Mireya Rodriguez: ¿Es la Democracia una Debilidad Frente al Totalitarismo en Venezuela?

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La Democracia Bajo Ataque

Desde la llegada de Hugo Chávez al poder en 1999, Venezuela ha vivido un sistemático proceso de erosión democrática, que ha culminado en un régimen totalitario bajo el mando de Nicolás Maduro. Lo que comenzó como un proyecto político con tintes populistas, evolucionó rápidamente hacia un estado que ha instrumentalizado la democracia para asegurar su permanencia en el poder, convirtiéndola, paradójicamente, en una herramienta de opresión. Este artículo explora hasta qué punto la creencia y defensa de la democracia que muchos venezolanos llevamos como esencia, han sido manipuladas por el régimen de Maduro, y cómo ésta ha facilitado la destrucción de la institucionalidad y la creación de un narcoestado criminal.

Democracia vs. Totalitarismo: Una Lucha Desigual…

La democracia se fundamenta en principios de participación ciudadana, respeto por los derechos humanos, transparencia y alternancia en el poder. Estos principios son esenciales para el funcionamiento de cualquier sociedad que aspire a ser justa y equitativa. Sin embargo, en Venezuela, estos principios han sido manipulados por el régimen para crear una fachada de legitimidad. Maduro y sus aliados, influenciados por su ideología anti-burguesa y antiimperialista, ven la democracia como un concepto burgués que debe ser destruido hasta consolidar un proyecto político basado en el control absoluto.

La Democracia como Instrumento de Destrucción de la Democracia…

Desde la llegada de Chávez al poder, en Venezuela se han realizado más de 30 elecciones en distintos niveles de gobierno. Estas elecciones, lejos de ser un ejercicio democrático genuino, han servido como un mecanismo de división y/o cooptación de la oposición y de legitimación ante la comunidad internacional. A través de estas elecciones, el régimen ha comprado legitimidad, mientras destruía simultáneamente la institucionalidad. Al mantener esta fachada, el régimen ha logrado desgastar a la oposición y desviar la atención de la comunidad internacional, que en algunos casos ha reconocido estos procesos electorales, a pesar de las irregularidades evidentes y fraudes recurrentes.

La Ideología Antimperialista como Justificación para el Totalitarismo

La retórica antiimperialista, anti burguesa y antifascista es central en la narrativa del régimen. Este discurso justifica la represión de cualquier forma de disidencia y la eliminación de los contrapesos necesarios en una democracia. Para Maduro y sus aliados, la democracia no es más que un instrumento del capitalismo occidental que debe ser combatido. Esta visión ha permitido al régimen utilizar todos los medios a su disposición, incluyendo la violencia, la represión y la manipulación de procesos electorales, para perpetuar su poder.

Estrategias del Régimen y sus Aliados para Bypasear la Democracia

La cooptación de las instituciones públicas ha sido fundamental para la consolidación del poder en Venezuela. El Tribunal Supremo de Justicia, el Consejo Nacional Electoral y otras instituciones clave han sido transformadas en instrumentos del régimen. Además, Chávez y Maduro incorporaron a las Fuerzas Armadas y a asesores externos en la gestión pública, facilitando el manejo de actividades ilícitas como el narcotráfico, el lavado de dinero y el tráfico de armas. Estas actividades no solo han financiado la perpetuación del régimen, sino que han permitido a Maduro y sus aliados evadir las sanciones impuestas por Estados Unidos y Europa, utilizando mecanismos sofisticados e ilegales para burlar la supervisión internacional.

Venezuela como Narcoestado Criminal

El binomio Chávez-Maduro convirtió a Venezuela en un narcoestado criminal, realidad suficientemente documentada y a disposición de los aparatos de inteligencia, sobre todo de USA y la UE. Las instituciones que deberían proteger a los ciudadanos y garantizar el estado de derecho han sido cooptadas por una élite que utiliza el poder para saquear el país, ante la mirada de todo el mundo. Los recursos del Estado, en lugar de ser utilizados para el bienestar de la población, se han desviado hacia actividades ilícitas que benefician a una pequeña cúpula y a sus aliados. Esta transformación ha sido posible gracias a la destrucción sistemática de la democracia y la utilización de elecciones fraudulentas para legitimar el régimen.

 Repensando la Defensa de la Democracia

La defensa de la democracia en Venezuela ha sido utilizada por un régimen que ha pervertido sus principios fundamentales. La fe en los procesos democráticos, en un contexto donde estos han sido completamente manipulados, ha debilitado a la oposición y ha permitido al régimen perpetuar su control. Por ello, urge repensar las estrategias de defensa de la democracia, reconociendo que, en un entorno tan corrupto y autoritario, los métodos tradicionales ya no son suficientes. La comunidad internacional y los movimientos prodemocráticos dentro de Venezuela deben adaptarse a esta nueva realidad y buscar formas más efectivas de contrarrestar el poder del régimen y del eje totalitario al cual sirve, manteniendo viva la esperanza de un futuro donde la verdadera democracia pueda florecer.

@politicamentehoy – Xpoliticaymente

 

 

 

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