado que en la actualidad es pasivo y lleno de interrogantes.
“Se ha satanizado las primarias, pero las primarias se han transformado en la mejor opción que tiene la oposición. Unas primarias exitosas, en las que participen 3 millones de personas que son los que han declarado tener clara intención de votar, motiva, moviliza y activa a quienes no están claro para votar, entonces eso se traduce en la mejor alternativa para que la oposición vaya fortalecida a las elecciones” comentó.
Cuando habló de primarias, Ríos también desgranó a cada opositor basado en sondeos recientes que vislumbran lo que más o menos quiere la gente en el gobierno. En los sondeos recientes, la figura que tienen los opositores o que tienen preferencia por los consultados es María Corina Machado y Benjamín Rausseo (Er Conde del Guácharo). Ambos tienen porcentajes altos de aceptación y captan el 80% de la intención de voto de los encuestados porque se presentan como algo incomparable a lo que ha hecho el gobierno.
“Por ejemplo, María Corina Machado ha logrado romper la barrera que la identifica como una persona que solo le habla a la clase alta, que es de la Plaza Altamira, pero los sondeos indican que quienes quieren votar por ella es gente de barrio e incluso personas del chavismo. Machado también representa lo que es distinto al gobierno y ella se ha logrado a desligar del desgaste político que tiene desde hace años y de algunos errores que cometió en 2014 y 2017. También desvincularse del G4 la hace ver como algo nuevo y eso ha calado a la gente” adicionó.
Silencio del imperio
El tema del diálogo también lo conversó Ríos con Cañizález, pues en el clima político del país la llamada “mesa de diálogo” es una alternativa que siempre está latente en pro de la solución a la crisis humanitaria compleja de Venezuela.
Resaltó que paralelamente a la mesa de diálogo en México existe otro escenario que fluye de forma más dinámica al que protagonizan gobierno y oposición en tierras aztecas: el oficialismo negocia con Estados Unidos (EE.UU) y éste último lo mantiene en silencio.
Ríos cree que ambos gobiernos mantienen un “vaso comunicante” porque ha habido acciones de parte y parte que solamente suceden por acuerdos que se generan estos diálogos en secreto, pero lo que le resulta particular al especialista es que los oficialistas han realizado movimientos antidemocráticos sea de palabra o de ejercicio y el gobierno de EE.UU no se ha pronunciado.
“El chavismo se ha beneficiado de acciones como las licencia a Chevron o amenazas de inhabilitar a candidatos de primaria que atentan contra la democracia y que el Departamento de Estado no haya dicho nada, es evidencia que allí hay un vaso comunicante y que algo se está negociando”.
Para quienes estén interesados en revivir momentos de este encuentro virtual con el politólogo Ricardo Ríos, pueden acceder a la grabación disponible en la plataforma de YouTube en el siguiente enlace:
La Nación del Táchira