Estamos lejos de superar las dificultades comunicacionales.
Excepto por la ayuda de las redes sociales, los portales digitales, la noticia transcurre a velocidades muy altas, pero se procesa lentamente, discerniendo entre lo que es y lo que no es importante.
Usted nos preguntará, importante para qué.
Para la libertad de Venezuela.
Algunas sirven para hacer catarsis, otras para jactarnos del contraste entre el presente y el pasado remoto, y no tan lejano.
Para distraernos de lo útil, y hasta escaparnos.
Hay quienes llegan a ella con tanto retardo que se reenvían comunicados, y artículos, que ya fueron detectados como falsos y lo hacen emocionados, cual si fueran reales, y en tiempo presente.
La información estratégica, la que nos permite desnudar las fortalezas y debilidades del régimen. Sin subestimar ni sobreestimar nada. Y nos orienta sobre en qué punto estamos. Quiénes son nuestros enemigos, sus colaboradores, en detalle. Funcionarios civiles, militares, policiales, jueces y fiscales, enchufados, colaboradores del régimen.
Las tareas pendientes, la resolución de nuestras debilidades. Nuestros aliados internacionales.
Cada paso que da la tiranía, bien analizado, estructurado, y enviado al seno del pueblo venezolano, sin esconder nada, sin que nadie, ninguna parcela le saque provecho particular en desmedro del sufrimiento de todos.
Un instrumento que permanentemente anule las campañas atemorizadoras, desmotivadoras, desmoralizadoras, desorientadoras de los enemigos del pueblo de Venezuela.
Destinadas a alimentar la esperanza, con verdades, la estrategia, con la cual derrumbar las murallas, que van quedando.
Un aparato de información, orientación, y propaganda para todos los venezolanos.
Esa es una necesidad importante para avanzar con mayor confianza en esta lucha por la libertad y la refundación de Venezuela.
Una tarea por demás valiosa que requiere equipos de trabajo, esfuerzo humano, inversiones, etc.
Un sacrificio que vale la pena.
