Alfredo Monsalve López: EL 4º majadero

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La definición del vocablo majadero, tiene muchísimos sinónimos. Imbécil, mentecato, asno, tonto, loco, bestia, besugo, mastuerzo, enfermizo,y pare usted de contar. Alguna fuente señala que majadero “se aplica a la persona que tiene poco juicio o se comporta de forma imprudente”. Es decir, que si nos adentramos a la concepción misma de la palabra, se deduce entonces que ser majadero es actuar con inocencia. En otras palabras, realizar algo que pensamos nos va a beneficiar, pero que precisamente, por ese idealismo que llevamos intrínseco, somos capaces de cometer errores con el afán de alcanzar una meta.

Revisando Internet, encontré en la página de “Aporrea”, la siguiente declaración: “En la historia quedó grabada para siempre aquella expresión usada por El Libertador Simón Bolívar al referirse a Jesús Cristo, Don Quijote y el propio prócer Venezolano. Su contenido textualmente era el siguiente: ´Los tres más grandes majaderos del mundo hemos sido Jesús Cristo, Don Quijotes y yo´. De hecho el más grande de los Americanos estaba tratando de evidenciar la majestuosidad, importancia y envergadura de los objetivos que se habían trazado cada uno y de sus logros efectivos, al igual que la valentía al afrontarlos con tal determinación”. De lo que se interpreta que, el hombre más grande que ha parido América, El Libertador Simón Bolívar, se llamaba así mismo, majadero. Tal vez por haber fracasado en su intento genuino de construir una verdadera patria inmensa: La Gran Colombia.

En función de estas consideraciones y de algunos acontecimientos que hoy están ocurriendo en nuestra nación, desde todos los espacios, económico, político y social, vemos con asombro (tal vez para algunos ya se ha perdido la capacidad de asombrarse), como se pierde, al igual que El Libertador, el intento por lograr que las cosas funcionen como debe ser. Usted se encuentra con obstáculos, con muros de contención cuando intenta realizar alguna actividad dentro de su ámbito de trabajo o personal. Los ejemplos sobran a granel. El mismísimo pillaje y rapacería, enquistados dentro de algunas instituciones públicas, se pasea por los diarios de circulación regional y nacional sin que haya culpabilidad alguna. Funcionarios que hacen de su trabajo el medio para hacerse de un dinero mal habido. Habrá empleados que señalen que él o ella no está metido(a) en el saco de las transgresiones. Obvio. Hacen su trabajo con decoro.

Confiando en las acciones de algunos funcionarios del sector oficial, entonces somos considerados majaderos. Porque, bástese que usted intente realizar una gestión, de inmediato aparece, desde hace décadas, la “institucionalizada” expresión: “Cuanto hay pá eso”. Es decir, ven al ciudadano como un verdadero pendejo. Y lo lamentable es que si usted no “cae en la trampa”, olvídese de lo que usted busca. Porque, o no lo encuentra o se lo retienen o lo mandan a volver otro día. Y dicho sea de paso, muchas horas perdidas. Mire usted a los que hemos llegado en esta Venezuela del siglo XXI, un alto funcionario gubernamental considera pertinente saber en que invierte el tiempo el ciudadano común. ¡Hágame usted el favor!

Miremos que están haciendo ahora mismo en la República de China. Nada más y nada menos que preparando a los niños y niñas para que ejerzan funciones profesionales en muy corto tiempo. Que aprendan a desempeñarse en enfermería, comercio,  abogacía, deportes, tecnología, educación, amas de casa, entre otras actividades. Mientras que en nuestro país, pareciera que las cosas funcionan al revés. Interpretando al Libertador, cabe la pregunta: ¿Se considera usted un 4to majadero?  Se abre el debate.

alfredo.monsalve10@hotmail.com

 

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