Directo al grano.
Los siguientes son los bonos que paga Chevron a los trabajadores en las cuatro empresas mixtas donde la estadounidense es socia minoritaria de @PDVSA: PETROPIAR, PETROBOSCAN, PETROINDEPENDENCIA y PETROINDEPENDIENTE.
Bono de alimentación: $400/mes
Bono de producción, seguridad y asistencia: $400/mes
Bono por superación de metas de producción: $200/mes
Son $1.000 dólares al mes en bonos que paga Chevron a más de 2.500 trabajadores venezolanos. Y además Chevron paga a los trabajadores de las empresas contratistas que le prestan diferentes servicios de apoyo a sus operaciones, $600/mes. En total, más 3.000 trabajadores laborando en más de 50 contratistas.
En tanto, esta es la realidad para los empleados públicos, entre ellos los trabajadores de @PDVSA: para profesionales, sin importar que tengan maestría o doctorado, un bono mensual de $90 más un salario mensual de 700 bolívares y cesta ticket de $40. Para los obreros, un bono de $90 más un salario de 130 bolívares mensuales y cesta ticket de $40. Maduro está pagando $8 por utilidades a los trabajadores públicos.
La brecha es gigantesca. La inequidad y la miseria reina en la “Venezuela potencia” de @NicolasMaduro. Sacando a Chevron de Venezuela no se gana en el terreno político, por el contrario, se fortalece a la dictadura y su modelo hambreador. Las sanciones no deben perjudicar a los trabajadores. Las sanciones deben servir para detener la corrupción e incautar las cuentas en dólares y las propiedades de los oligarcas del régimen y sus cómplices en el exterior.
El movimiento sindical decente, en medio de la destrucción causada por el narcocomunismo, tiene que izar de nuevo la bandera de las reivindicaciones de los trabajadores venezolanos para que se restituya la democracia, los salarios y todos los derechos socioeconómicos y que se imponga el mandato popular el próximo 10 de enero. No más dictadura.