Sin lugar a dudas que uno de los programas de gobierno, serio, posible y realizable presentado al país y a la comunidad internacional, se denomina Venezuela Tierra de Gracia.
Dicho programa define una ruta ambiciosa para alcanzar la libertad, democracia y prosperidad y será puesto en práctica y en términos inmediatos, una vez que María Corina Machado, resulte electa como la próxima presidente de Venezuela.
Cabe destacar, que en su elaboración y definición, participaron brillantes profesionales venezolanos, conocedores a fondo de la realidad actual de nuestro país, que permitirá construir desde ahora y para el devenir, una forma distinta de convivir y gobernarnos entre los venezolanos.
El fracaso en todos los órdenes por parte de quienes dirigen actualmente al país, con niveles de pobreza inimaginables, con más de 8 millones de venezolanos, que deambulan por el mundo, en busca de mejores condiciones de vida, y por el carácter corrupto, dictatorial y antidemocrático que los caracteriza, es la razón por la cual, hay que enfrentarlos y derrotarlos en los próximos comicios, pautados caprichosamente por el actual CNE, para el día 28 de julio del presente año.
Dicho programa de gobierno, se regirá por tres principios fundamentales. El primero de ellos , orientado al fortalecimiento de la sociedad civil y a la cultura de la participación ciudadana , el respeto a la dignidad humana y el potencial creador de las personas en libertad , como factores imprescindibles para el desarrollo del país.
En segundo lugar, como objetivo fundamental, iniciar el proceso de reinstitucionalización del país, para proteger la vida, la libertad y la propiedad de cada ciudadano. En otras palabras, un Estado que este realmente al servicio del ciudadano.
Por último, desarrollar una economía de libre mercado, dónde la competencia entre los factores productivos del país, se destaquen en sus niveles de productividad, eficiencia y calidad de los bienes y servicios en favor de todos los venezolanos.
Cómo ya lo dijimos anteriormente, es un programa de gobierno, que disminuirá considerablemente los niveles de pobreza y desigualdad social, el restablecimiento del lugar preponderante que le corresponde a Venezuela en el mundo y el rescate de la dignidad y el orgullo de ser venezolanos.