El presidente de Fedeagro, Celso Fantinel, aseguró que el sector agrícola continúa con los mismos problemas de los últimos tres años, como dificultad para acceso al crédito, deterioro de los servicios públicos y fallas en el suministro de combustible.
Productores agrícolas inician 2024 golpeados y contra las cuerdas.
En el reciente ciclo agrícola norte-verano se dejó de sembrar 30% de la superficie prevista por falta de diésel y financiamiento. Productores esperan hasta un año para cobrar sus cosechas.
Por ejemplo, recientemente vi tres estaciones de servicio al sur de Aragua y ninguna estaba funcionando y conté siete en Miranda y solo una funcionaba, pero con largas colas. Los cortes eléctricos se han agudizado los últimos seis meses, y estos son problemas que nos mantienen preocupados, señaló Fantinel.
Otro de los aspectos que afecta la producción de alimentos, según el titular de Fedeagro, es el cambio climático, con abundantes lluvias en algunas regiones y sequía en otras durante los meses de agosto, septiembre y octubre.
Más superficie sembrada, pero menor rendimiento
En el oriente del país logramos sembrar 27% más superficie de maíz blanco y amarillo respecto al 2022. De 270.000 hectáreas pasamos a 347.000, pero en rendimiento perdimos más del 25%», apunta Fantinel la nefasta contradicción.
«Estábamos cercanos a los 4.000 kilos por hectárea y volvimos a bajar a 2.900 kilos, básicamente por la afectación que tuvimos en el sur de Aragua, Guárico, Anzoátegui, Monagas y particularmente en Bolívar, que se vio afectado por sequía manifestó Fantinel.
En el caso del arroz, Fantinel explicó que hubo una pérdida en el rendimiento de 4% por sequía, los cortes eléctricos y la falta de diésel.
Productores contra las cuerdas
El presidente de Fedeagro, Celso Fantinel, agregó que un productor debe esperar un año o más por el pago producto de sus cosechas, lo que provoca una disminución en sus ingresos producto de la inflación que vive el país.
Hicimos un seguimiento a la papa, la cebolla, el tomate, el ají durante la Navidad, y en el campo esos rubros no subieron sus precios cuando tradicionalmente suelen aumentar; eso evidencia el bajo poder de compra del venezolano», apunta el dirigente gremial.
«Eso no pone contra las cuerdas, porque los productores no pueden cubrir sus costos, mientras que, en supermercados y mercados a cielo abierto, esos precios se multiplican por 5 al consumidor resaltó.
Ante este escenario, el presidente de Fedeagro, considera que el Gobierno Nacional debe velar que el productor tenga acceso al crédito para la adquisición de maquinaria y equipos con nueva tecnología, en función de incrementar la producción nacional.
Precios justos al productor: un reclamo histórico
Reiteramos nuestra propuesta de que los precios al productor mejoren», insiste Fantinel en un reclamo que ya es histórico en la vida del agro en Venezuela.
«El rubro bandera, que es el maíz blanco y amarrillo, se ha visto afectado por precios a la baja en los mercados internacionales, lo que nos pone en un punto de no ingreso«, precisa Fantinel.
«Los productores de café tampoco pudieron alcanzar el precio de referencia que les marcó la Corporación Venezolana del Café, que era de 160 bolívares promedio por el quintal, y muchos tuvieron que vender a 90 o 100 dólares, apuntó el presidente de Fedeagro.
Sobre el ciclo norte-verano que abarca la siembra de ajonjolí, frijol chino, girasol, y culminó el 30 de diciembre, el presidente de Fedeagro, Celso Fantinel, informó que se dejó de sembrar 30% de la superficie por falta de diésel, flujo de caja y financiamiento a los productores.
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