Inseguro, temeroso y sumiso. Así describen quienes lo conocen a Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”, quien fue extraditado el 15 de septiembre de 2023 a Chicago, Illinois (Estados Unidos). Se le acusa de encabezar, junto a sus hermanos Iván Archivaldo, Alfredo y Joaquín Guzmán, todos hijos del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, al grupo criminal denominado “Los Chapitos”, que según el gobierno de Estados Unidos es ahora la facción más poderosa del Cartel de Sinaloa.
Personas relacionadas con las acusaciones criminales en contra de Ovidio Guzmán consultadas para este artículo revelan que durante su encarcelamiento en México, Ovidio tuvo contacto con agentes de la agencia antidrogas de Estados Unidos, DEA.
El panorama no pinta bien para “El Ratón”. Con apenas 33 años, tiene tres expedientes criminales abiertos en Estados Unidos. El más antiguo data del 2009, es el 1:09-cr-00383- 22, y está radicado en Chicago, a donde llegó extraditado el viernes pasado. Ahí está acusado, junto con más de veintena de personas -entre ellas sus tres hermanos- de tráfico de miles de kilogramos de cocaína y heroína, metanfetaminas y marihuana, lavado de dinero, control de empresa criminal continuada y transporte de propiedades robadas.
El segundo caso criminal en su contra data de 2018 y se encuentra en la Corte de Distrito de Columbia, donde fue juzgada Emma Coronel. Ahí se le acusa, junto a su hermano Joaquín Guzmán López, de tráfico de más de 500 gramos de cocaína, metanfetamina y marihuana.
El tercer expediente, y el que tiene la acusación más grave, es el radicado en la Corte de Distrito Sur de Nueva York, el caso 1:23-cr-00042. Ahí se le acusa de ser el precursor, en 2014, del tráfico de fentanilo a Estados Unidos, causando la muerte de más de 70 mil personas entre agosto de 2021 y agosto de 2022. Se le imputan cargos por posesión de armas de fuego, crímenes violentos y lavado de dinero, entre otros. En esa misma corte están también acusados sus hermanos Iván Archivaldo, Alfredo, y Joaquín.
De ir a juicio y ser declarado culpable, Ovidio podría ser condenado a entre 20 años a prisión perpetua, como su padre, quien tras la sentencia recibida en 2019 en la Corte de Distrito Este de Nueva York pasará el resto de su vida en una fría y solitaria celda en Estados Unidos.
De acuerdo a informantes, el gobierno de Estados Unidos tiene la expectativa de que Ovidio prefiera no ir a juicio y llegue a un acuerdo con el Departamento de Justicia y comience a colaborar, como lo hicieron en su momento Vicente Zambada Niebla (hijo de Ismael Zambada García, líder de otra facción del Cartel de Sinaloa), Dámaso López Núñez, brazo derecho de “El Chapo” o Sergio Villarreal Barragán, lugarteniente de Arturo Beltrán Leyva, líder del Cartel de los Beltrán Leyva.
Seguir esos pasos implicaría dar información sobre sus cómplices, entre ellos sus hermanos, y autoridades estatales y federales que le han dado protección a él y al Cartel de Sinaloa.
“El Ratón” Guzmán
Quienes conocen bien a Ovidio y lo han visto actuar dentro de “Los Chapitos” afirman que durante años ha estado bajo las órdenes de su hermanastro Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de “El Chapo” y su primera esposa, Alejandrina Salazar.
En la mayoría de las reuniones no hablaba ni opinaba, solo asentía con la cabeza para seguir las instrucciones de Iván. Lo catalogan como “muy reservado y nervioso”, y durante su vida constantemente ha requerido de terapia sicológica por los altos niveles de estrés que padece.
Desde los 19 años está casado con Adriana Meza Torres, hija de Aida Elizabeth Torres Félix y Raúl Meza Ontiveros, conocido como “El M6”, lugarteniente y socio del Cartel de Sinaloa. Adriana Meza es, además, sobrina del poderoso y sanguinario Manuel Torres Félix, el “M1”, jefe de los ejércitos armados de dicha organización de tráfico de drogas.
Quienes conocen la historia de la pareja refieren que Adriana siempre ha ejercido dominio sobre su esposo, y que incluso ella se iba de fiesta mientras su solidario marido se quedaba en casa a cuidar a las tres hijas que procrearon.
Ovidio fue detenido en 2019 en la ciudad de Culiacán, pero el Ejército de México lo liberó por órdenes del presidente Andrés Manuel López Obrador, porque supuestamente el operativo armado por “Los Chapitos” para liberar a su hermano superaba en número a las autoridades, y varias vidas estaban en peligro, según la versión oficial. El evento, mejor conocido como “el culiacanazo”, ha sido uno de los episodios más bochornosos en el mandato de AMLO.
Como lo revelé en enero pasado en este espacio, en el segundo operativo de captura llevado a cabo en el poblado de Jesús María, una ranchería del municipio de Cualiacán, Ovidio había lograr escapar pese a que la casa donde estaba con su esposa e hijas estaba bajo fuego, pero regresó cuando Adriana lo llamó para decirle que la casa seguía siendo atacada y que una de sus hijas tenía una crisis nerviosa. Así, “El Ratón”, que había logrado escabullirse, regresó y cayó en la ratonera.
Emma Coronel de fiesta tras la extradición de Ovidio
El 13 de septiembre pasado, Emma Coronel, la esposa del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera y madrastra de “Los Chapitos”, fue declarada oficialmente libre tras cumplir una breve condena de dos años y siete meses en prisión. Para la noche del 15 estaba celebrando las fiestas patrias mexicanas como invitada especial en el concierto de la banda Los Rayos de Oaxaca, llevado a cabo en el centro de eventos El Faralllón, en Lynwood, California.
Acompañada de su abogada Mariel Colón, la pareja de Joaquín Guzmán Loera llegó al evento como una estrella, sonriente y acicalándose la larga cabellera color castaño, seguida por un grupo que parecían guardias de seguridad. Iba vestida con un pantalón blanco muy entallado, botines tipo cowboy negros y un chaleco color arena, pegado al cuerpo.
Y mientras ella disfrutaba de las mieles de la libertad, Ovidio Guzmán López estaba siendo encarcelado en Chicago. No era casualidad, los dos eventos están conectados.
Durante el juicio contra “El Chapo” llevado a cabo en Nueva York a finales de 2018 y principios de 2019, salió a relucir que Emma Coronel había participado en la planeación de la fuga de su esposo de la cárcel de máxima seguridad mexicana ubicada en el Estado de México, llevada a cabo en 2015. Había servido de mensajera a “El Chapo” para girar instrucciones al Cartel de Sinaloa y había pagado sobornos, contribuyendo a dar continuidad en las operaciones criminales de la organización de tráfico de drogas más importante del mundo.
En febrero de 2021 fue detenida en Washington DC acusada de delitos graves como tráfico de drogas y lavado de dinero. La sentencia mínima que le esperaba era de diez años de prisión, pero milagrosamente se declaró culpable, no hubo juicio y le dieron una sentencia de apenas tres años que se redujo a dos años siete meses.
El medio de comunicación Vice reveló en su momento que Emma había hecho un acuerdo con la Fiscalía a cambio de colaborar, es decir, dar información sobre lo que conocía del cartel de Sinaloa. Los abogados de ella negaron dicha versión.
Tras la liberación de Emma, fuentes vinculadas a los hechos afirman que la esposa de “El Chapo” sí dio información sobre “Los Chapitos”, a quienes tenía miedo pues llevaban una mala relación que empeoró desde que “El Chapo” fue detenido en 2014.
Lo que es un hecho es que tras la detención de Emma, coincidentemente el Departamento de Justicia pudo afinar y ampliar los casos criminales contra los hijos de “El Chapo”. Hoy Iván Archivaldo, de 40 años, está en la lista de los diez criminales más buscados del mundo.
La encrucijada de Ovidio
Tras el llamado “culiacanazo” se afirma que Ovidio cambio su perfil y comenzó a traer su propia gente armada.
Luego de su detención en el mes de enero pasado, Ovidio quedó resentido con sus hermanastros Iván Archivaldo y Alfredo, y se ha quejado de que lo abandonaron.
Griselda López, madre de Ovidio y Joaquín, ejerce mucha influencia en “El Ratón”, y podría preverse una ruptura entre los Guzmán López y los Guzmán Salazar, y comenzar una lucha fratricida.
Pero la extradición de Ovidio no solo tendrá consecuencias para el clan criminal de los hermanos Guzmán, sino también para distintas autoridades estatales como la de Sinaloa, cuyo gobierno está encabezado por el morenista Rubén Rocha Moya, y para altos cargos del gobierno federal de antes y de ahora.
Algunos pensarán que si el gobierno de AMLO ejecutó la extradición es que no tiene nada que esconder, pero las extradiciones efectuadas en otros sexenios, como el de Felipe Calderón, resultaron bastante contraproducentes, ya que en muchos casos los criminales extraditados declararon en contra del mandatario y de sus más cercanos colaboradores, como el entonces secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
Las revelaciones de “El Ratón” en plena contienda electoral por la Presidencia de la República, cuya elección se llevará a cabo en junio de 2024, podrían cambiar el panorama electoral y el destino de la llamada Cuarta Transformación.
