Carlos Ñáñez: Vuelvo

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El que ha superado sus miedos será verdaderamente libre. Aristóteles.

Esta columna la escribo, a escasas horas del evento electoral en nuestra destruida, humillada y asolada patria, justo me acompaña una llovizna pertinaz propia de esta fecha, espero que sea un augurio de Dios, quien nos bendice, cual supremos Autor enviándonos ese sublime aliento que embrida libertad y esta escondida en una de las estrofas de nuestro himno nacional, canción de cuna, que nos hace saltar las lágrimas a quienes hemos perdido todo y estamos minimizados al expolio interno y a nuestros hermanos que eligieron el destierro, para escapar de la bestia roja del Fascismo.

Esta es una cita importante, en la cual “Clío la Historia, musa hija de Apolo” (Hesíodo, 2008), escribirá en su papiro, lo que tenga que suceder, lo que la lógica y la racionalidad impelen al relato histórico, como “artesanía del intelecto” (Mill Wright, 1999), esa habilidad artesanal que bajo sobrevivencia nos lleva a su empleo, para determinar la narrativa histórica, es justo lo que se desarrollará a escasas horas de este 28 de julio, fecha análoga al 05 de julio de 1811, al 23 de abril de 1858 y al 23 de enero de 1958, año este de nuestra antepenúltima transición, esa que “sirvió de ejemplo a los españoles en la década de los setenta, para caminar de la mano de la libertad” (O Donel, G: Smitter,G, 2021), el día de mañana es el día señalado para construir un proyecto de nación. Es 28 J, mi generación esa que envejeció bajo el yugo de esta revolución del hambre, la envidio, el odio y la maldad, tendrá la posibilidad de vivir una transición hacia la democracia, reencontrarnos con los nuestros y conspirar juntos, que significa respirar los aires de la casa vacía otra vez devuelta, la entrada de la justicia erguida y la decencia.

El otro escenario es el triunfo de la barbarie, la reedición de la Habana derruida, de los escombros que caen a pedazos, de una tierra en donde ser libres es una imposibilidad, convertirnos en otra pústula más de un mundo con anestesia del alma, un circo del horror, siendo el destierro el único cálculo para terminar nuestras vidas bajo la derrota, aún para mi generación hay intersticios perversos, que nos remueven la moralidad y nos permiten sortear la ola, no me refiero jamás a la cohabitación, sino a la diversificación de tareas, para hacer más llevadera la carga, la instrumentalización de nuestros talentos rematados, por unos cuantos dólares que sirven para amortiguar el hambre, pero el hombre de a pie, el obrero, el trabajador informal están condenados a la miseria del ostracismo de un régimen connaturalmente aporofóbico, esos no aguantarían seis años más, así como no los aguantarían los enfermos de cáncer, los pacientes renales y cualquiera quien se enferme en la frenética y líquida Venezuela de Maduro.

Mañana todos a votar por la decencia, la libertad, la justicia, el bienestar, por la memoria de nuestros muertos que quieren que votemos, cada hora llegará con noticias falsas, aviesas, la prueba es psicológica, emocional, intelectual y espiritual, estas líneas las escribo con la misma angustia, de millones, pero con la esperanza de que por primer vez en estos mustios veintiséis años, se nos está ofreciendo una esperanza concreta devenida fe y voluntad, nuestras plumas irredentas quedan en suspenso, más no en letargo, nuestras cátedras aún libres siguen y seguirán siendo, las barricadas del libre pensamiento, ese que acude a la Universidad, para hacerse crítico y subvertir el orden natural de las cosas.

Para mi generación el día de mañana, no es una fecha más, no es una probabilidad es la posibilidad de sobrevivir o no, todo está consumado y esta columna es la referencia documental, de la absoluta propiedad de mí relato, frente a estos cueles, a quienes les dejo una máxima de Séneca. “ Tu poder radica en mi miedo, yo ya no tengo miedo, tú ya no tienes poder” (Séneca, 2007) Séneca a Nerón.

“Esta Noche la libertad”, (La Pierre, 2000) ese es el condicionamiento, para este evento de mañana que tu miedo no le insufle poder al opresor.

¡Nos vemos en libertad y en la lucha por un país mejor!

Referencias:

-Hesíodo. (2008). Teogonía. México: Universidad Nacional Autónoma de México
UNAM.

-La Pierre, D. (2000). Cette Nuit La Liberte. Paris: La livre de Poche.

-Mill Wright, C. (1999). La imaginación sociológica. Madrid: FCE.

-O Donel, G: Smitter,G. (2021). Transiciones desde un gobierno autoritario:Conclusiones tentativas sobre las democracias inciertas. Madrid: Prometeo
ediciones.

-Séneca. (2007). Tratados sobre la ira. Tenerife: Artemisa.

X @carlosnanezr – IG @nanezc

 

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