Es acto o dogma de fe, es reacción antiestatista, por gravar con impuestos a los empresarios. Uno de sus pilares, Adam Smith, defendía que todo sistema económico debía basarse en la ley de la oferta y la demanda. Especie de ley natural. Algunos, la quieren exhibir como credo. Por ello, propongo, un conjunto de preguntas que permitan que cada cual analice y luego disponga, si desean o no seguir al señor Adams y sobre todo votar en 2024 por sus viudas.
¿Usted es, políticamente, de derecha o de izquierda? ¿Aceptaría que el próximo gobierno manejara la estrategia de borrar de todo documento oficial o ley la palabra gratuito? Ej si vas a un CDI debes pagar $ 10 por tu cita. O apoyas que no existan servicios educativos, ni médicos, gratuitos en nuestro país.
Esperado, porque el liberalismo y el conservadurismo se clasifican juntos y tienen como filosofía política una orientación de derecha. Su filosofía impone, como credo, que los precios los fija el mercado y niega que otro pueda poner un precio cualquiera que sea el bien a consumir.
Nos llevaría, en adelante, a pagar la gasolina en $ 2 por litro. Que no exista la subsidiada. Que la empresa telefónica comience a cobrar en $, a precio internacional, por tus llamadas.
Pero esto no es una presunción, sino un dato terriblemente real y observable públicamente. Nos lo demuestran las 300 leyes que el gobierno del argentino Javier Milei acaba de derogar y suplantarlas por un “autobús” de nuevas leyes. Es claro, que a nivel de análisis es discusión filosófica. Pero, donde nosotros lo padecemos, es en el mundo real, que de inmediato nos demuestra su rigor.
¿Qué opina usted de la privatización y venta por acciones de todas las empresas que pertenecen al Estado? Nadie duda que se puedan someter a una reingeniería, sus métodos y estructuras organizativas. Al contrario, solicita que se lleven a cabo.
Pero, que se proponga hoy, como lo asoma la inhabilitada MCM, en su sueño “político hacia el 2024”, – al copiar el esquema de Milei-, cuando, Venezuela tuvo su Caracazo, en febrero de 1989, es una limitada, absurda y estrecha visión para entender y buscarle estrategias nuevas para nuestra política. Es que la oferta engañosa del cielo liberal, como vía para atacar las opciones del ideal del colectivismo en nuestro país, tiene poca acogida. Al contrario, demuestra un amplio espacio para la frustración de los menos aventajados sociales.
