El humor es la bendición más grande de la humanidad. Nada se resiste a un ataque de risa. No hay mejor forma de levantar tu ánimo que levantar el ánimo de los demás. Mark Twain.
El arribo al poder de Hugo Chávez produjo innumerables desastres que no es mi intención enumerar. Ya se han ocupado de analizarlos uno por uno, sesudos historiadores, economistas, politólogos, sociólogos, psicólogos, psiquiatras y otros especialistas en estudiar catástrofes. Por supuesto que abunda la literatura sobre el fenómeno inédito de la destrucción deliberada de un país.
Hoy quiero hablar de algo más que el chavismo se empeñó en liquidar: el humor. Como cosa curiosa en el diario El Nacional escribía un grupo de consagrados humoristas (unos mejores y otros peores) que al cuadrarse con el ideario chavista cuyas insignias fueron el odio y el resentimiento, perdieron todo sentido del humor para transformarse en vertedores de veneno. Ya he comentado antes que, en medio de esa mutación de humoristas a energúmenos, surgió uno quien a pesar de su inconmovible chavismo, se reveló como un excelente humorista. Me refiero a Clodovaldo Hernández, el muy circunspecto reportero que cubría la Cámara de Diputados para El Universal.
Laureano Márquez, Emilio Lovera, Claudio Nazoa y otros practicantes del humor que surgieron en la medida en que el Chavismo-Madurismo les avivaba la chispa, fueron acosados, cuando no perseguidos y algunos hasta obligados a dejar el país.
Mi propósito en esta nota no es solo hacer ver como el autoritarismo de un régimen no soporta que se hagan chistes o burlas a su costa, –sino también como al verse acorralados y sin oxígeno– han hecho de su campaña electoral una sarta de estupideces sin que falte la vulgaridad que les es inherente.
Una recuerda aquellas campañas electorales de los cuarenta años de democracia: Acción Democrática tuvo la suerte de contar con el talento musical de Chelique Saravia compositor de «ese hombre si camina», «Con Carlos Andrés son blancas las navidades» y muchos otros jingles que quedaron grabados en la memoria popular. Sumados los videos como el del salto acrobático de CAP sobre un charco. Los creativos de Copei y del MAS no se quedaban atrás con sus inteligentes y divertidas cuñas preelectorales.
Soy fan de YouTube por la diversidad que ofrece y como supongo somos muchos sus usuarios, los creativos (????)del candidato a la eternización tratan de convencernos de las bondades de su gestión que dura ya 11 años. No voy a mencionar todas porque mi paciencia no da para tanto y existe una opción que es «omitir» Una de las más insólitas por asumir que los destinatarios somos estúpidos, es la que asegura que gracias a la gestión del candidato a la reelección Venezuela produce el 97% de todo lo que consume.
La tapa del frasco es otra en la que aparece un gallo algo fané y descangallado que definen como el gallo pataruco y enseguida un gallo pedante, echón, con una cresta tipo corona Miss Universo que la voz en off identifica como el gallo pinto. Lo interesante es que jamás se identifica a los dos gallos y hay que meterle mucho al meollo para saber cuál es el pataruco y cuál el pinto. Pero si se atiende a las encuestas y a los actos de masas de uno y otro gallo, tenemos la respuesta.
Abogada, parlamentaria de la democracia – @Paugamus