Ya tenemos opción, muy buena por cierto, ahora a trabajar duro dentro y fuera del país para construir la Alternativa triunfal. Una candidatura como la Edmundo González Urrutia es una garantía de transición sin las estridencias de la venganza, de espaldas a los problemas de país, sin exclusiones odiosas, ni triunfalismos baratos. Buena noticia si se considera el baño de realidad que está soportando la venezolanidad, frente a la intransigencia del continuismo y la escasa importancia que tienen nuestros problemas nacionales frente a los grandes acontecimientos que marcan el paso de la historia reciente. A los grandes factures externos importa más la necesidad de una administración más racional de las reservas petroleras que bien podrían ayudar a preservar la civilización frente a la barbarie desatada. Pero lo cierto es que nuestra lucha democrática por la democracia tiene que dejar de ser una competencia de popularidad, para hacerle frente unificado a un continuismo degradante de los valores más queridos de la nacionalidad. Desechando el mesianismo y las soluciones mágicas encarnadas en figuras providenciales, o “países buenos”. Pacientemente tenemos que construir un frente común alrededor de una candidatura que ya está en la calle pero acosada por la felonía de un autoritarismo sin freno.
En realidad, unidad siempre ha habido. A “su manera”, claro. Unidad en la diversidad, para emplear el eufemismo. Pero así apoyaron la primaria, reconocieron a María Corina y postularon a Yoris. Ahora, la designación de Edmundo González más que unidad es una muestra de “rebeldía”. Pedro Pablo Peñaloza @pppenaloza
Pareciera que por fin han entendido que el candidato de la oposición lo elige la oposición. Ahora viene un trabajo duro y excitante. Por un lado hacer conocer a @EdmundoGU y por el otro hacer entender a la gran mayoría de los venezolanos que su participación, no sólo votando sino haciendo que los demás voten es fundamental.
Ojalá logremos dibujar el país de la reconciliación, la paz y el progreso que tanto se desea.
Eso es lo que toca ahora: Votar y Luchar ¡Votar y Ganar! Héctor Manrique @manriquehector
A quienes malvivimos de nuestro trabajo en educación nos toca seguir delineando una Alternativa Educativa, que atraiga por la sinceridad de su argumentación y que se proyecte en el tiempo, que bien podría ser de esta manera, si cabe: Ahora, ya, con la urgencia que impone la escasez de tiempo y dinero, (1) en lo que nos separa del 28J hay que producir un Manifiesto Electoral que motive la conversión del descontento y oriente la movilización electoral de los educadores. (2) Antes y después del 28J hay que diseñar un Programa de Gobierno Educativo, con alta sintonía en las realidades que todos conocemos vía la información que están produciendo los gremios educativos, la academia y las organizaciones partidistas y de la sociedad civil conmovidas por la importancia que tiene la educación para el futuro del país. Para ello hay que perfeccionar con cierta urgencia todo lo que se ha venido discutiendo y documentando respecto al qué hacer sanear la gobernanza de una educación en modo de colapso. Ese programa de gobierno debe orientarlo la Plataforma Unitaria y (3) acrisolarse en un conjunto de Acciones Viables Para Los Primeros 100 Días De Gobierno, La Puesta En Marcha Del Gobierno De Transición. (4) También, ese programa debe producir orientaciones precisas para lo que sigue a los primeros 100 días, es decir para los más de cinco años restantes hasta el proceso electoral siguiente, en la dirección de orientar el país educativo frente a las realidades que supone poner a la Educación Nacional De Cara Al Siglo XXI Civilizado.
Claro está no se trata de fórceps para la realidad cotidiana del gobernar la educación en condiciones muy adversas, sino de líneas maestras que permita visualizar las grandes carencias que puedan acumularse, e ir solucionando con pie de plomo la gran cantidad de problemas que supone una transición pedagógica del país.
Revista 2001 Memoria Educativa Venezolana, paso a paso