Luis Bravo: A propósito del 28J

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El dilema de ustedes no es ni debe ser entre Machado y Rosales. El dilema es y debe ser entre democracia o autocracia. Fernando Mires @FernandoMiresOl

Esta Ley contra el fascismo que está a punto de ser discutida y aprobada en la AN deja al desnudo el carácter totalitario que se quiere instaurar en Venezuela. No hay cosa más humano en un pueblo que defender sus derechos. Raquel Figueroa @raquel

El profesor Genaro Mosquera en artículo en El Nacional que transcribimos, refiere a un aspecto fundamental de la Alternativa Universitaria que se construye a propósito del 28J, como es el papel de los gremios universitarios en las luchas por la autonomía universitaria. Luchas que están,   se acepte o no, en sintonía con los esfuerzos por la defensa de los derechos sociales de los trabajadores universitarios y del trabajo en general, afirmamos nosotros.  Defiende Mosquera la posibilidad de avanzar en la articulación del esfuerzo gremial con el de las autoridades para el desarrollo de la institucionalidad, sin abandonar las identidades propias. Además llama la atención respecto a un asunto clave para el destino de las instituciones reales, al realizar una valoración positiva de los gremios en la edificación de la nueva universidad, desechando los atávicos prejuicios que asociaban a lo gremial con la anti-institucionalidad.

Algo parecido a lo que destaca el profesor Mosquera para la educación Universitaria podría decirse del enorme esfuerzo que se ha hecho en la Unidad Democrática del Sector Educativo (UDSE) para articular los intereses (gremialmente interpretados) propios del trabajo en educación básica con las necesidades de superación de la emergencia humanitaria compleja que sufre nuestro país.

Respecto al tempo político que explica buena parte de lo que hoy es la gestión y la política pública nacional llama la atención la indiferencia de las autoridades por el lamentable estado de la educación de las mayorías, y por el lado de la Alternativa Política hay que decir que mal que bien se ha levantado una candidatura con posibilidades de triunfo, frente a toda la incomprensión del momento político. Se han colocado los intereses de la nación en lugar de las formas providenciales de oferta electoral. Ahora falta aprovechar la oportunidad poniendo los reclamos del país frente a la agresiva intención de colocar los intereses e imagen personal antes que los del país, en lo que quizás sea la última oportunidad electoral que tenemos para el cambio democrático. Todo lo que haga falta para superar la mejor arma del proyecto político en el poder: la abstención. A pesar de que una vez más la democracia va en bicicleta en competencia con dos enormes góndolas, la vesania del continuismo por un lado y, por el otro, la incomprensión de quienes interpretan solo emocionalmente la necesidad de cambio político. Se pudo en Barinas… se puede en Venezuela.

Revista Nº 998 Memoria Educativa Venezolana, paso a paso

 

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