El presidente de Surinam, Chandrikapersad Santokhi, aseguró este miércoles que se abre una nueva etapa en el país con el inicio del proceso de atraer inversores extranjeros para explotar las importantes reservas de bauxita.
La iniciativa será supervisada por el recientemente formado Comité para el Desarrollo de Surinam Occidental Bakhuis Bauxite, que evaluará las solicitudes de propuesta de las empresas.
Compañías de China, India y de países de Oriente Medio ya han indicado informalmente que quieren participar en este proyecto en el oeste de Surinam, para el que el Gobierno tiene la intención de emitir la concesión en el cuarto trimestre de 2024.
Las autoridades surinamesas prevén que será necesario invertir entre 10.000 y 12.000 millones de dólares durante un período de 10 años para que el proyecto despegue.
Desde la década de 1970, se han hecho varios intentos de explotar las más de 320 millones de toneladas de reservas de bauxita en el área de Bakhuis, pero estos intentos no han tenido éxito debido a causas internas y externas.
«Hoy la situación es diferente. Una población mundial en crecimiento, la adaptación al clima y las nuevas tecnologías energéticas y de construcción significan que la demanda de aluminio –y por lo tanto de su materia prima, la bauxita– aumentará en las próximas décadas», dijo Santokhi.
En 2015, más de 100 años de producción de bauxita en Surinam llegaron a su fin después de que la multinacional estadounidense Alcoa detuviera sus actividades de producción debido al aumento de los costos y la disminución de las reservas, entre otros factores del mercado.
El Gobierno de Santokhi dijo que está trabajando para mejorar la accesibilidad del área para hacerla más atractiva a los inversores extranjeros, y para crear oportunidades para la formación y educación vocacional.
El objetivo es también el desarrollo local, por lo que el Gobierno quiere que cada inversor involucre a las comunidades de la zona.
En declaraciones a la Caribbean Media Corporation (CMC), el presidente explicó que la idea es poner en producción los depósitos de bauxita en el oeste de Surinam junto con los depósitos de Guyana.
Los costos serán compartidos por los dos países, pero las propuestas aún deben ser desarrolladas y discutidas adecuadamente por las naciones vecinas.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Surinam fue uno de los proveedores más importantes de bauxita, proporcionando materia prima para la construcción de aviones de guerra.
EFE