El mundo está sometido a los llamados cambios planetarios, de época; del cual el ciudadano sabe poco o nada en razón de que no existe interés en los impulsores de los cambios que usted sepa de qué se trata; de hecho, a usted tampoco le consultan estos cambios, simplemente le llegan.
Por esta razón necesitamos como sociedad estar políticamente formados para no votar como ha sucedido por unos desinformados sobre lo que acontece en el mundo, y terminen siendo la pieza que otros manejan a sus intereses.
La sociedad en todo el mundo se ve impactada, y evoluciona por el imperio de la tecnología que determina nuestras relaciones sociales, de producción y trabajo; la Revolución Industrial encontró en la máquina de vapor la modernización del transporte y de la producción; luego con el petróleo, sus derivados; la electricidad y nuevos inventos, se siguió transfiriendo la actividad económica del hombre a la máquina; ahora la Inteligencia Artificial realiza las funciones que requieren inteligencia cuando se llevan a cabo, la computadora asumiendo tareas complejas que cambian de raíz el concepto de individuo y sociedad.
¿Cómo funciona y quiénes son? En Davos se reúnen anualmente 3 mil empresarios y dirigentes, allí definen la agenda global para lo público y lo privado, allí se definió la agenda 2030; luego la pasan a la ONU donde se reúnen 193 países, aprueban acuerdos que vienen de Davos, y los países los hacen leyes internas y así le llegan al ciudadano.
Como usted apreciará, esos políticos por los que votamos son para que con formación sepan qué se debe reprobar y qué sí se debe apoyar, con criterio. Entonces seguimos, qué sucede; en el Foro de Davos ha señalado que el destino de la humanidad es la 4ª revolución industrial, que es la revolución tecnológica, la cual por estos mecanismos descritos debe ser asumida por todos los gobiernos como política pública; esta revolución está conformada por la Inteligencia artificial, biogenética, nanotecnología, robótica y la impresión en 3D.
¿Por cuál razón escribo de este tema? Porque la sociedad occidental es víctima de una reingeniería social, por imposición del llamado “progresismo” (de izquierda y derecha). Es una corriente que busca la reforma política, económica y cultural, utilizando como mecanismo para lograr el cambio, la ciencia y la tecnología; para dividir la solidez de los valores de la sociedad occidental, promueven entonces los temas de: aborto, LGBTQ+, alarmismo climático, racismo, multiculturalismo, especismo y animalismo.
Es, por cierto, un movimiento anticristiano y cientificista que quiere sustituir a Dios.
“Izquierda” y “derecha” son términos que nacen con la Revolución Francesa de 1789 y que, desde entonces, los utilizamos siempre para simplificar el complejísimo dominio de las ideologías políticas; hoy, por ejemplo, existen en la influencia de la izquierda, el socialismo del siglo XXI que gobierna a España, el neomarxismo que reunió a los independentistas y socialdemócratas; los llamados globalistas, los de la agenda 2030 y los agrupados en la agenda Woke; por otro lado, encontramos a los libertarios en oposición a los socialistas, los soberanistas contrarios a la implantación de las agendas globalistas, y los conservadores combatiendo las agendas Woke.
Y frente a la 4ª revolución industrial, esta que estamos viviendo, da paso a una nueva filosofía que a nivel mundial se divide entre bioconservadores y transhumanistas.
La diferencia fundamental entre ellas es que los bioconservadores aspiran que la tecnología mejore al ser humano, y los transhumanistas aspiran que la evolución del ser humano esté en manos de la tecnología, incorporando todas las tecnologías convergentes en el cuerpo humano ¿Seguirá siendo humano luego de esto?
Gran parte de las transformaciones de identidad digital en sus distintas formas, el control social por algoritmos, la comida hecha en 3D tecnológica, las redes que crean comunidades más amplias que un país, la influencia de los medios masivos para desinformar…
Bueno, un mundo complejo frente al cual no podemos agachar la cabeza, es imperativo seguir defendiendo la Libertad individual y lo que ella implica en el ser humano, la propiedad, la familia y las instituciones independientes, ese es el norte.
Siempre con Dios
