Luego del arrebatón de las elecciones presidenciales del 28 de julio, día del segundo entierro de Chávez, se le han venido complicando las cosas al gobierno, interna e internacionalmente.
Pensaron –confiando en la ¨astucia¨ del jefe de campaña derrotado- que el chantaje, y coacción al ganador de las elecciones, en abierta complicidad del gobierno español de Sánchez Begoño, y su súper agente (86 y ½), Rodríguez Zapatero, serían suficientes, y resulta que todo lo acontecido con las múltiples reuniones y declaraciones del Diplomático Edmundo González Urrutia, terminaron por desnudarlos.
A tres meses de los comicios, el CNE en abierta violación de la Constitución, y la Ley, sigue sin ofrecer los resultados conforme a Derecho. Las matemáticas ¨mágicas¨ del desaparecido Amoroso no cuadran. No hay manera de hacer creíbles los ¨resultados¨ ofrecidos por el Gobierno-CNE-Amoroso, ni por el TSJ-Gobierno.
Tampoco las podrán certificar Putin, ni Lukashenko, por más intentos rimbombantes. No hay manera.
Quienes sí certificaron el triunfo arrollador de la oposición, y consecuente derrota de Maduro, fueron las Actas que ya todo el mundo conoce, y reconocen organizaciones como el Centro Carter (único observador internacional aceptado por el gobierno), la OEA, la Unión Europea; la ONU; el Presidente de Chile, y el reclamo conjunto de los gobiernos de Colombia y Brasil por la exhibición de pruebas, es decir, las Actas y el cumplimiento de la Constitución y la Ley.
Los shows de telenovela en la AN con esfuerzos y gritos de clamor patriótico, y aplausos unánimes de propios y ¨extraños¨. Tampoco son suficientes, y no convencen a nadie.
No aceptaron consejos sabios de quien ha ganado, y perdido elecciones, y luego de derrotado se ha preparado con paciencia para volver a ganar democráticamente en su Brasil natal, y por el contrario le indicaron que sus opiniones podía introducirlas en su trasero, al mismísimo estilo de guapo de barrio bajo.
Y como si fuera poco el insulto, salió el impresentable del Fiscal General del PSUV, perdón de la República, a decir que Lula es un agente de la CIA. Vaya, vaya.
Resulta que ahora su aspiración de entrar al mercado de los BRICS se ha visto frustrada, precisamente por el veto de su antiguo aliado Brasil, cuyo Presidente es el consejero no atendido, e insultado salvajemente. Qué puntería.
Esta alianza económico-político-social creada por Brasil; Rusia; China, e India en 2006, con la incorporación de Suráfrica desde 2010, es una respuesta a la necesidad de crear contrapesos al poder cuasi unipolar de los EEUU desde el final de la guerra fría y la caída del comunismo y sus satélites.
Este bloque representa el 42% de la población global; el 30% del territorio mundial; el 23% del PIB, y el 18% del comercio mundial. Comporta además, el 16% de las exportaciones, y el 15% de las importaciones de bienes y servicios. Es obvio que cobra importancia geopolítica de primer orden.
No obstante, su existencia es todavía una incógnita, habida cuenta de que no posee –como desean- moneda propia para contrarrestar la amplia influencia del dólar como mecanismo de intercambio universal.
Según la Reserva Federal de EEUU, el dólar ha sido utilizado entre 1999-2019, en el 96% de la facturación del comercio en Las Américas; el 74% en la región Asia- Pacífico, y el 79% en el resto del mundo. También se usa en el 88% de los cambios de divisas extranjeras, y en el 59% de todas las reservas de divisas en todos los Bancos Centrales (Atlantic Council). Así mismo, es el dólar la moneda más usada en las transacciones petroleras. Menuda tarea le espera a los BRICS para competir.
No luce fácil desdolarizar la economía mundial, con la amplia influencia que nació en los acuerdos de Bretton-Woods en 1943-1944, suscrita por 44 países, incluida la Unión Soviética de entonces.
Venezuela que aspiraba entrar en ese mercado, no pudo y ahora debe esperar. Bien podría –visto el menguado desarrollo de su economía interna- probar a reintegrarse a su mercado natural, en el que alguna vez fue líder, como la Comunidad Andina, @Mibelis dixit.
Del proyectado crecimiento económico del 8% para 2024, apenas llegó un rebote del 4% que no llega a las grandes mayorías depauperadas por el pésimo desempeño del gobierno en 25 años. La pobreza y la falta de servicios esenciales están al galope.
Todo este conflicto que complica la existencia irreconocible de un gobierno de fuerza, no se detiene, y ahora se ve salpicado gravemente por el escándalo de corrupción que está teniendo las más bochornosas páginas de la política española.
Allá en la Madre Patria, ya los tribunales dan cuenta de la imputación de la mujer del Presidente; del ex Ministro Abalos (ex segundo del gobierno y del PSOE); Iñigo Errejón (depredador sexual confeso); el empresario preso Víctor de Aldama, relacionado con la VP Delcy Rodríguez y el DelcyGate; los socios de SánchezBegoño, y sus andanzas con meretrices, y el consumo de cocaína pagado con dinero público. En fin, dirán los españoles respecto de su gobierno, como en la serie famosa: ¨Aquí no hay quien viva¨.
Ingobernabilidad pura. Pero qué enredo, caballero.
@romanibarra
