Suma ya 16 medallas de oro, una más que Michael Phelps
La última vez que Katie Ledecky no ganó una prueba de 800 metros libre fue en 2010, cuando tenía 13 años. Fue en una competición local en Potomac, en la que terminó tercera con un tiempo de 9:12.95. No se daría a conocer a nivel nacional e internacional hasta la primavera de 2012, cuando ganó los ‘trials’ estadounidenses de clasificación olímpica. Al cabo de los años, la estadounidense ha logrado su sexto título mundial consecutivo en esa distancia desde 2013, algo que nadie ha conseguido en la natación en piscina larga, y suma ya 16 oros individuales, con los que supera en uno a Michael Phelps.
Ledecky sigue marcando su terreno en el fondo. Derrotada nuevamente por Ariarne Titmus en los 400 metros, prueba en la que le arrebató hace un años el récord mundial, se mantiene inalcanzable en los 800 y 1.500 libre. Con la confianza que le devolvió su victoria en los 1.500 ha afrontado la final de 800 con la misma ambición que en sus años juveniles. Hasta la mitad de la prueba se mantuvo en tiempos de paso de su récord del mundo, y sólo se desvió de la senda ligeramente hasta acabar con una marca de 8:08.87, la séptima mejor suya entre las 29 mejores que aun posee en la distancia.
Tenía hasta esta final treinta, pero la china Bingjie Li, con unos 200 metros finales más rápidos, adelantó a Titmus haciendo 8:13.31, récord asiático, a casi nueve segundos de la plusmarca de la americana. La australiana acabó en 8:13.59, también mejor marca personal. Ledecky las vio llegar después de haber celebrado como acostumbra las victorias que le satisfacen especialmente, como esta última.
Marca.com